·004·

650 40 24
                                    

·Shawn·

Hoy me levanté con muchas ganas de ir al gimnasio y recorrer un poco de Buenos Aires. Jake y Connor me acompañarían.

-¿Todo listo, Shawn? -preguntó Jake.

-Sí, ya podemos salir -contesté, y él asintió.

Tomé mi pequeño bolso de mano, llevando mis cosas y una botella de agua.

Al salir del hotel, había un grupo de unas treinta chicas esperándome allí afuera.

-¿Me puedo acercar? -pregunté. Jake suspiró.

-Cinco minutos -dijo él, y fue el primero en acercarse, tranquilizando a esas chicas.

Me acerqué, saludé a cada una estirando mi mano y me tomé fotos con todas las que pude. Jake ya empezaba a tironear, así que las saludé por última vez.

Ya en la furgoneta, nos quedamos callados, y yo más que nada, me quedé observando la ciudad.

-Shh, Shawn -me giré y Connor me hizo una señal.

-¿Qué? -hablé despacio.

-Ayer me desvelé y busqué información sobre tu extraño sueño -asentí-. No mentiré, al principio me parecía gracioso, hasta que me entró la curiosidad -se relamió los labios-. Así que me puse a investigar.

-Ajá, ¿y?

-Bueno..., hay muchos casos parecidos al tuyo -dijo él.

-¿Qué?

-Sí, no con el mismo sueño, pero sí mucha gente que soñó con otra persona que ni siquiera conocían.

-¿Me estás hablando en serio? -asentí.

-También leí que lo que tú soñaste, otra persona pudo haber soñado lo mismo -Connor me miró asombrado-. ¿Y si Martina en verdad existe? -negué.

-No, no existe -hablé seguro de mí mismo.

-¿Y tú, cómo lo sabes? -dijo él.

-Recuerdo muy pocas cosas de mi sueño -contesté-, pero lo poco que recuerdo es que al principio de aquel sueño, en la primera noche que llegamos, salimos a cenar y ella estaba afuera del hotel con su grupo de amigas.

-¿Por eso mismo salimos a cenar anoche? -asentí-. Y también por eso te fuiste hasta la entrada -desvió la mirada pensativo. Volví a asentir-. Qué loco. Oye, para mí existe y trata de encontrarla.

-También la vi en un meet&greet.

-Entonces la conocerás allí -dijo él.

Quería ser positivo, pero era imposible. Connor tenía fe y estaba ilusionado, pero es evidente que ella no existe.

Al llegar al gimnasio, bajamos y nos adentramos allí. Después de una hora, salimos.

-¿Quieres recorrer, Shawn? -Asentí.

Empezamos a caminar, explorando las calles. No tenía muchas ganas, pero tampoco quería quedarme encerrado en el hotel.

Un pequeño grupo de fans nos encontró. Me detuve y les dediqué tiempo. Era un poco caótico.

-¡¿Se calman?! -alzó la voz Jake-. Cinco minutos, antes de que me lo lleve -dijo.

Las chicas se tranquilizaron un poco, así que empecé a sacarme fotos con ellas.

Una chica de mi edad, supongo, me mostró un tatuaje que se hizo en mi honor.

-¿Es real? -pregunté impresionado. Ella asintió con lágrimas en los ojos-. ¡Wow! Qué bonito -la abracé.

Noté a una chica alta que me observaba embobada. Le agarré la mano, pero no reaccionaba. ¿Estará bien? Seguí sacándome fotos y charlando. Al parecer, Jake se olvidó de sus cinco minutos. Esta chica seguía observándome y la miré extrañado.

Okey, me está poniendo incómodo. Se la ve avergonzada y bastante tímida.

-¿Shawn, nos podemos tomar una foto? -dijo una chica pelirroja. Asentí con una sonrisa.

-Bueno, niñas, haremos una grupal y luego me tengo que ir -dijo Jake.

Tomé el móvil de alguna de las chicas y saqué la foto.

-¿Nos veremos en el show? -pregunté, y todas asintieron emocionadas.

-Vamos, Shawn -dijo Jake, y empezó a tironearme hacia la furgoneta. Saludé por última vez al grupito de fans.

-Este grupito se comportó -dijo Connor.

-Así es -reí. Por la ventanilla, las vi de nuevo-. Martina -murmuré, y sentí cómo mi corazón se apretaba al verla.






















ella existe.


Recuérdame ~ Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora