Líos de amor de una Malfoy [Harry Potter/Theodore Nott] TERMINADA

Capítulo 57

-¿Qué pasa con Sirius?-susurré.

Harry iba a contestar pero una mano tomó mi brazo bruscamente e hizo que volviera a mi puesto. Me giré y era Draco que me miraba con el ceño fruncido. 

-Acompáñeme afuera, Potter-dijo el examinador.

Harry se paró algo desorientado y acompañado del examinador salió del Gran Comedor.

-Quedan pocos minutos, por favor, sigan haciendo su examen-dijo una examinadora.

Tomé mi pluma, la mano me tiritaba, respondí rápidamente las últimas preguntas y me paré para salir del Gran Comedor. Necesitaba buscar a Harry para saber lo que sucedía con Sirius, no me  podía quedar tranquila hasta que hablara con él.

Fui a la enfermería, busque por los pasillos cercanos a la sala común de Gryffindor, le di una vuelta a los jardines, pero nada. Volví al vestíbulo y me encontré con Ron y Hermione.

-¿Han visto a Harry?-pregunté con tono de desesperación.

-No, nosotros también lo estamos buscando-contestó Ron.

-¡Ahí está!-Hermione apuntó hacia las escaleras-¡Harry!-los tres fuimos corriendo hacia donde él- ¿Qué ha pasado? ¿Te encuentras bien? ¿Estás enfermo?

-¿Dónde estabas? -inquirió Ron.

-Vengan conmigo -contestó Harry- ¡Vamos, tengo que contarles una cosa!

Nos guió por el pasillo del primer piso mientras asomaba la cabeza en varias aulas hasta que encontró una vacía y entramos en ella. Harry se apoyó en la puerta y nos empezó a mirar.

-¿Qué pasó con Sirius, Harry?-pregunté preocupada.

-Voldemort lo tiene...

-¿Qué?

-¿Cómo lo...?

-Lo he visto. Ahora mismo. Cuando me he quedado dormido en el examen.

-Pero... pero ¿dónde? ¿Cómo? -pregunté desesperada.

-No sé cómo -respondió Harry- Pero sé exactamente dónde. En el Departamento de Misterios hay una sala con un montón de hileras de estanterías llenas de pequeñas esferas de cristal, y ellos están al final del pasillo número noventa y siete... Voldemort intenta utilizar a Sirius para conseguir eso que quiere coger de allí dentro... Está torturándolo. ¡Dice que acabará matándolo! -Con una mano froté mi pecho para intentar calmar la angustia que se acumulaba-¿Cómo vamos a ir hasta allí? - preguntó.

-¿Hacia allá?-pregunté sorprendida.

-¡No me digas que  piensas quedarte aquí esperando que maten a Sirius!-me gritó.

Todo lo que decía Harry podría ser la explicación a la angustia que he sentido estas dos semanas, pero era tan poco probable, Sirius no mide las consecuencias, pero no sería tan estúpido...

-Harry -dijo Hermione con una voz que delataba su miedo- Harry, ¿cómo... cómo crees que Voldemort haya entrado en el Ministerio de la Magia sin que nadie lo haya descubierto?

-¿Y yo qué sé? -bramó él- ¡Lo que importa ahora es cómo vamos a entrar nosotros allí!

-Pero... Harry, piénsalo bien -continuó Hermione-son las cinco de la tarde... El Ministerio de la Magia debe de estar lleno de empleados... ¿Cómo crees que Voldemort y Sirius hayan entrado allí sin ser vistos? Harry..., deben de ser los dos magos más buscados del mundo... ¿Crees que podrían entrar en un edificio lleno de Aurores sin que detectaran su presencia?

-¡No lo sé, Voldemort debe de haber utilizado una capa invisible o algo así! -gritó Harry- Además, el Departamento de Misterios siempre ha estado completamente vacío cuando he ido...