Lana.
En el suelo hay demasiada sangre. Color rojo por cada rincón de la Sala. Yo estoy tumbada en el, sin fuerzas casi ni para llorar y con una sensación de vacío en el pecho, angustiante.
A mi alrededor ya no se oye su risa, ya no me iluminan sus ojos, es oscuridad todo lo que me rodea y me duele el corazón por ello.
Es doloroso, desesperante e injusto, porque yo lo quería, él me quería...
—¡Vuelve, por favor! —gritos desgarradores salen de mi garganta y lloro, sacando fuerzas de lo más profundo de mi alma.
—Lana, él no va a volver —no sé quién habla.
—¡No! —grito —¡Él no puede dejarme en un momento como este!
—No puedes obligarlo a quedarse, eso es egoísta, y él ha decidido partir —vuelven a hablar y miro hacia todos lados sin saber aún de quien se trata —Su camino no es contigo y tienes que aceptarlo.
Niego completamente rota de dolor y miro mis manos llenas de sangre —No, no, no...
Mis ojos se desvían hasta mis muslos y los veo empapados en ese líquido rojo, mientras no deja de brotar de mi entrepierna y vuelvo a cerrar los ojos para dejarme caer hacia atrás y dejar de luchar.
Esto ya no tiene ningún sentido.
...
Voy abriendo mis ojos lentamente y frente a mí veo a mi hermana Julie, junto a mi madre, mis abuelos, y papá, que sostiene mi mano y la acaricia despacio.
No sé cuanto tiempo llevo aquí, pero tengo la boca seca y áspera, y un dolor de cabeza, insoportable.
Mi último recuerdo es el de Troy empuñando un arma, y si a eso le sumamos el sueño que he tenido mientras "dormía" No sé si despertarme ha sido una buena idea.
Me incorporo, poniendo una mano en mi frente —¿Y mi Vaquero? —pregunto.
Mi madre echa mi pelo hacia atrás y sonríe nerviosa —¿Cómo estás, hija?
Asiento, aturdida —Solo necesito un poco de agua, pero ¿donde está mi novio?
Cuando mi madre mira a mi hermana que está sería y con sus ojos hinchados, ya sé que algo no va bien, y espero que me cuenten de una vez donde está Lucas si no quieren que me vuelva loca.
Lamo mis labios y mi padre sale a llamar a la doctora.
—Échate hacia atrás, Lana, tienes que descansar, no te viene bien levantarte.
Niego —Me da igual lo que me venga bien, mamá, quiero saber donde está Lucas —me remuevo nerviosa —Yo estoy perfectamente, solo ha sido un simple desmayo.
Vuelvo a incorporarme y mi abuela esta vez es la que agarra mi mano —¿Cariño, por qué no te tranquilizas un poco? En tu estado no es bueno que te alteres.
¿Cómo en mi estado? ¿Es que acaso ya lo saben? ¿Ya saben que estoy embarazada? ¿Pero como...?
Trago grueso cuando todos sonríen a mi alrededor y veo a mi madre emocionarse y acercarse un poco más a mí para rodearme con sus brazos. Han pasado tantas cosas, y las que aún no sé, que ni siquiera me he parado a pensar en mi bebé, pero ahora que parece que saben que estoy esperando un hijo, supongo que no ha ocurrido nada con eso.
—Estoy tan feliz, hija... —mi madre besa mi mejilla y cierro mis ojos —Era la mejor noticia que nos podían dar.
Asiento, sonriendo casi sin ganas —Pensaba contároslo el día del cumpleaños del Vaquero, pero bueno...
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BESOS EN GUERRA (Terminada)
Teen FictionNo hay imposibles para Lana Miller, siempre quiere salirse con la suya, y en muchas ocasiones lo consigue, llegando a ser la excepción a todo si se lo propone. Cómo al "Yo nunca voy a enamorarme" de Lucas Dawson, su atractivo vecino, que a parte de...