Capitulo 60

1.4K 63 4
                                    

Sebastian

- ¡Sebastian cariño! – dijo una chica – lárgate, quiero estar con mi novio – le dijo de un modo grosero a la enfermera quien de inmediato se fue.

- ¿Hola? – dije dudoso.

- ¡Dios! Cariño me entere de que no recuerdas nada – sonrió ella.

-Sí, no recuerdo nada – la mire, era guapa pero no podía creer que ella fuese mi novia – perdona por la pregunta, pero... ¿eres mi novia?

-Por supuesto que si cariño – se sentó a un lado de mi en la cama y me beso salvajemente.

Pues como es mi "novia", aunque no estaba seguro de que lo fuera, le conteste al beso.

Lauren

Hoy me había despertado por la tarde. Esto del embarazo de verdad es cansado, cada día estoy más cansada y casi no puedo hacer nada. Pero bueno, me levanté y me vestí. Tenía que ir a ver a Sebastian, espero que hoy sea el día en el que despierte.

- ¡Lauren! – llego Alexandra gritando a la cocina - ¡ha despertado! – me dijo saltando de felicidad mientras yo me quede congelada con una sonrisa en mi rostro.

-Tengo que irme – dije tome las llaves para después salir de ahí.

Sebastian despertó, es la mejor noticia que me pudieron dar, bueno aparte de que estaba esperando una niña. Tome un taxi y apresurando al taxista, al fin llegue. Corrí como pude desde la entrada hasta la habitación.

Solo estaba a unos pasos de volver a verlo, probar sus labios de nuevo. Con una sonrisa me pare en la puerta y poco a poco la abrí, esperando encontrar a un Sebastian esperándome.

Pero eso no fue lo que vi. Sebastian se estaba besando con Elizabeth.

Otra vez, me volvió a partir el corazón. ¿Acaso no le importa que este embarazada? Recordé el día en que me dijo que solo fui un juego... tenía razón solo fui eso. Nada más.

Las lágrimas no tardaron en salir y me maldije por llorar. No quise ver más y simplemente cerré la puerta sin que ellos se dieran cuenta. Con el corazón roto regrese a casa de Chris y Alexandra.

Otra vez llore por él, aun después de que jure no volver a hacerlo. Tenía que tomar una decisión y rápido. Regresaría a Francia, Sebastian no sabe dónde estoy. Será mejor que me olvide definitivamente de él y empiece una nueva vida lejos.

Narrador omnisciente...

Lauren entro en la casa, caminando como zombi y con lágrimas en los ojos subió las escaleras. Pero antes de subir el último escalón se resbalo y callo por las escaleras hasta que llego al piso de abajo.

- ¡Dios! ¡No! – se tocó el estómago - ¡Mi bebe!

- ¡Lauren! – grito Alexandra y bajo las escaleras corriendo – tranquila llamare a una ambulancia.

Lauren lloraba mientras se tocaba el vientre y veía como su vestido se llenaba de sangre.

-No quiero perder a mi bebe – dijo antes de caer desmayada por el dolor.

Mi ginecólogoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora