Cap 64

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Jungkook seguía acariciando la desnuda espalda de su amado mientras este jugaba con su cabello sin dejar de ver como el sol cada vez entraba más y más por la ventana... ambos se sentían a gusto así, pero un sonido horrible los asustó un poco sacándolos de su hermosa nube de amor.

-¿Kookie para que tienes una alarma?–Preguntó Jimin viendo a su esposo estirar su brazo para tomar el aparato. -¿A que te levantas a las 6 de la mañana?.

-A tomar mi medicina–Jungkook le dio un beso en la mejilla y dejó el aparato a un lado. -Y el capitán no se demora en venir a joderme...

Jimin le acarició el rostro y suspiró.

-Yo soy el que debería cuidarte, de paso te daría muchos besitos y así te recuperarías rápido...

Jungkook rio suave y lo volvió abrazar para besarlo, el pelimorado le siguió el suave beso hipnotizado por el sabor de los labios de su amado. El mayor con cuidado se acostó sin soltar a Jimin y se giró en la cama dejándolo debajo suyo.. el menor suspiró y lo abrazó con sus piernas para profundizar más el beso que si no fuera por esos golpes en la puerta seguro había abierto otra ronda de sexo.

-¡Jeon levanta tu trasero y tomate las pastillas!–Gritó Baek.

Jungkook se separó del beso y sonrio.

-¡Ya estoy despierto!–Le avisó dándole besitos a Jimin en el cuello.

-¡Cómo si hubieras dormido hámster!–Lo regañó Baek y le pegó a la puerta. -¡Así que levantate a tomar esas pastillas, haré el desayuno!.

-¡Okey, gracias!–Jungkook rio suave y cuando miró a Jimin este tenía las manos en el rostro, se las quitó y le vio el rostro rojo. -¿Que pasa mochi?.

-Él sabe lo que hicimos–Jimin habló bajito. -Kookie... que vergüenza... ese hombre sabe lo que hicimos...

Jungkook sonrio un poco divertido y le dio un casto beso.

-Amor él no es un santo... él es peor cuando el comandante Chanyeol viene y se queda aquí–Jungkook levantó su torso y tomó de la cintura a Jimin. -Mochi no te muevas.. saldré de ti...

-¿Para que?–Preguntó Jimin.

-Mochi tomaré mi medicina–Jungkook quería reír por lo mimado que estaba actuando su esposo, pero le gustaba por que después de tomar sus pastillas lo consentiria mucho.

Jimin cerró los ojos y suspiraba mientras sentía como el miembro de su amado se deslizaba por su estrecha entrada... una vez sin ninguna intromisión el menor se movió libremente en la cama buscando una cobija.

Jungkook se bajó de la cama y así como Dios lo trajo al mundo buscó su medicina y un vaso de agua, Jimin se quedó acostado mirándolo y recordó la última vez que lo vio así.

-¿Primero desayuno o nos bañamos?–Le preguntó Jungkook.

-Mmm... si me vas a dar besitos y muchas caricias, el baño–Jimin se sentó y esperó a su esposo en la cama. -Después podemos hacer algo rico...

-Entonces ven–Jungkook estiró sus brazos y Jimin sin pensarlo se le subió encima. -Aquí no agua caliente pero...

-No me importa kookie–Jimin le dio un casto beso. -Yo solo quiero bañarme contigo como lo haciamos antes...

Jungkook llevó a su esposo hasta el baño y Jimin se dio cuenta que era super pequeño, a duras penas tenía una ducha y un inodoro pero la verdad ahora no le importaba nada que no fuera estar con su castaño.

El mayor abrió la llave del agua y Jimin al sentir el agua dio un brinco.

-¿Muy fría?–Le preguntó Jungkook dándole besos en el cuello.

-Shi–Jimin apretó su agarré e hizo intensión de bajar las piernas pero Jungkook no lo dejó. -¿Kookie?.

-Haré que se te quite el frío mochi–Jungkook lo pegó a la pared y le dio una lamida en el cuello. -¿Quieres?.

Jimin se mordió el labio cuando sintió las manos de su amado en sus nalgas.

-Quiero... todo lo que venga de ti lo quiero kookie–Jimin lo tomó de las mejillas y le dio un dulce beso que solo él sabía darle.

Jungkook no espero mas y así empezó un desenfrenado beso, metió su lengua a la boca del menor y éste la chupo como si fuera un dulce.. el castaño tomó su ya erecto y mojado miembro para alinearlo con la entrada palpitante y necesitada de su amado.

-Despacio..–Susurró Jimin en sus labios y siguió besandolo.

Jungkook bajó las caderas de Jimin suave y se fue introduciendo lentamente y con placer en lo que a cada segundo recordaba más y más como su máxima felicidad. Cuando ya faltaba poco para terminar se hundió de golpe haciendo gritar al menor...

Jimin sonrió negando levemente y suspiró, solo le bastó unos segundos tomar aire y le pidió a su esposo que se moviera, Jungkook puso una mano contra la pared y con la otra agarró la cintura de Jimin y lo empezó a penetrar fuerte nublado todos sus sentidos.

Jimin enterraba sus uñas en los hombros del mayor cada vez que sentía como se hundía en su interior llenandolo no sólo de placer... si no de amor, de felicidad y vida. El pelimorado miró a su esposo y verlo así con los ojos cerrados y la boca semi abierta dejando salir gemidos y balbuceos de placer lo hacía sentir aún más ecxitado.

Jungkook abrió los ojos por unos segundos y se dio cuenta de la mirada y no puedo evitar sonreír... le dio un casto beso y unió las frentes sin dejar de penetrarlo.

-¡¿Por qué me miras así?!–Preguntó Jungkook agitado.

-¡Por qué te amo!–Jimin acercó los labios y lo volvió a mirar a los ojos. -¡Por qué eres mi vida kookie!.

Jungkook sintió como su corazón se aceleró más y no sabía si era por la velocidad de sus embestidas o por el inmenso amor que crecía más y más dentro de sí. Besó a Jimin con todo lo que sentía y sintiendo como pronto llegaría a su orgasmo tomó a Jimin de los muslos y aumentó las embestidas hasta que Jimin dejó sus labios para gemir fuertemente por haber llegado a su clímax, gruñó al sentir su miembro asfixiado y se vino en un placentero orgasmo.

Jimin perdió sus fuerzas y sólo Jungkook lo pudo mantener arriba, salió de él con cuidado y río divertido cuando Jimin Gimió.

-No te rías kookie–Jimin le mordió una mejilla.

-Lo siento mi amor–Jungkook le dio besitos en el rostro y lo hizo sonreír. -Terminemonos de bañar...

Jimin asintió y dejó que su esposo tocará su cuerpo a su antojo para que lo mimara de la manera más tierna del mundo... bañandolo cómo si fuera un bebé, uno sexi y hermoso pero al fin un bebé.

Al terminar de bañarse Jungkook lo cargó y lo dejó en la cama, pensó en ponerse lo que había traído puesto desde la noche anterior pero Jungkook negó y mejor le dio un sueter propio... Jimin se lo puso y le quedó enorme, ante los ojos del mayor su esposo era la cosita más tierna del mundo.

-Iré por el desayuno... espéreme aquí–Jungkook le dio un beso en los labios y Jimin le abrazó el cuello. -Mochi...

-Yo deberia consentirte kookie–Jimin hizo un puchero. -Yo debí hacerte un rico desayuno... traertelo a la cama y que después de recompensa me dieras muchos besitos....

Jungkook rio suave y acostó a Jimin subiendosele encima dándole un suave beso, al separarse le sonrio y le dio un beso en la frente.

-Mochi... tu sola presencia aquí ya merece una recompensa–Jungkook se levantó y suspiró para ponerse una camisa. -Vuelvo rápido... no salgas que nada cubre tus piernas....

Jimin soltó una fuerte carcajada y asintió, Jungkook lo dejó en la cama riendo y salió de la habitación directo a la cosina ignorando que el capitán iba detrás suyo en silencio.

Nada Es Lo Que Parece 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora