El Idol y la Rosa

Capítulo 34

YOONGI

INFANTIL SITUACIÓN II

Fue una carrera de diez minutos hasta la casa de Yoongi, con un Jimin de sonrisa traviesa concentrado en llegar primero, una camioneta llena de risas con Jungkook grabando todo y Suga serio tras el volante intentando dar alcance a Jimin el cual llegó primero que todos.

Suga alcanzó a ver como el menor de cabello naranja se baja de su auto y sale corriendo hacia la puerta de su casa, teclea la clave y entra.

¡"AAAAh tendré que cambiar esa clave"!

Yoongi se mal estaciona detrás de él y corre hacia dentro mientras Jin empieza a estacionarse también frente a la casa de Suga.

Cuando Yoongi llega a la puerta deja de correr y entra a la casa lo más natural posible, no quiere que Julieta lo vea corriendo como un loco detrás de Jimin.

-Hyung, parece que no está.- Le dice Jimin en susurros.

Suga se deja caer aliviado en uno de los sillones de la sala al tiempo que cinco voces sostienen una plática "casual" mientras entran por la puerta haciendo a Jimin reír por la mala actuación de sus hermanos y les dice que Julieta no está en casa.

-¿Cómo que no está?- Pregunta Kook indignado dejando atrás su papel de "chico serio llegando a visitar a su hyung"

-¿Es cierto hyung?- Quiso saber Namjoon.

-Es lo que dice Jimin, pero no puedo confiarme ahora de él.- Le dice volteando a ver al aludido con cara de acusación, se levanta y se dirige a la habitación de Julieta para asegurarse que no esté en casa, toca la puerta y no hay respuesta, por lo que la abre lentamente y solo puede ver la habitación vacía y la puerta del baño un poco abierta con las luces apagadas, definitivamente Julieta no estaba en casa. Yoongi no supo a quién agradecer por la suerte que había tenido.

Regresó a la sala para enfrentar a todos sus amigos.

-¡Ya! ¿Cómo es posible que todos hayan venido? Regresen al departamento antes de que regrese Julieta.

-No lo sé, pero prefiero estar aquí.- Dijo Jimin dejándose caer uno de los sillones.

-Tú no tienes derecho a estar aquí, por tu culpa ahora todos los miembros vinieron.- Le recriminó Yoongi al tiempo que le estrellaba un cojín en la cara al aludido.

-Pero Hyung, es mi amiga.- Dijo mientras quitaba el cojín de su cara y hacía un corazón con sus brazos sobre su cabeza. Yoongi solo pudo voltear los ojos.

-"No tiene remedio"- Pensó.

-No es tú amiga.- Inició V.- En cambio mía sí que lo es, me preparó hot cakes deliciosos y además dormí con ella en su cama.-

-¡¿Sigues con eso?!- Taehyung se echó a reír mientras Yoongi se aventaba sobre él para después tomar otro cojín y golpearlo con este.

-¡Tienes que explicarnos bien eso hyung!- Gritaba JK a V mientras Yoongi seguía golpeándolo con el cojín bajo la vista de todos los miembros, V sin embargo, reía por la reacción de su hyung.

-¡Ya basta!- Pidió Jin, Yoongi paró inmediatamente de golpear a V ante la orden de su mayor.

-No, ya basta ustedes.- Dijo Yoongi casi en un berrinche.- ¡Regresen todos al departamento! Aishhh. No es momento para que estén molestando.

-Vamos.- Inició RM.- Suga y Jin hyung tienen razón, debemos regresar al departamento, ya le seguimos el juego a Jimin, fue divertido y todo. La Rosa de hyung no está aquí demos volver, hemos actuado impulsivamente y ahora quizás la situación se pudiera tornar un poco incomoda para nuestro Hyung.

-¡Pero hyung!- Se quejaba Kookie.

-Pero nada, hora de volver.- Dijo Jin.

-Yo opino que esperemos solo unos minutos más.- Dijo J-Hope con una sonrisa.

-Hobi...-Habló Yoongi con voz baja.

-Solo bromeaba.- Dijo con una risa nerviosa.

-Yo no quiero irme.- Hizo un berrinche Jimin mientras se levantaba y volvía a tirarse al sillón.

-Anda vámonos.- Lo jaló por una mano V. Jimin se dejaba caer aún más poniendo su cuerpo completamente flácido dificultándole la tarea a V.

-Tú no te quejas porque ya la conociste.- Le decía con un puchero Jimin.

-Sí, y además dormí con ella.

-Aigoooo.- Yoogi volvió a tomar un cojín y lo estrelló contra la cabeza de V con un poco de más intensidad haciendo que todo el relleno de plumas se esparciera por la sala, la cabeza de Teahyung y además del cuerpo completo de Jimin quedaron cubiertos por las plumas.

-¡Hyung! ¿Tengo un compromiso dentro una hora, como voy a llegar lleno de plumas?- Preguntaba indignado Jimin mirándose completamente cubierto por ese material.

-¿Qué importa? De todas maneras en el fandom te representan como un pollito.- Respondió Yoongi riendo al ver a Jimin bañado en plumas blancas y escupiendo unas cuantas que se pegaron a su boca.

-¡Aaaah!- Gritó Jimin haciendo su tercer berrinche en menos de diez minutos. Tomó otro cojín, abrió el zipper y lo estrelló contra la cara de Yoongi.

-¿Pero qué....?- Se quedó de una pieza Yoongi viéndose él y los demás envueltos en plumas blancas.

Esto generó un descontrol total, los chicos empezaron a golpearse con los cojines decorativos unos contra otros haciendo que algunos otros se abrieran y se esparcieran las plumas de su relleno por todas partes, mientras Yoongi les pedía que se fueran, qué no podía entender hasta donde llegaba su nivel de chisme, qué nunca les presentaría a Julieta y que cambiaría la contraseña de su puerta y cochera y que nunca más serían bienvenidos en su casa, todo esto entre risas por parte de los miembros, golpes furtivos de los menores hacia los mayores, un líder gritando que era como estar de nuevo en el MV de "Run", un Hobi girando y haciendo pasos de baile entre plumas y la risa característica del miembro mayor resonando de fondo mientras peleaba, como siempre, contra el menor del grupo. Todo esto pasaba cuando de pronto todos se quedan en silencio mientras Yoongi seguía encima de V golpeándolo con otro cogin y este solo se cubría la cara entre risas.

El silencio hizo que Suga volviera la vista hacia donde todos sus amigos miraban y se quedó de una pieza al ver que Julieta estaba parada en la puerta de la casa, riendo bajito y ocultando su risa tras su mano.

"No puede ser"- Se quejó mentalmente Yoongi al verla al tiempo que sentía como la temperatura de su cara se elevaba, indició que se le habían subido los colores a la cara. Quería desaparecer a todos, incluido a él mismo, al ser encontrados en tan infantil situación.