Obsesión || Jack Conway y tu [TERMINADA]

2.6. Fight👿

Narra Tanya

—No es necesario esto. —Murmuro un poco apenada.

—¿Quieres perder tu despacho?

—Ugh, cállate.

Me tiene en brazos mientras subimos las escaleras hacia el tercer piso Y de aquí puedo ver a varias oficiales murmurar mientras nos miran.

—¿Se les perdió algo? —Les grito de mala gana y niegan—. ¡A trabajar entonces!

Rápido se van y Jack pellizca mi mejilla pero lo aparto. Tuve que tomarme una semana de licencia más por esta gilipolles que tengo en el pie.

—Vaya, ¿Desde cuándo es tan estricta con sus agentes, comisario Morgan?

—Esto es humillante...

Camina hasta mi despacho y me deja en la silla, acomodo mi camisa y suspiro, cansada.

—¿Ya estás agotada? Yo te traje desde abajo.

—¿Desayunaste un payaso o qué? —Me recuesto en mi silla.

—Anda Tanya, deja el mal humor. —Me pasa unos archivos—. Adelante un par de cosas sin tí, junto con Volkov pudimos deducir varias cosas, los archivos ya están clasificados y mandamos a uno de tus agentes de encubierto.

Asiento a todo lo que me dice y se sienta frente a mi escritorio para trabajar junto a mí.

Me habla de que Maddie quiere iniciar clases de dibujo, aunque a mi niña le va muy bien en defensa personal, pelea con su padre de vez en cuando y a veces le deja unos pequeños moretones. Le encanta presumir eso a mi niña. También me comenta que ve a nuestro hijo más callado de lo normal.

—¿No habrá algún compañero que lo moleste en el jardín? Tal vez tiene vergüenza de decirnos.

—Tal vez, iré a hablar está tarde con los directivos. —Me pasa una carpeta—. No quería preocuparte pero... —Mi cuerpo entero se tensa cuando dice eso y lo miro atenta—. Anoche mientras le daba un baño ví que tenía un moretón en el brazo, me dijo que se lo hizo jugando en el receso pero no lo creo.

—Y por qué cojones no me lo dijiste ayer. —Espeto.

—No quería que te preocuparas demás, ya estabas tensa con todo el trabajo acumulado y...

—Estoy molesta.

—Tanya, está tarde iré, no te preocupes. Pediré que me muestren las grabaciones, tienen cámaras en todos los salones y hasta en el jardín de juegos.

—¿Irás?

—Claro Nena, no estés tensa que luego te duele la espalda. —Toma mi mano y la acaricia.

—Está bien... —Suspiro—. Sigamos trabajando que tenemos mucho por hacer, ¿A quién mandaste?

—A Dario, me pareció sensato ya que el necesita la experiencia, venderá droga por la zona oeste, y norte de la ciudad.

—Su zona. —Digo mientras leo los papeles.

—Exacto. Estamos a la expectativa de que lo agarren, solo así podremos seguir con el operativo.

Seguimos trabajando toda la mañana y estaba a punto de almorzar con él si no fuera porque Jacob me mandó mensajes.

—¿Cómo estás princesa? —Mira mi pie—. Aparte de lisiada.

—Jaja, muy gracioso. —Me lanza un beso y deja la bolsa con comida sobre mi escritorio.

—No sabia que te gustaba, hoy hay un clima bastante lindo así que decidí traerte puré de patatas con un filete.