Obsesión || Jack Conway y tu [TERMINADA]

31. Fuck you, fuck everything 😊🖕🏻

•°•Narra Tanya•°•

Sonrío cuando Emilio besa mi cuello, rozando su nariz contra mi oreja y le doy un leve golpe en su pecho. Acaricia mi mano con demasiado cariño y no puedo evitar sentirme un poco emocionada por eso.

Una de sus manos está en mi cadera y la otra se posa en mi abdomen, jugueteando con el piercing de mi ombligo que tengo escondido debajo de la tela ceñida de la falda negra.

—¿Quieres más? —Pregunta agarrando la botella de vodka y asiento.

Evito a toda costa mirar a mi jefe que tengo enfrente y me concentro en el que tengo abajo de mí.
Emilio habla tranquilamente con Gustabo mientras que yo estoy sobre su regazo, acariciando su pecho.

Kylie no ha cuestionado nada y eso me hace sentir más segura, solo se concentra en Greco mientras ambos acotan leves cosas a la conversación.
Conway no ha dicho palabra alguna luego de llegar casi detrás nuestro y no me interesa en lo absoluto.

Saco un cigarrillo de mi cartera y lo dejo en mi boca, el Mexicano lo enciende y le doy una calada profunda. Suelto el humo en su cara y lo aspira.

—Pero mira nada más... —Dice Alex algo ebrio—. Cuando dijeron que andabas con alguien, creí que no iba en serio. —Comienza a reírse.

—La vida es así. —Me encojo de hombros cuando el mexicano deja un beso en mi mejilla—. Hay gente que vale y gente que no.

Le doy una calada a mi cigarro, y luego bebo otro poco más de vodka.

—¿Holaaa? ¿Dónde está la Tanya que no quiere nada serio? —Vuelve a hablar el ruso y suelto una leve carcajada.

—Nunca dije eso, hasta ahora nunca había llegado Alguien que valga en verdad la pena. —Dirijo mi mirada a Emilio, a sus labios, en específico—. Cuando te llega, te llega. —Me encojo de hombros y mi hombre me abraza más, apoyando su cabeza en el hueco libre de mi cuello.

Si Conway quiere jugar sucio, pues lo haremos a su manera. Me deshago de mis gafas, mirando hacía el frente, mirándolo a él, y me arrepiento totalmente de eso, aunque me mantengo totalmente firme, su mirada me genera...

No, su mirada no me genera un carajo.

Sonrío con soberbia y envuelvo uno de mis brazos en el cuello de Emilio.

—¡Por los novios! —Grita Ivanov alzando su copa.

Emilio alza la botella y yo mi vaso, como todos los presentes menos Jack. Luego de ese brindis, junto mis labios con él, suspirando. El alcohol hace estragos en mí, logrando que tome decisiones algo estupidas, pero de esta estoy ridículamente orgullosa.

Pasamos de estar sentados mientras bebemos, a estar en una pista rodeados de gente, bailando a más no poder canciones de los 90' que iban perfectamente para lucirnos en la pista.

Envuelvo mis brazos en el cuello de Emilio y lo atraigo a mi, besándolo mientras sonrío ya que no dejo de sentir la mirada del gilipollas de mi jefe sobre mi.

—Quiero ir al baño... —Murmuro entre el beso y sonríe.

—Creí que iríamos lento. —Sigue besándome y golpeo su pecho.

—Idiota... —Su sonrisa se expande y me separo de él—. Ya vuelvo, no me olvides.

—Nunca lo haría, chiquita.

Camino con una sonrisa estúpida al baño y hago mis necesidades, me lavo las manos y camino hacia la puerta para salir pero...

—¿Qué...? —Intento decir cuando Mi jefe me empuja hacia adentro.