Nacida para Pertenecer (Borrador)

Capítulo 66

Layne amaneció llena de mucha energía. La noche había sido movida, pero había valido cada segundo de trasnocho. Definitivamente las personas tenían razón, el sexo de reconciliación es muy bueno.

Despertó antes que sus mates, tenía que comenzar a ponerse al día con su manada. Salió de la habitación en silencio y camino a la que sería o ya era su oficina, encontró a Arthur y Aidan desayunando.

- Buenos días, Alfa- ambos la saludaron y la invitaron a desayunar con ellos.

Layne acepto y durante el desayuno, estuvieron planificando enseñarle la ciudad y sus habitantes. Además de planificar citas para ir conociendo a las personas que podía elegir entre su círculo de confianza. 

Al finalizar el desayuno, Arthur la dejo en la oficina. A partir de hoy debía comenzar en sus funciones de Alfa, siempre podría contar con él para cualquier consejo.

- Buenos días, Alfa- Saludo Jason al entrar a su oficina- tiene visita.

Layne se extrañó, aún no esperaba a nadie.

- ¿Quién? No espero a nadie- dijo, con una sensación de malestar, algo no estaba bien.

- Dicen ser sus hermanos- Layne se sintió que se abría el suelo, que bueno que estaba sentada. Pues sus piernas flanquearon.

De pronto, la sensación desapareció. Sintió un calor recorriendo su cuerpo y poco a poco la seguridad volvió a ella. En segundos estuvo como si nada pasará. Sin duda, este era uno de los poderes que madre la había dado.

- Hazlos pasar- Jason fue a salir de la oficina- Jason - este detuvo- informale a mis betas de esta visita- asintió y salió de la oficina.

Layne pensó en el hermano que su madre le había comentado, no sabía de él. Helen le había comentado que Harry, lo había mandado fuera de la ciudad los días anteriores a su secuestro. Desde entonces no sabía nada de él.

Pensó que debía avisarle para que estuviese tranquila.

Daniel Wolf, estaba estresado. Su padre le había dado la orden: debía buscar y cuidar a su hermana.

Pero en sus meses de búsqueda, mientras compartía con sus medios hermanos. Sabía que no podía decirle eso, a la mujer que fue abandonado y desterrada.

No la conocía, pero si tenía el carácter similar a su padre. Tenía claro que no lo iba tomar bien. Lo que es peor, era probable que los desterrara de su vida. Así que los tres concordaron, no hablar de esa conversación con su hermana.

- Pueden pasar - Jason les indicó.

Los tres caminaron hacia su oficina y por alguna razón, sentían que llevaban el peso del mundo. Su hermana había sido abandonada y Dios sabe por lo que habría pasado en estos años.

Llegaron a una puerta de madera oscura, Jason tocó la puerta y desde adentro escucho un ¡Adelante!

Entraron y les recibió una oficina muy pulcra, parecía un consultorio médico. Observaron con atención todo el lugar, al fondo estaba un hermoso ángel. Ella era sin duda una aparición. Con sus hermoso ojos azules, su rostro de ángel y esa mirada de inocencia.

Daniel, reconoció a su madre en las facciones de su hermana. Una sonrisa risueña se escapó de sus labios. Se sintió estúpido, pues la situación no era para sonreír.

- Alfa- llamó la atención Jason- ellos son Daniel Wolf, Logan Ritx y Lion Weidtq.

Layne asintió, mientras les indicaba que se sentarán en el sofá. Daniel admiro como se manejaba, parecía una reina. No demostraba emociones, eso definitivamente lo heredó de Harry. Jason se retiró de la oficina y un silencio reino por unos minutos, que parecieron siglos. Daniel no sabía cómo iniciar la conversación.

- Entonces - rompió en silencio Layne, mientras los observaba atentamente- tú debes ser - dijo señalando a Daniel- el hijo de Helen.

-Sí- susurro Layne parecía un ángel, pero en este instante se veía capaz de arrancar cabezas.

- ¿Qué puedo hacer por ustedes? - indago levantándose de su escritorio para poder observamos mejor.

- Hemos venido a conocerte - soltó Daniel de sopetón, Layne le miró intensamente. Algo no le gustaba, olían a miedo y Daniel a mentira.

-¡Mientes! - susurro Layne- y no me gusta que lo hagan. Así que, sean honestos conmigo o esto no va terminar bien.

Los tres se miraron un poco asustados, fueron interrumpidos por la entrada de dos hombres.

- Alfa, ¿Podemos ayudarte? - preguntaron guardando las distancias. Algo que Layne agradeció.

- Por favor, quiero que conozcan a mis hermanos, según me dijo Jason. Aún no he logrado hablar bien con ellos.

Daniel y Dante, caminaron por la oficina y se hicieron las presentaciones entre todos. Layne observaba de pie, esperando la explicación de su hermano para mentirle.

- Yo...- volvió Daniel a mirar a su hermana- no te estaba mintiendo, es solo que no quería que sintieras odio por nosotros.

Layne se acercó a Daniel, lo miro como si le estuviese haciendo una radiografía.

- Toda la vida viví una mentira, no voy a tener personas a mi alrededor que me están mintiendo- dijo en tono molesto.

- Yo lo siento, Alfa. No era mi intención- expreso cabizbajo.

Layne miro a sus mates, mientras estos la convencían por su enlace para que les permitiera explicarse. Ella asintió, regresando a su silla.

- Hace unos meses, mi padre- Layne gruñó haciendo que Daniel se detuviese.

- Lo siento- le miró avergonzada- es mi reacción cada vez que se nombra a ese- explico con desprecio- Continúa.

- Nos citó en su oficina. Hasta ese día yo desconocía tu existencia. Siempre se me dijo, que antes de nacer yo, mamá había tenido abortos- Layne sintió su piel arder al recordar la historia- Padre- las garras de Layne se clavaron en su palma. Cerró sus ojos y se concentró, debía aprender a controlar su enojo. Cuando se calmó, noto que su hermano no estaba hablando.

Abrió los ojos y todos en el cuarto la miraban asombrados.

-¿ Que les pasa?- preguntó ansiosa.

- Acabas de brillar- expreso Dante.

Buenas!!! Hoy estoy muy emocionada, mi mamá cumpleaños. Y sé que no es gran cosa. Pero con un año en pandemia donde hemos perdido muchos familiares. Celebrar cumpleaños es una bendición. Hoy cumple 69 años.

¿Qué tal les pareció el capítulo?

Nos leemos pronto...