CORAZON TIBIO
YOONGI
Yoongi no cabía de la felicidad, entró en su habitación y se quitó el gorro gris que traía puesto y el hoodie rosa que Jin había comprado para él y los acomodó en el enorme walkin closet que tenía en su recamara. Solo podía sonreír ante la expectativa de saber que Julieta estaría aún cuatro meses más en su país, tendrían el tiempo suficiente para hablar tranquilamente sobre qué deberían hacer, si ella querría volver y establecerse en México o si querría estar en Corea o quizás quisiera estar unas temporadas al año en cada país. No pensaría demasiado sobre eso en ese momento, solo quería tomar una ducha y celebrar con Julieta.
Para cuando salió a la sala, ya en su típica ropa para descansar, pans negro y camisa oversize blanca y pantuflas, Julieta aún no estaba ahí, así que se dedicó a sacar los diferentes tipos de quesos que había en el refrigerador, también había uvas y recordaba tener algunas nueces en la alacena.
Con dedicación cortó los quesos y los acomodó sobre una tabla junto con las uvas y las nueces. Ya estaba terminando cuando Julieta sale de su recamara con su nueva pijama blanca de gatitos.
-¡Es muy suavecita! – Dice acercándose a él en la cocina.
-Te queda bien. – Le responde dándole un beso en la frente cuando ya la tenía al lado.
-Gracias.- Le responde Julieta. - ¿Necesitas ayuda?
-Ya estoy terminando, no te preocupes.
-Perdón por tardar, guardé todas las cosas que tú y los chicos me regalaron en el closet.
-Está bien. ¿Quieres comer aquí o en el comedor?
-¿Te parece sí nos sentamos en la sala?
-Me parece bien. – Le dice sin perder oportunidad de darle nuevamente un beso en los labios antes de que ella se sentara en la isla para esperarlo.
-Todo se mira muy bueno.- Escucha decir a Julieta a sus espaldas mientras él sacaba las copas de los gabinetes.
-¿Quieres vino tinto o blanco?- Le pregunta a su novia.
-Tinto, por favor. – Yoongi saca de su cava refrigerada un vino tinto, lo descorcha y sirve en ambas copas, para después darle las copas a Julieta y él tomar la tabla con los quesos y acomodarla en la mesa de centro y regresar por la botella para después acomodarse en la sala al lado de su novia.
-¿Sabes qué me gusta de ti? – Le dice de pronto Julieta.
-¿Qué cosa? – Pregunta curioso Yoongi dando el primer sorbo a su vino y siente cómo baja por su garganta y le calienta el estómago.
-Que siempre que estas en casa estas en pijama o en pans o vistiendo algo muy cómodo. – Yoongi ríe algo avergonzado. Eso sonaba como alguien perezoso, pero si lo pensaba bien él se consideraba un perezoso en rehabilitación forzada, porque con el trabajo que tenía, no podía ser tan perezoso como a él le gustaría.
-Y a mí también me gustar estar cómoda. – Le dice ahora Julieta. - Así no me veo presionada a andar todo el día en tacones o muy arreglada.
Yoongi solo sonríe, le agrada que Julieta se sienta en la confianza de ser ella misma a su alrededor y que se sienta cómoda de vestir cómo quiera.
-Sería raro que ambos estuviéramos vestidos de manera elegante en casa ¿no crees?. – Le dice Yoongi. – Pero también hay que admitir que cualquiera que nos viera lo haría extrañado, ¿quién celebra con vino y quesos en pijamas?
-Parece que nosotros. – Le dice Julieta sonriendo.
-Eso parece, bueno yo quiero hacer el primer brindis.- Dice poniéndose un poco serio.- Porque estarás aquí unos meses más. – Dice con su voz grave y pausada. – Y porque eso me hace muy, muy, muy feliz. – Dice mientras cierra sus ojos y asiente con la cabeza para después chocar su copa suavemente contra la de Julieta y ambos darle un sorbo a su copa.
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El Idol y la Rosa
Fiksi PenggemarDos vidas completamente diferentes unidas por la casualidad. La historia de cómo Min Yoongi conoce a esta chica en medio de la multitud y como Julieta sin darse cuenta fue "víctima" de un plan que la llevó a encontrarse con uno de los idols más fam...