LXXVII. La boda de Naruto II.

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Tan pronto finalizó la ceremonia, todos los invitados se dieron cita en el jardín, donde la recepción se llevaría a cabo.

Parecía que la unión entre el Uzumaki y la Hyuga, había producido nuevas parejas en la aldea, desde la hermosa Ino Yamanaka qué no se separaba de Sai, hasta Genma y Anko, que comenzaban a ser observados por sus compañeros shinobis con intriga.

- No, no tengo idea - dijo Kakashi a Sakura tan pronto se acercaba a él.

- No sabe que es lo que iba a preguntar... - se quejó su antigua alumna.

- Sobre Anko y Genma, llevas un buen rato espiandolos.

- De hecho... Es por algo que vi diferente en Shizune-san.

El Hokage no tenía idea así que lo pensó por unos segundos.

- Mmm, ¿Lleva un nuevo corte de cabello? Ustedes las chicas son las únicas que lo notan.

- El anillo - susurró cerca de su oreja.

- ¡Ah! Al fin alguien lo notó, con lo mucho que se está esforzando en ocultarlo, mira como sujeta esas copas de sake.

- No se burle, usted no es el que debe soportar a todas sus admiradoras diciendo que Shizune-san es muy poco para usted.

- ¿Eso dicen? ... Vaya, no tienen idea, si me conocieran un poco sabrían que soy yo el que no la merece, mírala es hermosa, no entiendo que vio en alguien como yo.

- El corazón de cada chica es todo un misterio - una voz familiar se unía a la conversación.

- Gai, ¿Cuánto tiempo llevas aquí?

- Escuché que murmuraban y me acerqué, creí que hablaban de Anko-san y Genma, han estado todo el día juntos...

- Tú también deberías aprovechar la oportunidad para conversar con alguien, ¿No hay una chica que te interese?

- Oh, es verdad Gai-sensei, hace un momento escuché que la mizukage lo estaba buscando...

El rostro del pelinegro se volvió pálido.

- ... ¡Ah! Ahí está... Mizukage-sama - llamó Sakura, y al instante, Maito Gai huyó de la mesa.

- Buen trabajo Sakura, pero creo que él simplemente no está interesado en Mei, ahora debo irme, iré a hacerle compañía a mi prometida.

Sakura suspiró al quedarse sola sentada a la mesa, rodeada de tantas parejas, en la boda de su mejor amigo, sin saber dónde se encontraba el amor de su vida, cuando giró su rostro, se encontró con la amable sonrisa de Tsunade Senju.

- A mí tampoco me gustan mucho las bodas, antes de que Dan muriera, hablaba sobre la nuestra, y nunca pudo ser.

- Tsunade-sama...

- Descuida, estoy bien. Y tú deberías estarlo también, aquí tienes - le entregó un poco de alcohol.

- Gracias, Tsunade-sama...

- No tiene nada de malo estar sola, mira a Shizune, pasó mucho tiempo así y ahora tiene al hombre que siempre amó a su lado, sólo se necesita esperar y dejar que nuestros sentimientos salgan, antes que sea muy tarde...

"¿No es así, Jiraiya?"

"¿No es así, Jiraiya?"

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𝙴𝚕 𝚟𝚒𝚊𝚓𝚎 𝚍𝚎 𝚂𝚑𝚒𝚣𝚞𝚗𝚎 | ᴋᴀᴋᴀꜱʜɪᴢᴜDonde viven las historias. Descúbrelo ahora