HOUSE OF CARDS : Saga

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Nadie menciono nada más del tema, cada quien sabía que debía de guardar el secreto aún cuando eso significaba que Taehyung viviera engañado por ahora, era lo mejor.

- Vine en cuanto me dijiste que pasaba algo - dijo Jimin, llegando en compañía de Yoongi, llegando al jardín de la casa, ahí Taehyung no los vería platicar.
- Debe ser muy importante como para que dejara mi trabajo y Jimin sus clases - menciono el de ojos felinos, mientras se sentaba en el césped.
- Algo está pasando - dijo Jungkook, jugando con sus manos - y necesito hablarlo con alguien, no puedo con papá porque me prohibió hablarlo.
- ¿Ni siquiera con Tae? - pregunto el mayor.
- Esque el menos que nadie debe saberlo.
- Bueno entonces dinos - lo alentó Jimin, sentandose junto a el en la pequeña banca - no puede ser tan malo.

Jungkook bajo la cabeza, y ambos mayores lo vieron preocupado.
- ¿Jungkookie?
- Mi nana es madre de mi tío Jin - Jimin abrió la boca en sorpresa y Yoongi solo elevó las cejas - es medio hermano de Tae, no es hijo de la abuela.
- Cristo bendito..~ - musitó Jimin cubriendo su boca con ambas manos.
- Vaya, además de abandonar a sus hijos, era un hijo de puta el señor .- canturreo Yoongi.

- ¿Y porque no puede saber Tae?
- Ustedes más que nadie deben saber porque - les dijo histérico - Taehyung no puede recibir noticias que lo bloqueen. Es muy joven.
- Es verdad - asintio Jimin - cuando te fuiste a Rusia... - dijo haciendo memoria - el médico dijo que debía evitar eso porque le producía estrés y podía olvidar ciertas cosas de su vida.
- ¿Jin lo sabe? - continuo Min, recibiendo una negativa - ¿Y porque no le han dicho?
- Porque no sabemos a dónde fue. Además, no ha llamado en días, ¿que los hace pensar que lo haría?

Los tres se quedaron en silencio por un segundo, para después escuchar unos balbuseos desde la puerta de la propiedad, mirando al pequeño Alex entrar saltando, mientras Taehyung lo recibía.

- Dios - dijo Jimin golpeando su frente.
- ¿Que pasa bebé? - pregunto su pareja acariciando su pierna.
- Tae me dijo que hoy traería a Alex, quiere que vayamos al parque de diversiones - Jungkook y Yoongi escucharon con atención - ya que no hemos salido mucho, pensó que era buena idea.
- Por favor Jimin - dijo Jungkook - no le menciones nada, ni por error.
- Cuenta con ello - entonces miro a Yoongi - no te molesta que te deje solo un par de horas, ¿verdad minino?
- Claro que no. - respondió besando el dorso de su mano - solo cuídate. Iré a ver unas cosas pendientes y vengo por ti.
- Eres el mejor.

El menor sonrió enternecido; jamás había visto una pelea entre ellos, bueno, sin juzgar la que vio cuando al parecer Yoongi le pinto el cuerno con la esposa de Chanyeol. Eran tan perfectos, era como el frío y el verano, encajaban a la perfección aún cuando Jimin fuera más demandante.

- ¡Ey Jimin! - grito Taehyung desde la entrada - ¡Ya vámonos! - el rubio le hizo una seña de aceptación, y beso a su novio antes de despedirse de Jungkook.
- Voy a cuidar de él - el menor asintio, y solo lo vieron correr hasta su amigo, mientras Taehyung le mandaba un beso a Jungkook, y este se despedía con una sonrisa y la mano.

- ¿De qué hablaban? - le pregunto Taehyung, mientras Jimin le hacía cariños al menor.
- Me contó que tiene unos problemillas - mintió, mostrándole a Alex los brazos, a lo que el menor accedió, llendo a sus brazos.
- Si, no le está yendo bien con la escuela.
- Oh - al parecer Jimin sin querer se adapto a la mentira - ya pasara. ¿Quieres ir a los carritos voladores? - dijo frotando su nariz en el cuello del niño.
- ¡Si! Papá dijo que me va a comprar un algodón ¡Gigante! - entonces alzó sus bracitos - para mí solo.
- Excelente. Vámonos entonces.

Los tres salieron de la propiedad en el auto de Taehyung, con dirección al parque de diversiones, dónde lo primero que se hizo, fue comprar diademas : la de Alex, tenía orejas de osito, la de Jimin orejas de gatito (la escogió porque le recordaba a Yoongi) y la de Taehyung, era una de orejas de tigresito, que claro, Alex escogió.

- ¡Papi quiero un algodón! - dijo menor, mientras era tomado de una mano por su padre, y de la otra de Jimin.
- ¿Que te parece si primero subes a los juegos y después comes? - pregunto Jimin.
- Si. Te dolerá el estómago, es mejor así - continuo Tae.
- Está bien. Quiero ir aya - señalo entonces el carrusel, con caballos muy bonitos al igual que carretas lindas.
- Muy bien, vamos.
- Yo los veo desde aquí - dijo Jimin - me aburren esos juegos.

El menor asintio, y jaloneo a su padre, para subir al juego.
- ¡Mira papá un globo! - dijo señalando a un hombre que estaba cerca.
- Espera aquí - Alex solo pudo ver cómo su papá se acercaba, y tomaba uno morado para después pagarle al hombre, y volver a su lado - toma.
- Gracias papi, pero.. ¿porque es morado? - dijo arqueando sus cejas.
- Te diré un secreto - entonces el juego se puso en movimiento, y Taehyung se quedó frente al caballo que montaba su hijo. - el morado, es el color más bello del arcoiris; significa amor y confianza. ¿Confías en mí?
- Si papá.
- Yo también confío en ti. Y se que dónde quiera que estés, tu y yo, siempre volveremos a estar juntos otra vez.
- ¿Lo prometes? - le pregunto el niño con sus pequeños ojos llenos de ilusión.
- Siempre, dejaré un globo en tus sueños; ve a buscarlo. Ahí voy a estar.

Jimin solo podía mirar la escena plenamente enternecido, en cuanto miro que Alex brinco del caballo a los brazos de su papá, mientras el juego seguía en movimiento.

- Tu vida será larga, plena y feliz - susurro Jimin - tus buenas acciones, tu buen corazón y tu alma de niño... Te han salvado Kim Taehyung. Estoy orgulloso de ti, mi alma gemela.

La tarde paso entre juegos y risas, entre su idas y bajadas, pero sobre todo, en memorias que el pequeño Alex mantendria y atesoraria por mucho tiempo.

Alex amaba a su papá, y siempre lo haría.