Capítulo 89

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DESTRUIDA

JULIETA

Aun era muy temprano cuando Yoongi se despidió de ella, y cuando regresó para seguir descansando no supo si hacerlo en su recamara o en la de su novio. Con una sonrisa traviesa abrió la puerta de la recamara de Yoongi y de un brinco se hundió en la cama pero a pesar de que era en realidad muy cómoda no era lo mismo si no estaba él, aún así volvió a dormir un poco.

Ya más entrada la mañana le mandó un mensaje a Mi Suk.

-Mi Suk. ¿Estás disponible hoy?

-Por favor dime que me invitas al karaoke, dime que me invitas al karaoke.

-Te invito al karaoke.

-Aaaaaaaaaaaaaaaah, ¡prepararé mi garganta para gritar! ¿Qué noticia me tienes que me citas en el karaoke? ¡Muero por saber!

-Es más una consulta, pero aún así creo que gritarás :D

-¡Que emocionante! Oye, yo también quiero platicarte algo y de hecho proponerte algo ;)

-¿A sí? ¿De qué se trata?

-Te lo digo hoy, solo que sería en mi break de comida, ¿te parece bien? Y pediré una extensión de tiempo para hablar tranquilas.

-No hay problema por mí. ¿A qué hora nos vemos entonces?

-¿A la una está bien?

-Muy bien. ¡Muero por verte!

-¡Yo también!

"¿Qué querrá proponerme Mi Suk?"

Julieta empezó a hacer su día normal, que en ese día era solo comer, terminar la piñata de Tae y esperar que regresara Yoongi al día siguiente. Sobre el departamento que le proponía rentar para ella, lo vería con Mi Suk, quería saber su opinión.

La mañana se le fue pronto entretenida con la piñata, la terminó ese mismo día y la guardó en la parte alta del closet. Tomó un baño y se arregló para ver a su amiga, aún faltaba una hora, por lo que tomó su bolsa y su laptot y se entretuvo en buscar departamento en zonas privadas de la ciudad, le daba curiosidad saber en cuanto estarían las rentas.

"¡Dios, nunca debí buscar esto! ¡Son carísimos!"

Julieta no podía con el remordimiento de saber que Yoongi tendría que pagar tanto dinero para que ella estuviera en un lugar así, pero al mismo tiempo sabía que las cosas serían mucho peor si no lo hacia y se quedaba en el departamento que su agencia le había dado.

El sonido del teclado eléctrico de la puerta principal la hizo poner en alerta, ¿quién sería? Yoongi estaba fuera de la coudad junto con los chicos. Julieta casi se echa a correr a su recamara, para esconderse, pero recordó que era lunes, por fin conocería en persona al ama de llaves, solo se habían dejado notas en papel, donde Julieta le pedía algo y ella le respondía, incluso una vez apartó un poco de arroz con leche para que ella también lo probara, recibiendo ella de vuelta un refractario lleno de un postre tradicional coreano que le encantó.

Julieta se paró con una sonrisa, lista para recibirla y frente a ella se personificó lo que se pudiera llamar una belleza coreana en toda la extensión de la palabra. Una chica delgada, muy delgada, de piel blanca, alta y con una melena lacia y rubia, vestía un traje blanco con detalles negros, Chanel, una bolsa negra le colgaba de un hombro y a pesar del frío exterior solo calzaba unas zapatillas de tacón de aguja.

"Es demasiado elegante como para venir a limpiar"

-Así que era verdad. – Dice la chica entre sorprendida y afligida.

El Idol y la RosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora