—si, ya te puedes poner el uniforme que te he regalo. -— me dice. -— y con respecto a lo que dijiste tienes razón, tengo que tratarte mejor. - comienza. — No eres de mi propiedad, eso lo sé, pero a veces tú logras exaspera me y tienes razón es ahora de definir esto. —nos señala. Sé que no le gusta este tipo de cosas, pero lo hago por mi es tierno. —es por eso que vamos poner algunas reglas.
— no nada de reglas.
—tú colmas mi paciencia. — dice entre dientes. — quieres dejarme terminar. — asiento. — pongas algunas cosas en claro, uno; No me contradigas al menos que sea necesario, dos; serás mi novia, no pidas más que eso. Tres no de ... —lo interrumpe
-—¿tú novia? -—pregunto.
-—si , mi novia, ¿que tienes algún problema de audición, quieres que te lo escriba en un papel?. —me responde con sarcasmo.
—Es que es un gran paso para ti. — me burlo. Le sonrió. Me acerco a sus labios para poder besarlo, pero me detiene.
— Esa es el tercer punto no expreses tú cariño en público y no me besaras sin pedirme permiso.
-—¡Que tonto eres!. —digo agarrado su corbata y jugando ella.
Sigue hablado, pero dejo de escucharlo.—Ya cállate y bésame. -— me corresponde el beso. Y por unos segundos el mundo se detuvo. Solo somos nosotros y nadie más.Es oficial soy la novia de Christopher White quieren lo diría, la palabra novia me queda demasiado bien.
La luz que inunda la habitación me arranca del profundo sueño. Me desperezo y abro los ojos. Es una botina mañana de noviembre. Mi novio está profundamente dormido a mi lado. << Wow, que vista>>. Lo observo, como esta boca arriba, tengo la oportunidad única de examinarlo bien y contemplarlo. Su hermoso rostro parece más, relajado y pacífico. Se ven tan indefenso. Sus labios finos y perfilados, están ligeramente abierto, y ese pelo rubio esta alborotado. ¿Cómo puede ser alguien tan atractivo y perfecto? siento la tentación de alargar la mano y tocarlo, pero esta profundamente dormido y no quiero despertarlo.
Podría pasarme el día contemplándolo, pero tengo mis necesidades fisiológicas. Salgo de la cama, veo su camisa negra en el suelo y me la pongo. Me dirijo a una puerta, pensado que puede ser el baño, pero lo que encuentro es un vestidor, tan grande como la habitación en donde estoy, es el mismo vestidor en donde hemos puesto la ropa. Filas y filas de camisas de color negra y blancas. camperas de cuero, pantalones, zapatos, trajes caros y corbatas. Más mi ropa con son vestidos, remeras muchas, pantalones, zapatos y más zapatos. ¿A veces me pregunto si necesitamos tanta ropa? chasqueo la lengua. La verdad es que si, para mí la ropa nunca será suficiente.
Vuelvo al dormitorio, y Chris sigue dormido. Abro la otra puerta. Es el baño, más grande que la habitación en donde dormimos. Aquí todo es muy grande ¿Para qué necesita tanto espacio? dos lavados, pero de pronto recuerdo que es porque aquí vivian muchos debe ser por eso.
Me miro el enorme espejo. ¿Parezco diferente? me siento diferente; creo que mis senos son más grandes. Inclino la cabeza confundida y sacudo la cabeza. Sigo mirándome en el espejo, no puedo dejar de pensar en esa posibilidad, y de pronto me lo imagino. << me imagino lo feliz que podremos ser, con esa posibilidad>>; no puedo evitar reírme tontamente.
Tengo el pelo hecho un desastre, como siempre. El pelo revuelto no me queda nada bien. Intento peinar mi cabello con los dedos, no está del todo bien, pero algo es algo. Está un poco mejor. Y de pronto siento nauseas. Vomito todo lo que no tengo el estómago en el inodoro.
-— ¿Zora, estás bien? -— pregunta del otro lado Chris. Al parecer lo he despertado con mis arcadas.
— sí, no es nada. -— miento tirando la cadena del baño.
Creo que no tengo opción, debo hacérmelo. Esto no es normal y no puedo seguir fingiendo demencia. Todo apunta a una cosa y fingir que es normal que no me haya venido mi perdido porque soy irregular, no quita la posibilidad de que pueda estar embaraza.
Agarro el test y lo miro fijamente. Dudando de esa posibilidad. No estoy lista para esto, no aún. No cuando mi relación con Chris recién empieza. Esto no puede estar pasando ahora, se supone que esto debería de pasar más adelante. Suspiro profundamente y tomo coraje.
— Tranquila, Zora. Todo saldrá bien. —- me repito una y otra vez mientras me hago la prueba.
Paso los minutos, miro la prueba y me quedo estupefacta con el resultado. Trajo salivo en seco.
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Juego de asesinos: Quiero ser tu nueva obsesión © + 18| Libro 1 |✅
Novela JuvenilElla una problemática Él un asesino Una atracción peligrosa como obsesiva ¿Te atreves a jugar? Obra registrada en Safe Creative. Código: 2401246754869 QUEDA PROHIBIDA SU DISTRIBUCIÓN TOTAL O PARCIAL POR CUALQUIER MEDIO DIGITAL O IMPRESO SIN PERM...