Regrese al penhouse cansada y desecha. Lo último que quería hacer es tener que lidiar con Christopher. Estoy tan cansada que podría dormir todo un día, pero no mañana tengo obligaciones. Eso me impedí hacer lo primero.
Me pareció extraño que Christopher no venga a regañarme o me dijera algo como << ¿Dónde has estado?>>
— Señorita Cooper. ¡Al fin llega! – Exclama Albert.
— Si he tenido un día muy largo. – comento sin muchos ánimos y con voz cansada. A decir verdad creo que ni debí de responder.
— el señor White me pidió que le dijera que no lo espere esta noche. – me avisa. – Tiene unos asuntos que resolver. – me dice con su típica cara de seriedad y frialdad. – enseguida le traigo su cena. – añade.
<< Como si pudiera espéralo despierta, Albert que no vez que estoy cansada>>; respondo en mi fuero interno.
— Sí. – digo con voz cansada.
Estaba apunto decir no gracias, no cenare, pero se fue antes de que pueda decir algo más. No sé porque, creo que algo muy extraño está pasando con Christopher. , Después de lo que paso en la fiesta siento que algo cambien en su forma de ser, pero que tanto lo conozco lo suficiente como para descifrarlo, penas llevo con él que unas seis semanas o tal más. No sé, no soy buena con los números. Al parecer no lo conozco muy bien, pero sé que no quiero perderlo, no puedo perderlo sin saber que paso entre nosotros. Es más a veces creo esta obsesión, ya no es obsesión, sino que quizás sienta algo más fuerte, algo que nunca he sentido antes, algo que nunca nadie me ha hecho sentir. Sé que lo pensé en ocasiones, pero ahora lo siento más que nunca.
He comido muy poco, creo que apenas he tocado la comida. Me levantado de la mesa y voy a mi habitación.
No se en que momento me quede dormida, pero me despierto por el inconfundible sonido de mi despertador de mi celular. Ya tengo que levantarme para ir mi clase de boxeo. A decir verdad creo que me gusta, creo que es en lo único que soy buena. No se si con eso mate alguien, o sirva de algo, pero al menos se que no me atacaran por detrás o seré tan indefensa.
Me visto y bajo las escalaras. Al llegar a al comedor no veo Christopher , <<¿que <<raro? ¿aun no ha llegado? ¿Donde esta?>> Me pregunto. ¿Que ocultas Christopher? ; me pregunto mirando su despacho. Y la curiosidad me invadió. Miro para todos lados, no se para que, si nadie esta en el penhouse y dudo que Albert me espié o algo así.
Abro la puerta y entro. Su despacho es muy grande y moderno. El escritorio es de vidrio, y hay una silla de cuero negro. Esta todo muy ordenado y limpio.
<<Si queres un maníaco del orden>>; mascullo en voz alta observado el despacho de Christopher. Cambien hay una biblioteca, pero lo que más me sorprende es que no hay libros sino DVDs y algún que otro libro. Todos con un numero y iniciales, no se que signifique , pero se me da que son quizás recuerdos. Me pregunto si aquí esta esa libreta que encontré la primera vez que estuve aquí, a decir verdad no recuerdo si la encontré aquí o no; pienso haciendo una mueca. Observo que tiene una estantería con cajones, es como un archivero. Me acerco y abro el primer cajón. Ahí encuentro un montón de lo que parecen ser expedientes. Quizás sean contratos de negocios o algo así; pienso. Decido leer uno.
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Juego de asesinos: Quiero ser tu nueva obsesión © + 18| Libro 1 |✅
Teen FictionElla una problemática Él un asesino Una atracción peligrosa como obsesiva ¿Te atreves a jugar? Obra registrada en Safe Creative. Código: 2401246754869 QUEDA PROHIBIDA SU DISTRIBUCIÓN TOTAL O PARCIAL POR CUALQUIER MEDIO DIGITAL O IMPRESO SIN PERM...