Capítulo 0/Prólogo

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—Joven Komaeda, debe mantener la calma a partir de ahora y evitar cualquier alteración emocional importante.

—¿Qué sucede doctor? ¿Es muy grave?

—...Normalmente vemos estos casos en personas de la tercera edad, aunque no es normal verlo en personas tan jóvenes como usted, sigue siendo probable. Pero no se preocupe-...

—Doctor.

—...Demencia Frontotemporal, eso es lo que reveló neurología esta mañana, por eso tuvimos que hacerle un segundo examen, para comprobar que no sea un error.

—...

—Respecto también a su cáncer...— el doctor guardó silencio al ver que su paciente no reaccionaba —, le daré unos minutos para que pueda procesarlo todo y volveré, lamento mucho su situación.

—Está bien doctor — el chico mostró una sonrisa demasiado sospechosa, se incorporó en su silla y volvió a hablar —. Le agradezco todo lo que ha hecho por mi, ahora, ¿qué me estaba por contar?

—...Este es el tratamiento que tendrá que seguir a partir de ahora.

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"Este año, Hope's Peak Academy ha hecho un sorteo nacional donde un estudiante común y corriente se elige aleatoriamente, el ganador obtendrá el beneficio de asistir a la prestigiosa academia bajo el título de Estudiante Afortunado Definitivo. Usted ha sido el ganador de este sorteo y lo invitamos a pasar sus últimos tres años de instituto con nosotros."- Atte: Hope's Peak Academy

—Hahaha... Lo sabía, sabía que todas estas enfermedades me darían algo bueno a cambio. Aah... mi suerte nunca falla — el chico de cabellera castaña ahora se había vuelto casi blanca, arrugó la nota levemente con sus manos, no se sentía digno, pero quiere —. Supongo que no pasa nada si me doy un pequeño lujo... además, no puedo abandonar mis estudios.

Su mente era un desastre, solo le quedaban uno o dos años de vida, ni siquiera llegaría a su tercer año faltante, quedará en vergüenza frente a todos cuando sepan cuáles fueron sus causas de muerte, incluso después de muerto. La cabeza le palpitaba, miró su mesa de luz y vio los medicamentos contra sus enfermedades.

—... Eso no es esperanza.

Hace tiempo había dejado de tomarlos, los guardaba por si acaso, pero tras leer esa carta de la prestigiosa academia de la "esperanza" simplemente cayó en cuenta de que no necesitaba nada más, solo la academia le traería un poco de felicidad en sus últimos momentos. Agarró todos los medicamentos que estaban todavía ahí y los tiró a la basura, declarando que alargar los días de vida de una persona no era esperanza, solo una forma de retrasar la inesperada muerte y golpear a esa persona con mucha más desesperación.

Aunque claro, Nagito nunca sentía desesperación, a pesar de su corta edad él ya había visto casi las mismas cosas que un soldado en una guerra. Los restos de sangre y cerebro por parte de sus padres sobre su rostro, ropa y cabello era un ejemplo.

Nagito se hizo una promesa a sí mismo, y ese era que no volvería a llorar en situaciones críticas, porque siempre hay esperanza. Su suerte, un arma de doble filo, siempre tenía este mismo ciclo repetitivo donde ocurren cosas malas para obtener buenas cosas, y cosas buenas para obtener cosas malas.

Es por eso mismo que el chico vivía casi aislado de la sociedad, no quería seguir matando a personas por su culpa, él podía jurar que cada una de ellas le hablaba en sus sueños.

—...Debería... tomar un poco de aire, solo eso... — a pesar de su miedo a cruzar la calle, él se puso su abrigo verde tan característico, agarró las llaves y salió de su gran casa de tres pisos.

Una tarde otoñal con el sol casi ocultándose y las hojas secas amarillas, marrones e incluso rojas, revoloteaban por su alrededor. La tierra se levantó un poco por el leve viento que había, lo que hizo que a Nagito se le escapara un pequeño estornudo.

Siguió caminando por aquel parque cerca de su casa, algunos vecinos lo vieron llegar e inmediatamente se alejaron lo más que pudieron de él, aunque intetaron ser discretos de todos modos Nagito se dio cuenta.

—Ahh... que suerte tengo, ahora tengo el parque para mi solo — juntó sus dos manos en un puño y se lo llevó a su rostro, apoyando su cabeza en este mientras sonreía y continuó caminando unos minutos.

El parque estaba tranquilo, había algunas personas que no eran de la zona y no lo conocían, por lo que un par niños corrían y jugaban mientras que los padres miraban. El albino decidió voltear su mirada, tenía miedo de que su suerte los lastimara con solo mirarlos, todavía eran peldaños sin madurar lo suficiente.

Luego de unos minutos, el sol estaba a la mitad y el cielo anaranjado daba una hermosa imagen poética del lugar. Se sintió más relajado luego de haber meditado fuera de su casa, ese lugar era casi una tortura, pero a la vez el único recuerdo de su única familia, no podía abandonar simplemente el lugar. Ni la demencia lo hace olvidar el amor que sentía hacia ellos y de la culpa por haberlos matado cuando era un niño. Quizás era una forma de castigarse a sí mismo, haciéndose recordar constantemente la basura de ser humano que era.

El se levantó de su lugar y empezó a caminar con la cabeza agachada hacia su casa, no le prestaba mucha atención a su entorno, pero algo lo hizo voltear... Sintió una extraña sensación, una especie de conexión que le daría todas las respuestas a sus miedos, levantó la cabeza y vio como un chico había pasado por su lado, no podía verle el rostro, solo su ancha espalda.

—¡Vamos Hajime! — lo llamó una mujer desde el asiento del copiloto —. Si no te apresuras nos iremos sin tí y no me importa lo que te pase.

 Si no te apresuras nos iremos sin tí y no me importa lo que te pase

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—¡Y-Ya voy, mamá...! — empezó a correr y abrió la puerta trasera.

Nagito solo vio como el auto arrancaba, nunca pudo verle la cara a ese tal Hajime, pero poco le empezó a importar ahora, creyó que era solo su demencia jugándole una mala broma que lo hacía reaccionar de sobremanera. Pero aun así, ese pequeño ritmo cardíaco levemente acelerado no se fue hasta que se durmió.

Recuento de palabras: 1038

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Notas:

¡AaaaAAAAhaAAAHHH...! *c muere pero revive* CON GRAMATICA "MEJORADA", MI SUEÑO SE HA HECHO REALIDAD... ESCRIBIR UN LIBRO KOMAHINA .

Gente, no se porque v*rga las imágenes no cargan, pero eso no importa ya que en la info de mi perfil hay un link a una pagina donde publico mis dibujos, ahí les va a aparecer el que hice para este cap <3 al final lo terminé poniendo en la multimedia arriba del título.

Actualización un día después: Finalmente pude agregar las imágenes /se va a llorar/

Este libro hasta esta fecha tiene 36 capítulos y todavía no se acerca ni al clímax, por lo que será mi mayor desafío a la hora de escribir y terminarlo, además de eso, tendrá muchos mas capítulos que mi libro anterior, así que... voy avisando de ante mano que moriré en el intento.

Pretty Normal Student [Komahina/Hinakoma] © nommedDonde viven las historias. Descúbrelo ahora