Mi ginecólogo

Capitulo 55

Lauren

-Rápido Lauren se nos hace tarde – me apresuro Cat de nuevo.

-Ya voy – le dije.

-Pues no veo que te muevas – me dijo caminando delante de mí.

-Perdone usted, pero como sabrás estoy embarazada – le conteste.

-Sí, pero eso no te da el derecho de ser floja – me dijo riendo.

-Muy bien, ya voy – solo llevamos una semana de universidad y ya estaba exhausta. Pero tengo que tener fuerzas suficientes ya que desde que se enteraron que estaba embarazada me quisieron quitar la beca, pero le prometí al director que no bajaría mis notas y acepto.

Todavía sigo pensando en Sebastian, me pregunto si estará bien o si esta con la p... de Elizabeth, no lo sé, pero espero que no sea lo último que pensé. Solo espero algún día poder olvidarme de él como el de mí y poder vivir felizmente con mi hija.

Después de subirnos al coche, Cat condujo como loca para llegar a tiempo. Al fin llegamos y cada quien se fue por su lado. Yo a mi clase de arte y ella a su clase de medicina.

Las clases pasaron demasiado rápido hasta que toco la hora del almuerzo. ¡Si! Ya era hora porque me muero de hambre. Tenía unos antojos horribles, quería comerme un bote entero de helado de vainilla.

Llegue a la cafetería y compre un gofre con chocolate y helado de vainilla ¡oh dios! Me dirigí hacia la salida para buscar a Cat, pero alguien choco conmigo y mi gofre fue directo al suelo.

-No puede ser... mi gofre – dije como una niña pequeña mirando mi gofre tirado en el suelo.

-Perdón, lo siento – dijo el desconocido – no te he visto.

-No te preocupes – le dije mirándolo a la cara y me quedé muda. El chico era guapo... sexy.

-Si quieres te compro otro... - dijo sonriendo.

-Que sonrisa... - entonces me di cuenta que lo dije en voz alta y el rio – perdón pensé en voz alta, por cierto, soy Lauren ¿y tú?

-Matt, gracias por el cumplido – sonrió de nuevo – pero no me has respondido ¿te compro otro gofre?

-No, gracias – dije.

-Insisto, yo te la he tirado al suelo y tengo que compensártelo – me dijo con sus ojos verdes/azules.

-Está bien, pero solo te la acepto porque me muero de hambre – le conteste.

-Perfecto, ven – dijo y me guio hacia la cafetería de nuevo - ¿de dónde eres? Porque se nota que no eres de Francia.

-Soy de Estados Unidos – dije sonriéndole.

-Genial, yo soy de Inglaterra – me contesto.

Y así es como conocí a mi nuevo amigo, estuvimos conversando un buen rato de muchas cosas y de nosotros para conocernos mejor. La verdad es que me había caído muy bien y era muy atento conmigo a pesar de que nos acabamos de conocer.

Al terminar las clases, Matt insistió en llevarme a casa y acepte. Él era un gran chico me hizo reír todo el camino, me lo pasaba muy bien con él. Cuando al fin llegamos.

-Lauren – dijo – no se... si quieres... si te gustaría salir conmigo alguna vez – me dijo y me quede callada.

-Matt, no estoy lista para salir con alguien mas – suspire – acabo de salir de una relación que no termino para nada bien y la verdad es que no quiero salir con nadie más, lo siento.

-No te preocupes, lo entiendo – sonrió – pero no te salvaras, seguiré insistiendo hasta que un día me digas que sí.

-Adiós Matt – salí sonriendo y me fui directa a mi habitación para dormir un poco. Estoy muerta del cansancio.