𝙴𝚕 𝚟𝚒𝚊𝚓𝚎 𝚍𝚎 𝚂𝚑𝚒𝚣𝚞𝚗𝚎 | ᴋᴀᴋᴀꜱʜɪᴢᴜ

XXXIV. La persona que me gusta.

Al día siguiente, Kakashi acompañó a Shizune hasta su casa.

- Fue una linda noche - Kakashi le entregó aquella cajita que había ganado la noche anterior.

- Lo mismo digo - respondió Shizune.

- Te veré pronto, ¿Está bien? -

- Claro - respondió, y pronto sintió los cálidos labios del Hatake sobre su cabeza.

- Nos vemos - finalizó y lo vio caminar en dirección a su casa.

Y ella le despidió con un ademán.

• • •

Entró a casa, dejando el yukata, y su mochila en la entrada, se había cambiado de ropa en casa de Anko, por lo que vestía ropa deportiva.

Se dirigió a la cocina y tomó la tetera para ponerla a fuego, sacó de la alacena algunas galletas dulces y preparó la mesa.

Después giró su mirada al reloj de pared, eran las 8:00 am.
"No sé si debería despertar a Tsunade-sama" se dijo.

- Buenos días Shizune-chan - escuchó una voz a sus espaldas que le sorprendió.

- J-Jiraiya-sensei - tartamudeó en un intento de que la tacita blanca que sostenía no se cayera.

- Disculpa te asusté - el sannin se aproximó a ayudarle con la tetera.

- Debes estarte preguntando qué hago aquí - sonrió - anoche llegué a Konoha, y me di cuenta del festival de luna nueva, así que decidí ir a tomar algo antes de los fuegos artificiales -

Flashback:
Al pasar por uno de los puestos escuché mucho escándalo, y una mujer salió buscando a la policía Uchiha.

Entré para ver qué pasaba y encontré a Tsuna a punto de golpear a un hombre, rodeada de diez sujetos intentando calmarla.

Me reí al ver el revuelo que esa mujer puede hacer en un lugar tan pequeño, y me acerqué a ella.

Por su olor, de inmediato noté que estaba ebria, así que la cargué sobre mi hombro y me la llevé del lugar.

Tuve que pagar las sillas y vasos que rompió, pero al menos no la llevaron a la cárcel.

Estuvo despierta lo suficiente como para darme la dirección de su casa, y subir por sí misma a su habitación, hasta me amenazó con romper mis costillas si llegaba a intentar algo.

Fin del flashback.

Shizune había servido té para los dos, se encontraban frente a frente mientras ella escuchaba la historia.

- Disculpe Jiraiya-sensei, no debí dejar sola a Tsunade-sama -

- Tranquila Shizune-chan, tú no eres su niñera, tienes derecho a divertirte con tus amigos, o tener citas románticas, si sigues así terminarás sola como nosotros -

Shizune no dijo nada.

- Además, me gusta cuidar de ella, siempre lo he intentado hacer, aunque la mayoría de las veces me evada  - comenzó a reír.