¿QUÉ?
YOONGI
Era todavía temprano por la mañana, aún no había amanecido e incluso la alarma todavía no había sonado cuando se despertó. Miró a su izquierda y pegada a él estaba Julieta, con una de sus piernas sobre él, sonrió para sí y se acercó para depositarle un beso en el cabello. La amaba, la amaba demasiado.
Le pesaba mucho tener que desprenderse de ella ese día, pero al día siguiente por la tarde-noche estaría de regreso para disfrutar el resto de la semana juntos, tenía muchas ganas de salir con ella a algún lugar solitario y disfrutar de una fogata al exterior, aunque quizás ella padecería un poco el frío, tendría que probarlo para saberlo.
Siempre le había parecido tan cursi la frase "soy el hombre más afortunado del mundo" y sin embargo, él ahora se consideraba el hombre más afortunado del mundo; tenía una carrea profesional estable y creciente, tenía independencia y estabilidad económica, su salud mental había mejorado mucho, pero su vida se había completado desde que Julieta estaba con él.
Se rio al darse cuenta de que ahora entendía a su hyung, a Jin, cada vez que hablaba maravillas y cosas melosas sobre "su Suni", suponía que sentirse así era sentirse feliz con la vida. El amor que sentía por Julieta era por mucho muy diferente y más intenso que cualquiera que hubiera sentido antes y al mismo tiempo era mucho más maduro, no había celos ni recriminaciones por parte de ninguno, había mucha comunicación y sinceridad por parte de los dos y sobre todo compresión. No servía de nada la comunicación si no había compresión entre ambos.
Yoongi salió de la cama muy lentamente para no despertar a su novia, canceló su alarma antes de que sonara para que no despertara a Julieta y pudiera dormir un poco más y entró en el baño a tomar una ducha. Su mente se iba a las dos últimas noches y los besos que había compartido con Julieta, su cuerpo era suave, perfecto, lleno de curvas y aunque ella parecía no notarlo era muy, muy sensual. A propósito, giró el monomando de la regadera a frío para hacerlo regresar a la realidad o su mente le seguiría llevando a recorrer el cuerpo de Julieta en su memoria. Solo emitió una queja y apretó las mandíbulas cuando el agua fría le tocó la piel.
Salió rápidamente de la regadera para vestirse, afuera hacía ya mucho frío y le esperaba más frío aun estando en la playa al aire libre, con el clima de prácticamente invierno y vistiendo ropa de verano, solo faltaban unos días para el cambio de estación.
-Ya estás despierta. – Le dice Yoongi a Julieta al verla sentada en la cama con una taza de café en la mano recostada sobre la cabecera.
-Sí, te hice café. – Le dice extendiéndole un termo negro.
-Muchas gracias. Y perdón sí te desperté.
-No te preocupes, no me despertaste tú, más bien me despertó tu ausencia. – Yoongi solo sonrió sintiéndose conmovido.
-Ya debo irme.
-OK. – Le responde su novia saliendo de la cama y colocando la taza de café sobre la mesa de noche y una vez más vistiendo su playera blanca, dejando al descubierto sus piernas. También traía calcetas calentitas que le llegaban hasta las pantorrillas haciendo que sus piernas se vieran aún más atractivas. Quería sacar su celular y hacerle todo un estudio fotográfico, se miraba preciosa.
De manera discreta sonrió para sí porque su galería ya tenía muchas fotos de ella que tomó mientras dormía el día anterior.
La miraba y se la quería comer a besos, se veía muy tierna y bonita. Ambos salieron de la recamara y una vez más al llegar a la puerta que comunicaba con la cochera Yoongi la abrazó y le llenó la cara de pequeños besos haciendo que ella riera con esa risa bella que le encantaba.
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El Idol y la Rosa
FanfictionDos vidas completamente diferentes unidas por la casualidad. La historia de cómo Min Yoongi conoce a esta chica en medio de la multitud y como Julieta sin darse cuenta fue "víctima" de un plan que la llevó a encontrarse con uno de los idols más fam...