PAPARAZZI
-Cállate nos van a oír. – Le decía un peligris de labios regordetes detrás de sus lentes oscuros, a pesar de que ya era de noche, a un chico rubio de pestañas enormes, que intentaba esconder su cabellera bajo un gorro mientras estaban escondidos detrás de los muchos arbustos que adornaban los caminamientos del lugar.
-No lo harán, porque parece que están dormidos, las luces de la casita no se han prendido desde hace horas. – Le responde este despreocupado.
-¿Pero están seguros que eran ellos? – Pregunta ahora el pelinegro menor de los tres, que siempre terminaba arrastrado por las ideas locas de sus hermanos mayores.
-Sí, sí. Eran ellos, alcanzamos a ver cuando entraron en la cabaña, pero no han salido. – Responde el bello niño de labios grueso.
-Y qué tal si se fueron. – Dice el menor. – Han pasado horas y no hemos hecho vigilancia continua, quizás salieron y no nos dimos cuenta.
-Claro que no, nos habríamos dado cuenta, tienen que pasar por enfrente de nuestra habitación si salen.
-Aigoo, esto es muy mala idea. – Dice por primera vez el mayor de todos desde que salieron de la casita que habían rentado para los cuatro.
-Hobi hyung, tú fuiste el que sugirió la idea, no te estés quejando. – Le dice riendo Tae.
-¡¿Yo?! ¿Cuándo hice eso?
-Cuando Jimin dijo que Julieta noona se vería muy bonita con un hanbok, después de escuchar decir a Jin que le compraría uno a Suni antes de ir a verla. – Responde Tae.
-Sí y fue ahí que todos acompañamos a Jin hyung para comprar uno también para noona. Y tú dijiste que estaría perfecto que lo usara ahora en su viaje con Suga porque estarían en un lugar tradicional. – Dice con las manos en la cintura Jimin.
-¡Agáchate te van a ver! – Dice JK jalando a Jimin de nuevo para que se escondiera.
-¡Otokke! – Se queja J-Hope. – Yo solo dije que estaría bien que usara uno aquí, no que usara precisamente ese que le compramos.
-Pues como sea, ya estamos aquí. – Dice Tae. – Solo es cuestión de darle el hanbok a noona sin que Suga se dé cuenta.
-Eso será difícil. Parece que siempre están juntos. – Dice Kookie.
-¡Claro que están juntos! ¿Pues que esperaban? – Les dice Hobi.
-Que Yoongi hyung no fuera tan asfixiante. – Dice riendo Jimin, haciendo reír a los demás.
-¿Quién lo diría de él verdad? – Pregunta V. -Siempre mostrándose tan indiferente con todos y serio y resulta que ha generado un apego con noona.
-No es apego, es amor. – Dice Kookie.
-Aaaagh.- Le responde V.- Eres demasiado romántico Kookie. Tienes que será más...más...¿cuál es la palabra?
-¡Cállense! ¡Ya salió Suga! – Grita en susurros Jimin.
-¿Por qué parece algo triste? – Habla V.
-¿Se habrán peleado por algo? – Pregunta preocupado Hobi.
Yoongi apenas da unos pocos pasos como dirigiéndose hacia la otra casita, cuando se abre nuevamente la puerta y por ella sale Julieta.
-¡Tendremos reconciliación en vivo! – Dice emocionado Kookie.
-¡Shhh! – Lo hacen callar todos a la vez.
-No alcanzo a oír lo que están diciendo. – Se queja V.
-Eso no importa, tampoco quieran ser tan entrometidos. – Los regaña Hobi.
ESTÁS LEYENDO
El Idol y la Rosa
Hayran KurguDos vidas completamente diferentes unidas por la casualidad. La historia de cómo Min Yoongi conoce a esta chica en medio de la multitud y como Julieta sin darse cuenta fue "víctima" de un plan que la llevó a encontrarse con uno de los idols más fam...