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—¿En serio te encuentras bien? —Volvió a preguntar Amelie.

—Sí, en serio —contesté yo. Ella volvió la mirada a su desayuno. —Oye, por casualidad... ¿Conoces a Nathen? —Ella me observó.

—¿Nathen? —Asentí. —¿El amigo de Shawn? —Volví a asentir. —¿Para qué quieres saber? —Alcé mis hombros.

—Curiosidad —respondí con una sonrisa. Ella elevó una ceja.

—Sí, sé que vive por aquí. Lo he visto varias veces en las salidas con los chicos —dije, sin poder ocultar mi sonrisa—. ¿A qué viene eso? —Frunció el ceño.

—Hoy se me apetece salir —sonreí. Ella me devolvió la sonrisa.

—Tienes un plan, y quiero ser parte de eso —comentó.

—Ya te contaré —le di un mordisco a mis waffles.

(…)

Narra Shawn.

—...En serio, ya no sé qué hacer —murmuré.

—Shawn, sinceramente creí que solo iba a ser una aventura, lo de ambos —suspiró—, pero me acabas de demostrar que si la quieres. Y mi humilde consejo es que si en verdad quieres estar con ella, termina con todo esto y esfuérzate —espetó.

—Lo dices como si fuera tan fácil —murmuré.

Cameron se acercó.

—No, no lo es. Pero si quieres acabar con tu estrés, termina con Camila y ve detrás de Martina —desvió la mirada—. Shawn —me observó—, deja de ahogarte y lucha. ¡No te quedes estancado, cabrón! Sé que es difícil romper con alguien con quien llevas años en una relación, pero si sientes que entre Camila y tú la chispa terminó, y crees que en verdad sientes cosas por Martina, lucha —asentí—. No digo que termines con ella y ya empieces una nueva relación con Martina, no. Toma un tiempo para meditar, para que Martina también tenga su espacio.

—Luego la buscaré —asentí—. Está bien. Haré eso mismo —Cameron también asintió.

—Ánimo y mucha suerte.

—Gracias.

(…)

Horas más tarde, me encontraba tan tenso, observando a Camila mientras preparaba sus maletas, ya que en unas horas volvía a Miami.

—¿Qué ocurre? —preguntó ella, regalándome una cálida sonrisa.

—Nada, solo... —mi voz se cortó.

—Shawn, si es por lo de la otra noche, yo... —negué. Ella me miró preocupada—. ¿Entonces qué es? —se acercó a mí, y me alejé de ella.

—Sabes... Vivimos tantas cosas hermosas juntos que no puedo imaginar un mundo sin ti —las lágrimas estaban haciéndose notorias.

Camila me observó preocupada.

—Yo tampoco —sonrió y tomó mis manos.

—Pero... necesito un tiempo —noté cómo aquello le afectó, cambió su expresión y dio un paso hacia atrás.

—¿Cuánto tiempo? —sus ojos se cristalizaron.

—No estoy seguro... —murmuré.

Ella desvió su mirada, dejando caer varias lágrimas, haciéndome sentir miserable.

—Bueno, cuando estés listo... estaré aquí —sonrió—. Siempre, Shawn. Te amo demasiado.

—Yo también te amo. Pero esto no se siente bien. Por favor, no hagas esto más difícil —ella se tapó la cara. No sabía qué hacer.

—Dime que me amas y que quieres pasar el resto de tu vida conmigo. Mírame a los ojos y dímelo —se acercó a mí, sus ojos reflejaban esperanza.

Me alejé de ella, desviando su mirada.

—Lo siento. ¡Mierda!

Camila se sentó devastada en el sofá y apoyó sus manos en la cara.

El silencio era denso, pesado. Tan incómodo que casi se había vuelto insoportable cuando Camila se atrevió a romperlo de nuevo.

—Sabes... El día que nos reencontramos, tenías tanta elegancia en ese momento que me volví a enamorar de ti.

—Mila, te quiero, pero necesito un tiempo. No sé cómo más decírtelo —ella se levantó y frenó delante de mí.

—¿Y si me lo demuestras? No te estoy alejando, me estoy aferrando con toda mi vida. ¡Pero necesito que me necesites! —golpeó mi pecho con sus manos—. ¿Y por qué no me llamas cuando estás lejos? ¿Por qué no me dejas entrar completamente? —rompió en llantos.

—Camila... —murmuré, verla así me partía el alma.

Ella me empujó con todas sus fuerzas.

—Ve y encuentra a otra chica que te haga sentir vivo por cinco minutos —agarró sus cosas y caminó hacia la entrada.

—Detente —quise agarrar su mano.

—No me toques, Shawn. ¡No me toques! Eres un cobarde y mentiroso —salió de mi departamento dando un portazo.

Cerré mis ojos y me tiré sobre el sofá, ahogando mis llantos.



Recuérdame ~ Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora