Líos de amor de una Malfoy [Harry Potter/Theodore Nott] TERMINADA

Capítulo 82

-¿Qué haces aquí?

-¿Qué haces tú aquí? -me giré para ver a Charlie.

-En pocos días se casa Bill y pedí una semana libre, ahora responde tú -se sentó a mi lado.

-Me estoy quedando aquí porque no tengo donde ir...bueno sí tengo, pero  Remus dice que no es seguro.

-No me refiero a eso -soltó una risita -¿qué haces sola en este lugar? Hermione, Ron y Ginny están adentro jugando Snap explosivo, ¿por qué no estás con ellos?

-Porque no me siento cómoda...

-¿Por qué? 

-¿Qué? ¿no te han contado? 

-Sí, pero aún no entiendo, nadie te guarda rencor, Adeline.

-Eso es lo que más odio...¿sabes? -lo miré -quiero que me odien, que me griten y me recriminen todo lo que hice, pero en cambio tengo a Bill tratándome como casi una hermana más, a Fleur pidiéndome ayuda para su boda como si fuera su mejor amiga, a los gemelos que siguen haciéndome bromas pesadas como siempre  y Ron que quiere jugar todos los días al ajedrez mágico...

-¿Y eso qué tiene de malo? Eres parte de la familia.

-Tú no lo entiendes, Charlie...-me detuve en sus ojos azules -ni siquiera sé por qué te estoy contando esto.

-Porque necesitas sacar lo que sientes, aparte tengo una cara confiable -rio-nadie te odia, eres la única que se sigue culpando por lo que sucedió.

-Tu madre y Ginny también lo hacen...

-No es cierto.

-Claro que lo es, con Ginny nunca nos hemos llevado bien, así que es entendible. Y tu madre...me da miradas extrañas en todo momento, pero me habla con normalidad, y eso es lo que más me estresa...me odia en silencio.

-¿Si te odia por qué te está haciendo un pastel de chocolate en estos momentos? -me sonrió -por cierto, feliz cumpleaños, Adeline.

-Gracias, Charlie...

-No te tengo ningún regalo porque no sabía que cumplías años, pero...la próxima vez que venga te traeré algo ¿Qué quieres?

-¿Me puedes traer un dragón?

-Podría...-dijo pensativo - seguramente me echarían del trabajo... creo que un peluche de dragón es aceptable, ¿no?

-Suena bien -le sonreí.

Escuchamos pasos acercándose, miré hacia al frente, Remus y Tonks venían llegando.

-Feliz cumpleaños, pequeña -Remus estiró sus brazos y me paré para abrazarlo.

-Gracias -le sonreí débilmente. 

-Te traje algo...bueno-miró a Tonks -te trajimos algo.

-Sí, espero que te guste -dijo Tonks emocionada -¡ah! por cierto, feliz cumpleaños -me abrazó haciendo que casi botara la caja que me acababa de pasar Remus -¡oh! lo siento...

-Gracias, Tonks...¿o Lupin?

-Me puedes seguir llamando Tonks -dijo rápidamente.

Abrí la caja mientras Remus y Tonks saludaban a Charlie. Era un reloj de oro, una tradición en el mundo mágico regalarlo cuando cumples la mayoría de edad.

-Se supone que los padres deberían darle esto a sus hijos, pero...

-Yo no tengo...o más bien sí, pero están muertos -dije con tono frío.

Se formó un incómodo silencio, ninguno sabía qué decirme, yo simplemente observaba el lindo reloj.

-Adeline...sabes que yo...