𝙴𝚕 𝚟𝚒𝚊𝚓𝚎 𝚍𝚎 𝚂𝚑𝚒𝚣𝚞𝚗𝚎 | ᴋᴀᴋᴀꜱʜɪᴢᴜ

XXXIX. Tengo un resfriado

Luego de finalizar sus deberes en el hospital, Shizune decidió ir a casa para ducharse y descansar un poco.

Tan pronto llegó, dejo de lado su bolso junto a la invitación y se metió a la ducha.

"Me pregunto si Kakashi-kun asistirá a la reunión... Me gustaría ir con él, nunca he asistido a una reunión de ex alumnos, aunque no creo poder soportar las miradas del antiguo club de fans de Hatake Kakashi" comenzó a angustiarse.

Salió de la ducha envuelta en una bata de baño, cuando escuchó que alguien llamaba a la puerta principal, lo cual le pareció extraño dado que nadie la visitaba; tal vez era Anko para pedir nuevamente la arrocera prestada, o Kurenai buscando algunas plantas para un nuevo medicamento.

Bajó rápidamente y se asomó por el ventanal, en seguida fue consiente de los cabellos color plata y el uniforme oscuro: de Kakashi-kun.

¿Está bien recibirlo así? Se preguntaba mientras observaba su bata y los pies pálidos descalzos.

- ¡Shizune! ¿Estás ahí? Te necesito - su voz sonaba extraña.

Entonces no lo pensó más y abrió, el aspecto del Hatake era preocupante, su único ojo visible estaba enrojecido casi como él Sharingan, su cuerpo temblaba y estornudaba una y otra vez.

- ¡Kakashi-kun! ¿Qué te pasó? - posó una mano sobre su frente y se percató de la fiebre.

- No lo sé, creo que tengo alta la temperatura, entrenaba con los chicos pero me sentía fatal, así que cancelé el entrenamiento -

- Pasa, te prepararé un té de inmediato -

Dudó sobre dónde debería antenderlo, concluyendo que en caso de que él se sintiera mejor, no podía hacer muchos esfuerzos, "debo cuidarlo" se dijo.

Así que lo guió al segundo piso, rodeando con un brazo la cintura del peliplata y avanzando lentamente, mientras decidía a qué habitación sería mejor llevarle.

Tsunade-sama debe tener un desastre, por otro lado, el cuarto de huéspedes está fatal, recordó, resolviendo llevarlo a su cuarto.

- Recuestate aquí - le ayudó a meterse a la cama, mientras le cubría con las mantas.

- ¿Esta es tu habitación? Huele bien... - suspiró.

- Iré a preparar una infusión, vuelvo en seguida - anunció.

(...)

Subió con una taza de té acompañado de un caldo con verduras.

- ¿Puedes levantarte? -

- Eso creo -

- Aquí tienes, este té ayudará a bajar la fiebre y los estornudos, el caldo te ayudará a fortalecerte -

El Hatake se quedó pensando.

- ¿Qué sucede? -

- Umm, bueno, creo que me siento un poco débil para comer el caldo por mi cuenta -

- ¿Eh? -