⚘『Jardinero de almas』⚘ ✦TaeKook✦

⚘|09|⚘

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Siempre un día de la semana, TaeHyung salía a recorrer el jardín acompañado de su madre con los brazos en los bolsillos sin  nada de por medio entre ambos.

No libros.

No teléfonos.

Día de cero estudio.

Aunque era trivial y a veces hasta cansado, el azabache disfrutaba de que por lo menos por unas horas su madre fuera feliz a lado suyo.

—¿Has pensado en que petunia es tu favorita? —La mujer se inclinó ante una de aquellas hermosas flores tocandola con la yema de sus dedos. —Yo prefiero las de tonos fríos como las púrpuras o las de un rosa intenso y profundo

El chico se apoyó sobre sus rodillas para mirar con atención una peculiar petunia blanca con marcas de guinda.

—Esta es mi favorita sin duda alguna, es... diferente a las demás y tiene colores únicos —Acarició el fino pétalo entre su dedo índice y pulgar.

—No me sorprende que te gusten las cosas así de extravagantes, siempre fuiste un niño un tanto... peculiar

—Uhm, quizás por el hecho de que soy hijo de dioses, ¿No lo crees? Madre —Se reincorporó con una sonrisa ligera en sus labios cerrando por segundos sus ojos.

—Además de eso, eres el único que sale del jardín al mundo humano para comportarte como uno de ellos... eso es realmente curioso. —Flora caminó entre los verdes pastisales que le llegaban debajo de la rodilla con el viento moviendo su cabello. —Y te gusta...

—Tienen... muchas cosas realmente interesantes, y me gusta —Su hijo le alcanzó con rápidez hasta estar a su lado. —De verdad quisiera que... ustedes entendieran todo lo hermoso que hay —Se encogió de hombros.

—¿No crees que sería hora de buscar a una linda chica? —Ambos entraron a el gran castillo subiendo los escalones. —Claro, no humana

—Uh, ¿Un chico también puede ser? —Cuestionó sin pelos en la lengua con la extrañada mirada de Flora sobre él.

—¿Te gustan los chicos?

—Bueno, soy bisexual mamá, me gustan ambos sexos... por eso te lo pregunto...

—Bueno... me gustaría que me dieras nietos pero si te gustan los hombres está bien —Respondió sin darle más vueltas al asunto.

—¿Por qué ya no te ves con mi padre?... lo he visto cortas veces y eso cuando viene —Llevó sus manos a su nuca sentándose en lo que él consideraba el sub trono.

—No lo mal interpretes cariño, yo sólo quería un hijo no un romance de por vida —Acomodó aquel hermoso vestido de seda. —Tu padre fue un buen candidato con... buena genética por así decirlo, y entonces naciste tú

—¿Él me quiere?... ¿Por qué no buscaste a alguien más?...

—Él te quiere, si no; no vendría a verte —Hizo una suave pausa. —No llamaban mi atención

TaeHyung pensaba que lo de su padre y madre fue más allá de una simple noche de intimidad pero no preguntó nada más.

—¿Por qué quisiste sólo un hijo?...

Ella se quedó en silencio mirando a algún punto en el espacio con esa serenidad propia que tenía.

—Simplemente por una conversación que llegué a tener con Febo —Negó con la cabeza. —Cambiemos de tema TaeHyung

—... ¿Soy algún Dios? —Llevó sus manos a su regazo enmarcando una ceja.

Flora dudó de si debía responder o no a aquello... TaeHyung al final era hijo de ella y de Cupido.

—Puede ser que con el paso del tiempo se te de una tarea relacionada a lo que hacemos... en lo personal no creo que tengas algo que ver con el amor o la naturaleza vas más alla de eso... —Sus ojos examinaron a su hijo. —Puede ser algo relacionado con la inteligencia que tienes Tae, desde que eras pequeño te interesó el mundo humano pero Júpiter no me permitiría el dejarte ir solo... recuerda que fue Fortuna quien cuidaba de ti estando allá

—¿Por qué ella y no tú?

—Júpiter aseguraba que al ser la Diosa del destino iba a cuidar que fueras por un buen camino haciéndose pasar por una mujer mortal —La Diosa hizo florecer de su mano una orquídea que acomodó en su cabello.

—Ya veo... —Una mujer que ahí estaba se acercó con una corona negra que colocó sobre la cabeza de el muchacho.

El joven suspiro apoyando su barbilla en la palma de su mano cerrando sus ojos mientras se limitaba a escuchar el cantar de los pájaros...

Su mano fue a su bolsillo derecho con lentitud para sacar su móvil que marcaba "sin señal..." en la esquina superior izquierda.

Deslizó su dedo para desbloquearlo y mirar los chats a los que aún no había respondido deteniendose en el de JungKook por un momento mirando fijamente el mensaje que aún no había abierto para que el menor no pensara que le dejó en visto pues le era imposible contestar estando en aquel lugar ya que el mensaje no se iba a enviar.

Sonrió al recordar como aprobó gracias a él recordando a su vez las lecciones para jugar billar que él le dio a modo de recompensa...

—¿Tus rosas están bien TaeHyung?

Enseguida el susodicho volvió a guardar su móvil retomando la compostura.

—Si mamá, lo están no te preocupes por eso, a veces YoonGi hyung me ayuda o me aconseja en algunas cosas pero nada fuera de lo normal —Le dio una de sus características sonrisas cuadradas.

—¿Nada fuera de lo normal? —Enmarcó una ceja tratando de ver más allá de lo que las palabras de su hijo reflejaban.

—No, todo bien... pero ¿A qué te refieres con "nada fuera de lo normal"? —Citó sus palabras haciendo comillas con los dedos.

—No lo sé... una rosa amarilla o quizás... roja.

Enseguida todos escucharon esas palabras los sirvientes que ahí dentro cumplían sus labores se quedaron en un rotundo silencio, podía jurar que incluso el alegre Hoseok cambió su ceño por uno completamente serio...

Todo se volvió tenso...

En cambio el azabache sólo río como si de una comedia se tratara negando varias veces con un gesto divertido.

—Para nada mamá, todo está bien no tengo una rosa roja ni nada por el estilo, ¿Por qué habría de ser así? Las cosas marchan bien

Se dejó caer en aquel trono con una sonrisa de satisfacción y el ceño tranquilo pensando en que iba a hacer cuando volviera a su departamento.

Sin darse cuenta de que la frívola mirada de Flora estaba puesta sobre él.

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