Amo

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Al llegar al penhouse noto que todo está muy silencioso, subo las escalaras y me entonces escucho que alguien me llama. Sigo la voz, que proviene del baño principal. Es el baño de Cristopher. Golpeo y oigo

— Pasa, Cooper, no tengo nada que no hayas visto antes.

Entro y entonces veo a un Christopher desnudo en la bañera lleno de espuma que mira con seriedad y lujuria. Lo miro como una estúpida.

– He conocido tu tía. – digo para cortar el silencio que se formó. No dice nada, simplemente me mira con seriedad como siempre. – desconfió de mí. – digo en eso veo que estira su mano. su mano está en mi entrepierna. << tengo que admitir que me pone muy nerviosa y más al verlo así. >>

– No quiero hablar. – responde. –desnúdate. – me ordena.

– ¿Qué? – exclama incrédula.

Cooper, cuando te pido algo espero que lo hagas. Sin pregunta. – dice apretando los dientes. Asiento.

Y comienzo desnudarme lentamente sé que él quiere me lo haga lento. Me mira con una sonrisa pervertida. Christopher me tiende sus abrazos, no tengo que cuestionar nada, se lo quiere y yo también, le tome las manos y entro a la bañara. Comienza a besar mi abdomen hasta llegar a mi feminidad la cual beso por debajo del agua. Me acomodo mejor y pongo mis manos alrededor de su cuello. Y bajo las de él a mi espalda, nos fundimos en un apasionado y salvaje beso por varios minutos hasta que él lo rompe el beso para deslizar sus labios a mi cuello en tanto acaricia uno de mis senos por debajo del agua y la espuma, lo cual produce una reacción más excitante así que deslizo mi mano por su torso hasta llegar a su sexo que empiezo a acaricia y siento como responde en mi mano.

Acto seguido abro mis piernas en la bañare y cuando menos lo espero comienza a penetrarme con su lengua mi feminidad mientras que con su mano frota mi clítoris dándome más placer, después introduce dos dedos dentro de mi haciendo rápidos movimientos.

– vamos, nena quiero oírte gemir para mí. – sigo mordiendo mi labio evitando hacer lo que él me pide, pero no sé por cuanto tiempo pueda soportar, el placer es mi intenso como siempre. De pronto me agarra el cuello con una mano y me lo aprieta. Me deja sin aire. Sigue penetrándome con sus dedos duramente mientras sigue apretándome con fuerza mi cuello. Gimo con dificultad. – Grita, vamos, grita para mí. – me pide. Grito ahogadamente, << no puedo respirar>> siento que me está matando. – gime. – grita elevando la voz y haciendo más presión en mi cuello.

¡Suéltame! – ruego con dificultada.

Con brusquedad me suelta. Y comienzo jadear y gemir. Mis jadeos y gemidos sin control parecen impulsarlo a seguir recorriéndome más y lo hace sin censar amentando y disminuyendo la velocidad de sus movimientos, tratado de que su lengua toque lo más profundo de mi ser que su pueda, tengo la boca abierta y me muerdo los labios sentido como mi cuerpo arde por sus húmedos besos que sigue proporcionándome placer en cada rincón. Lanzo un grito cuando a la par de su lengua siento que introduce un dedo y luego lo saca. Vuelve a meterlo en un acompasado ritmo que me está enloqueciendo hasta que siento que calzado el éxtasis. Me muerdo el debo para no gritar.

Acelera sus movimientos haciendo que soltara gemidos. Vuelve a penetrarme con su lengua nuevamente haciendo que el placer vuelva a aumentar, comienzo a sentir los primeros espasmos del orgasmo, hasta que por fin puedo lograrlo.

Deja de darme placer con su dedo y me recarga en la esquina de la bañera, lo que produce que la bañara desbordara un poco. Con mis piernas rodeo su cintura, entra en mí al igual que un poco de agua y espuma que hace más placentera la sensación. Comienza a moverse exquisitamente y salvajemente mientras me mira con esa <<sonrisa retorica psicópata>>que me encanta. Gimo lo más bajo que puedo, por si alguien nos escucha, pero a veces no puedo y también parece que Christopher eso no le importa ya que quiere que grite. << y yo tampoco puedo reprimirlo por lo intenso que es la sensación de su cuerpo, el agua, la espuma y su cuerpo chocando contra el mío. Gimo.

Acelerara sus movimientos moverse y yo me aferro a su espalda haciendo que él se metería más en mí. Acaricia su espalda.

– Chris.... Ahhhhh.... ahhh ¡más rápido! – pido. Sus embestidas aumentaron el ritmo es brutal, y hacen que nuestros cuerpos chocaran haciendo que el agua de la bañara desbordara aún más. – ¡más, más! – ruego gritando

Aumenta su ritmo.

– ahhh.... Ahhhhh, Chris... no.... resisto. – digo y siento como poco a poco voy sintiendo el orgasmo en mí.

<<<Uno.... dos.... tres... cuatro... cinco... seis, siete, ocho, y nueve>> embestidoras más y ambos caemos en el orgasmo gritando nuestros nombres.

Christopher sale de mí.

— sal de aquí. – me ordena. Sin decir nada, ni contradecirlo. Salgo de la bañara. Agarra una toalla y me envuelvo el cuerpo con ella. – Cooper. – me detiene. Me doy vuelta y lo miro con una sonrisa traviesa, mientras pongo mis manos en mi cabello para levantarlo un poco. – no vuelvas a decirme Chris, si no te lo pido, recuerda que soy tu amo. Debes dirigirte a mí así. – me dice. Frunzo los labios.

— Pero creí que lo.... – me detiene.

Creíste mal, eres mi sumisa, y yo tu amo. Eso no cambiara. – dice con frialdad.

Asiento y salgo con algo desanimo. De verdad pensé que podría cambiarlo, de verdad creí que lo estaba cambiando, pero no resulta que estoy enamorado de él.

El fin de semana "mi amo Christopher "me tuvo muy activa. No sé porque ese juego se volvió más violento y rudo. Ni tampoco sé cómo es que me volví tan sumisa con él. 

Juego de asesinos: Quiero ser tu nueva obsesión © + 18| Libro 1 |✅Donde viven las historias. Descúbrelo ahora