Sigue besando mi cuello, de pronto algo creció en lo más profundo de mí ser, << maldad.>> Nunca mate nadie, pero ahora sé lo que siente, y lo volvería hacer. Se deshizo de mi ropa. Me dejo solo en ropa interior. Me observo. Acto seguido paso el cuchillo por mi cuerpo muy suevamente. Y eso hizo que mi cuerpo se encienda. Corto la tira de mi brasier con el cuchillo y comenzó a besar el inicio de mis senos. Emito un gemido. Quiero tocarlo, pero me lo impide, porque sostiene mis manos para evitar que lo haga. Comienza morder mi pezones y yo siento que estoy complementa húmeda con cada una de sus caricias. Una vez más desliza el cuchillo por mi cuerpo, hasta llegar a mi pantis, la cual corta con agilidad con el cuchillo. Acto seguido siendo su lengua en mi intimidad. Gimo de placer.
— No te muevas. – me pide. Pero no puedo evitarlo, siento que su lengua recorre todo mi ser. Introduce un dedo. Y largo un fuerte gemido. Siento que me convulsiono. Largo otro fuerte gemido.
Acto seguido me alza y me tiro a la cama. Me acomodo en la cama. Observo como camina hasta un armario, y me pregunto para que, visualice que agarra algo que no llego a ver. Vuelve a mí con una sonrisa maquiavélica.
— Date la vuelta. – me ordena.
Hago lo que me pido sin negarme. Estoy tratando de ser una buena sumisa. Siento que sube a la cama. Me esposo a la cama.
— ¿Qué haces?
— ¿quieres jugar conmigo? - susurra en mi oído y agarrándome del cuello. Mi respiración se aceleró cuando su aliento entro mi oído.
— sí. – respondo sin rodeos. Me cubre los ojos.
Sin previo aviso me embistió duro por detrás y lo único que siento son sus manos en mi trasero. Me penetre una y otra vez. Largo un gemido ahogado. El hecho de no ver nada hace más existe la experiencia. Lo oigo gemir o más bien relinchar. Sigue embistiéndome mientras siento que desliza sus manos por mi columna vertebral, haciendo que caiga una larga agonía. Tironea de mi pelo y no puedo evitar gemir. Siento que me está matando de placer.
Todo mi cuerpo reacciona a su toque y me asombro porque solo él puede provocarme estos orgasmos. Siento que desliza el cuchillo por todo mi cuerpo. a continuación siento el cuchillo en el inicio de mis senos, que están duros. Siento como la punta del cuchillo raspa mis pezones.
Y ese momento sentí pura lujuria, él es lujuria pura. Se me escapa un último gemido y Christopher sale de mí. Olvide por completo a que ahí seguía el cadáver a de la podre chica. << Que podre, más bien maldita zorra>> eso era lo que era. en fin ya no es mi problema.
— No te pregunte,¿ tienes familia? – pregunta acomodándose en el respaldo de la cama
— ¿Esta preguntado sobre mi familia?
— Si eso hago.
— ¿Y por qué te interesa? – inclina la cabeza. su ceño se frunzo un poco.
— Solo pregunto. Es una pregunta. Está bien sino quieres responder. Lo entiendo.
Frunzo los labios. Suspiro y tomo valor para hablar de mi familia. No me gusta mucho hablar de ellos; pero supongo que es parte de esta relación, además es tiempo que me conozca.
— Bien, te hablare de ellos, soy hija única, mi madre se llamaba Abigail Valentine era una Alcohólica y drogadicta y mi padre bueno el traficante de droga. – digo de corrido. – A los 9 años mis padres se separan, y mi padre se fue de la casa. es decir nunca lo conocí bien. – muevo ligeramente la cabeza.- viví en una vieja casa en Pensilvania, el cuál es un lugar muy aburrido con un ningún futuro. nada interesante pasaba. – Christopher se ríe y no sé por qué.
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Juego de asesinos: Quiero ser tu nueva obsesión © + 18| Libro 1 |✅
Novela JuvenilElla una problemática Él un asesino Una atracción peligrosa como obsesiva ¿Te atreves a jugar? Obra registrada en Safe Creative. Código: 2401246754869 QUEDA PROHIBIDA SU DISTRIBUCIÓN TOTAL O PARCIAL POR CUALQUIER MEDIO DIGITAL O IMPRESO SIN PERM...