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-¿Qué fue todo eso, Shawn? -me preguntó Jake al entrar a la furgoneta.

-¿Qué cosa? -pregunté. Él quedó pensativo.

-Mmm, no, déjalo -murmuró, restándole importancia, a lo que yo simplemente encogí los hombros.

En el trayecto de regreso al hotel, permanecí callado, observando por la ventanilla, aunque por dentro, me sentía extremadamente feliz.

Una sonrisa traviesa se dibujó en mis labios. Estaba realmente contento, diría que demasiado.

Martina existe. Es muy hermosa, mucho más que en aquel extraño sueño.

La pregunta del millón: ¿Ella recordará el sueño? O mejor dicho, ¿habrá soñado lo mismo que yo?

Mordí mi labio inferior nervioso.

Al llegar al hotel, Connor me acompañó hasta mi habitación y le di paso.

Se sentó en el borde de la cama y agarró mi laptop.

-¡Ok! Tenemos que buscar a esa curiosa chica -dijo, y asentí nervioso.

Entró en Twitter y buscó entre los hashtags, pero los minutos se convirtieron en horas.

-¿Nada? -pregunté impaciente. Él negó con la cabeza.

Llevábamos horas encerrados. Incluso habíamos pedido servicio a la habitación.

La buscamos en todas las redes sociales, pero no sabíamos nada de ella. Nada.

-Es mejor... dejarlo -contesté desanimado-. Mañana tenemos la prueba de sonido y debemos estar frescos.

-Shawn, no te rindas -dijo Connor.

-Es inútil -suspiré con pesadez.

Él restó importancia a mis palabras y siguió buscando.

Mi móvil sonó y lo agarré. Al ver el nombre, sonreí.

-Cariño -dije.

-¡Shawni! ¿Qué tal, Argentina?

-Me recibieron con mucho amor y estuvimos recorriendo un poco. ¿Y tú, cómo estás?

-¡Eso es genial! Bien, tengo unos días de descanso, así que tenía pensado hacerte compañía en el concierto de Chile -chilló de la felicidad.

-¡¿En serio?! Mila, eso suena genial, pero deberías visitar a tu familia.

-Bebé, lo haré. Tendré tiempo de estar con ellos, ya que estaré por un tiempo en Miami trabajando -pausó-. A ti no te veo hace muchos meses y te extraño -pude notar que hizo un puchero-. Por favor, déjame hacerte compañía.

-Cariño, tienes todo el derecho. Me hace una gran ilusión verte -sonreí-. Te espero en Chile y luego de ahí llevamos a nuestra familia a México para pasar el último show de mi tour y nos tomamos unos días de vacaciones.

-¡¿En serio?! ¡Eso suena genial! Les avisaré a mi familia -contestó-. Nos vemos en unos días, descansa y mucha suerte en el show.

-Tú también descansa, te amo.

-Te amo más, Shawni. Adiós -y colgó la llamada.

Suspiré feliz. En unos días veré a Mila.

-¡Hey! ¡Shawn! -presté atención a Connor.

-Dime -contesté.

-La encontré -dijo, y mis ojos se abrieron de par en par.

-¡¿Qué?! -me acerqué a él apresurado.

Me señaló la imagen, y éramos nosotros.

-Es ella -murmuré.

Recuérdame ~ Shawn MendesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora