Obsesión || Jack Conway y tu [TERMINADA]

32. Boyfriend or... 🤭🔐

Narra Tanya

—¡Una puta pierna rota, tres costillas, pulmón fisurado y la cadera dislocada! —Espeta Volkov y muerdo mi labio inferior, preocupada.

—Se merecía más la verdad. —Suelta Conway.

—¡Jack! —Le regaño y se encoje de hombros.

—¿Sabe usted que de suerte las cámaras no enfocaron la patente de su coche?

—Me la suda la verdad. —Se enciende un cigarro y se quita las gafas, mirando mis piernas descubiertas ya que llevo falda.

—¿Esta conciente de lo que le digo? —Inquirte Volkov, Hastiado, y Conway le resta importancia moviendo su mano—. Suficiente, me voy..

Sale del despacho y da un gran portazo, seguido de varios insultos en ruso.

—Emilio esta muy mal en el hospital. —Cruzo mis brazos, enfadada.

—¿Fuiste a verlo? —Se levanta de su silla, caminando hacía mi y asiento muy segura.

—Después de todo es mi novio. —Apaga el cigarrillo en el cenicero.

—¿Tu qué? —Inquiere mientras me toma de la cintura como un posesivo y paso saliva.

—Ya te lo dije varias veces, asi que deja de joderme. —No reponde, solo clava sus ojos en mi, enfadado mientras retrocedo hasta chocar contra su escritorio.

Me toma de los muslos, sentandome arriba de la madera oscura y abre mis piernas.

—¿Otra vez con lo mismo, Tanya? —Mete sus manos debajo de mi falda, agarrando mis bragas las cuales tira por mis piernas hasta sacarlas.

—¿Te jode que lo prefiera a él y no a tí? —Mi respiración se agita con cada movimiento que hace.

Me quito mi cazadora de cuero para estar más cómoda y tiro mi cabello hacía atrás.

—Abstinencia de cuatro días, ¿Te parece, Nena? —Baja la bragueta de su pantalón.

—¿Tú con una abstinencia? —Desenfunda esa pistola y aparto la mirada—. No te creo.

Apoyo mis manos en la madera, sosteniendome cuándo me abraza mientras hunde su rostro en mi cuello, besándome.

—Creelo, Nena. —Murmura contra mi oído—. Créeme por que esto... —Roza el glande contra mis pliegues, jugando con mi estabilidad— ...Es totalmente tuyo, ¿Va?

—Mentira. —Aseguro y niega.

—Esto es solo tuyo y de nadie más —Agarra mi rostro entre sus manos, uniendo nuestros labios en un beso algo urgido mientras que se hunde en mi lentamente.

Se separa, recostando su frente en mi hombro y hago una mueca por el tamaño.

—Despacio... —Murmuro.

—Lo estoy siendo, cariño... —Responde de la misma forma, besando la línea de mi clavícula.

Lo abrazo por la espalda cuando la siento completamente, su torso sube y baja totalmente agitado y ni siquiera ha embestido.

—¿Quién es tu novio? —Pregunta mientras la saca lentamente, para volver a meterla de la misma forma.

—Emil... —Suelto un jadeo cuando se hunde de manera brusca.

—No lo repetiré otra vez, Tanya, ¿Quién es tu novio? —Hace que lo mire a los ojos, ahora moviéndose más rápido.

—Em... —Tira de mi cabello, dejando mi cuello libre para meterse ahí y morderme—. ¡Ugh, animal! —Le grito casi en un gemido y lo siento sonreir.