Recuérdame ~ Shawn Mendes

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*Semanas más tarde*

Desde que Shawn llegó a Los Ángeles, alquiló un lugar en las afueras de California y estuvo acompañado por Amelie. Pasaban el tiempo grabando y componiendo con sus amigos y colegas compositores. Eran momentos mágicos e inolvidables. Shawn estaba tan inspirado que no  dejaba de tararear y tocar el piano o su peculiar guitarra. Su libreta lo acompañaba a todas partes, incluso cuando salía por la mañana antes del amanecer hacia las montañas o el inmenso bosque que rodeaba la cabaña que habían alquilado.

Shawn pasaba días y noches escribiendo y componiendo canciones. En poco tiempo, compuso alrededor de catorce temas. Junto con Amelie y el equipo, revisaban y seleccionaban las mejores para el álbum, decidiendo cuál sería la primera canción en lanzarse. Después de tanto tiempo, Shawn había regresado a lo que más amaba: la música.

— No puedo creer que hayas escrito todas esas hermosas canciones. Este álbum tendrá de todo y se convertirá en mi favorito —comentó Amelie.

Shawn la miró y le sonrió.

— Gracias, Amelie. Tina ha sido la inspiración detrás de muchas de esas canciones y es la autora de algunas de ellas.

— Lo sé. Muchas están dedicadas a ella. Incluso sé de una en particular que habla de ambos y del dolor que sientes por el distanciamiento. Pero eso cambiará pronto.

— Solo quiero que ella pueda escucharlas —dijo Shawn con tristeza—. Que sepa que estoy aquí para ella y que es importante para mí.

— Lo hará, Shawn. No pierdas la esperanza —dijo Amelie, abrazando a Shawn y brindándole el apoyo que necesitaba en ese momento—. Ahora no es momento de desanimarse. Pronto lanzarás una canción para todas tus fans que han esperado tanto tu regreso, y no merecen verte triste ahora. Ve y comparte tu arte con el mundo.

— Gracias, Amelie. Eres una gran amiga.

*Narra Shawn*

Ya estaba todo listo: las canciones para el nuevo álbum, la portada y la canción que lanzaría pronto. Mi manager está en camino hacia la cabaña para festejar con nosotros. Mis colegas compraron pizzas y alcohol para celebrar esta noche mi nueva era, la nueva era de este álbum. Mis fans estarán muy felices por mi regreso después de tanto tiempo sin sacar música.

Desde la entrada, veo a mi manager y a unos colegas más entrar con bolsas y botellas de alcohol. Se saludan entre ellos y se acercan a mí para felicitarme. Estaba feliz; hacía mucho tiempo que no me sentía así. Durante un largo tiempo, veía mi entorno gris y triste, pero poco a poco empecé a encontrarme con los colores y la felicidad. Me encantaría compartir este momento con Tina. Sé que ella se lo habría pasado genial y estaría muy feliz por mí en estos momentos.

Mi manager se acerca y me abraza con tanta felicidad. Me sirve un vaso de champán y me comenta todas las cosas que le encantaría hacer para promocionar mi próximo álbum, que saldrá pronto.

Mi teléfono empieza a sonar a lo lejos y lo busco con la mirada, pensando en quién podría ser. Mi madre ya me había llamado hace unas horas y habíamos hecho videollamada con ella y mi padre.

— Ahora vuelvo, debo contestar —comento, intentando alejarme del bullicio.

— Shawn, ven aquí —dijeron mis colegas riéndose—. Es tu momento, ya tendrás tiempo de contestar. ¡Ven, vamos a brindar!

Me quedé quieto, mirando a mis colegas con una mueca y escuchando el sonido de la llamada de mi teléfono.

— Contestaré yo por ti, Shawn. Ve y diviértete —comentó Amelie, quien se acercó al teléfono—. Es tu momento, ve a disfrutar.