DOS EXTRAÑOS

12. Verdades a la Luz

[HANNA]

Días después: 8 de Diciembre, 2018

Los Ángeles, California

La idea de venir a una exposición de Cristian, la verdad que no me convencía en lo absoluto, pero Gastón insistió tanto en que lo acompañara, que ahora estoy aquí recorriendo la galería mientras observo las obras de artes de mi ex amigo y amante ocasional.

Camino de la mano de mi prometido, quien se ve sumamente elegante todo vestido de negro y con su abrigo color marrón claro, hasta que llegamos a donde esta Cristian.

Su mirada primero va hacia Gastón y una vez que estamos frente a él, lo saluda cordialmente — bienvenido. — dice y estrechan sus manos. Luego me mira a mí y noto como observa el pronunciado escote de mi blazer un poco más de la cuenta, pero rápidamente me ve a los ojos una vez más — bienvenida a ti también. —

— Increíble tus obras de arte — halaga Gastón y Cristian se sonríe.

— Muchas gracias, estoy un poco nervioso, pero al parecer a la gente le esta gustando. — comenta y me mira — ¿conocías mi trabajo? — me pregunta y tanto él como Gastón me miran como esperando mi respuesta.

— La verdad que no, lo siento. — respondo y su cara es un poema.

Gastón me acaricia la mano y se sonríe — no lo tomes a mal Cristian, es solo que a Hanna le gusta más las esculturas y la arquitectura. — intercede mi prometido y besa el dorso de mi mano — hace algunos meses las lleve a ver a i a Italia y casi muere cuando recorriendo las increíbles catedrales que hay allí, sobretodo que hicimos un recorrido exclusivo por donde casi nunca va el público general. — le cuenta y sé que Cristian debe estar preguntándose desde cuando mis gustos han cambiado tanto.

— Que bueno, la gente suele tener gustos muy distintos a la hora del arte. — explica y de repente, nuestra conversación se ve interrumpida cuando alguien más llega a nuestro lado. —¡Bienvenidos! — les dice y cuando giro mi rostro para ver quienes llegaron, yo siento que el tiempo se ha detenido.

«No puede ser...» Pienso al ver a Tamara y Raúl.

Ambos están bastante cambiados, pero no lo suficiente como para que no sienta que el tiempo retrocedió y me haga creer que estamos en Santa Mónica una vez más.

— ¡Hanna! — exclama Tamara y se acerca a mí para luego abrazarme — ¡Amiga, tanto tiempo sin saber de ti! — continúa diciendo exaltada y no me queda más que responder a su abrazo.

«¿Desde cuándo ella y Cristian son tan amigos para que ella venga a su exposición?» me pregunto y me pongo de pie después de soltarla.

— Hola. — Digo un poco más fría y miro a mi prometido quien está sumamente confundido. — Una amiga de la infancia de cuando vivía en Santa Monica. — Le explico y el de inmediato la saluda cordialmente.

— Gaston Favre, el prometido de Hanna. — explica y la mirada de Raúl se fija en mi haciendo que todo tiemble.

Él se acerca y me abraza — Hanna. — dice y luego me suelta, me sonríe y mis peores miedos se hacen presente — Tanto tiempo sin saber de ti. — continua y hace una pausa — Te ves...muy diferente. — comenta sin importarle la manera que Gastón lo mira. Cristian se acerca a nosotros y todo es muy confuso en estos momentos.

— Muy bien, gracias. — digo fría y distante.

Raul sigue observándome de una manera muy extraña  — ¿Cómo está tu hijo? — me pregunta y de inmediato mi corazón comienza a latir con tanta fuerza que parece que se saldrá de mi pecho.... mis piernas tiemblan y no sé qué hacer ni que decir.

— ¿Su hijo? — pregunta Gastón y la mirada de Cristian y Tamara son de tanta confusión que me hacen querer salir huyendo de aquí — mi prometida no tiene ningún hijo, creo que te confundiste. — le dice Gastón y luego me mira.

— ¿No ma belle? — cuestiona.

«No me salen las palabras, no sé qué responder en estos momentos...»

Raúl me mira fijamente, luego lo mira a Gastón y me vuelve a mirar — ¿Cómo que no tienes ningún hijo? Si yo... — intenta decir y calla. — ¿Acaso lo has perdido? — pregunta y a mi alrededor hay cuatro personas mirándome esperando por mi respuesta.

«¿Cuánto tiempo más puedo ocultar mi pasado cuando irrumpió en mi vida de esta manera? Podría mentir, pero ¿de qué me serviría? El pasado está parado frente a mi dejándome contra la espada y la pared, le miento a mi prometido, o le digo la verdad... son solo dos opciones.»

Miro a Gastón — Él es el hermano de mi mejor amiga Tamara y fue mi doctor en algún momento... Sé que no debías enterarte así, pero es verdad, hace algún tiempo tuve un hijo que falleció a los tres meses de haber nacido. — respondo y realmente no estaba preparada para todo esto — ahora discúlpenme, pero debo salir de aquí. Amor, hablamos de esto cuando llegues a casa. — le digo y le doy un beso delante de todos para luego salirme de la galería corriendo.

Corro por los pasillos y no puedo creer que Cristian haya hecho esto para confrontarme con mi pasado, mucho menos puedo creer que Raul me haya expuesto de esta manera, ¿Por qué lo hizo? ¿Acaso ya se lo dijo a Cristian y Tamara?

Abro la primera puerta de salida que encuentro cerca y salgo del lugar respirando un poco de aire frio queriendo creer que lo ocurrido allí dentro fue solo un mal sueño, pero la voz de Cristian llamándome, me hace entender que no es así.

— ¡Déjame! — le grito cuando me toma del brazo. — ¡¿Por qué me hiciste eso?! — le reclamo intentando zafarme de él.

— Yo solo quería reencontrarte con Tammy... no sabía que... — intenta decir.

— ¿Qué había tenido un hijo? Pues ahora ya lo sabes, ¡déjame! — insisto, pero su mirada cambia de repente.

— ¿Hace cuánto? — me pregunta con un hilo de voz.

— Eso no importa, suéltame. — vuelvo a repetir, pero él no lo hace.

— ¡Cristian, regresa aquí, tienes mucha gente queriendo hablar contigo! — escucho que le grita alguien y él finalmente me suelta.

— Vamos a tener que hablar de todo esto. — me dice serio.

— Tu y yo no tenemos nada de qué hablar. — rebato firme y me doy la vuelta para aprovechar este instante e irme.