La historia de Shizune Kato, una de las mejores ninja médico, amistad, familia, pasado y su romance con el prodigioso Kakashi Hatake.
*Fanfic semi apegado al manga, con datos no canónicos, basada en mi primer fanfic "Entre las sombras" el cual se e...
Los días habían transcurrido, para algunos más rápido que para otros, hasta que finalmente, llegó el día que el sexto hokage había estado esperando: el regreso de su asistente.
Esa mañana, despertó de buen humor, se dio una ducha y vistió su traje táctico para luego salir de su departamento, en dirección a la oficina, llegó sólo 15 minutos tarde, bastante temprano a comparación de los días anteriores en los que casi llegaba 20 minutos antes del almuerzo.
Lo que era un alivio, ya que estaba por colmar la paciencia de Sakura, lo cuál resultaba una muy mala idea.
- Buenos días chicos, ha trabajar que por fin es sábado - saludó el hokage alegremente y se sentó frente al escritorio.
- Vaya, parece que alguien durmió bien - susurró Shikamaru.
- Debe estar feliz de que Shizune-san regresa hoy de su misión - contestó Sakura.
- Vamos, vamos chicos; menos charla y más acción, no queremos que Shizune regrese y encuentre más trabajo del que dejó, ¿Cierto? -
Ambos se miraron entre sí y asintieron, el Hokage había confirmado sus sospechas, se encontraba feliz de que su mano derecha volviera a la aldea.
• Unas horas después:
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- Oh, es la puerta, ¿Shikamaru-san, puedes abrir? - preguntó la kunoichi pelirrosa.
El Nara estaba por levantarse de su asiento, cuando vio a Kakashi a la puerta, girando la manija.
- Qué velocidad... - dijeron los más jóvenes al unísono.
- ¡Bienvenida Sh... ¿Tonton?! -
- Oink, oink - saludó la cerdita y entró a la oficina.
- Ya decía yo que alguien faltaba en este lugar, ¿Dónde habías estado? - preguntó el Hokage volviendo al escritorio.
- Oink, oink - la cerdita se colocó sobre una pila de libros.
- Mm, entiendo, no te culpo, tampoco tenía muchos ánimos de estar aquí - contestó Kakashi - pero hoy, nuestra querida Shizune regresa, les invitaré la cena para celebrar -
- Oink!?-
- Supongo que puedo pensar en un menú vegetariano, no te preocupes por eso -
La cerdita asintió y volvió a su rutina habitual, sentarse a lado del escritorio de Kakashi y dormir plácidamente hasta que sus servicios fueran requeridos.
