Fandom: Kuroshitsuji
Personajes: Sebastian Michaelis, Ciel Phantomhive, Elizabeth Midford, Grell Sutcliff
Canción: "Cementerios de Londres", Coldplay
Sinopsis: Songfic AU ambientado en la celebración británica del Día de Brujas.
Advertencias: Ojo, el drama jamás escapa a mis obras. Menos cuando la señorita Sutcliff está presente. En otras palabras, aténganse a una mezcla de drama, suspenso y terror.
Mansión Phantomhive, 30 de Octubre de 1877
Por la noche iban a caminar hasta el amanecer
La mañana es para dormir
Por las calles oscuras, van buscando, para ver a Dios a su manera
Guarda la noche para tu llanto
Tu llantoUn aplauso sonoro se oyó en la cocina de la Mansión Phantomhive cuando el mayordomo de la misma ingresó al lugar, encontrando a los restantes tres sirvientes en un completo revuelo. La primera en percatarse de la presencia del por demás buen mozo –e igualmente misterioso- mayordomo, Sebastian Michaelis en la sala fue la única mujer entre la servidumbre. Mey-Rin, la sirvienta de la familia; o del heredero de la desaparecida familia Phantomhive, Ciel. La mujer de cabellos lacios a la altura de los hombros y rojizos, más bien similares a un magenta intenso, piel clara y ojos cafés ocultos tras enormes gafas redondeadas se cubrió el rostro al saberse descubierta e inmediatamente se inclinó ante el apuesto hombre de cabello negro y piel pálida, quien solo la miraba fijamente, con un gesto adusto en sus ojos carmesíes.
—Mey-Rin... —dijo Sebastian Michaelis tras unos segundos, relajando sus facciones de manera apenas sutil —Por favor, limpien esto de inmediato. La señorita Elizabeth no tardará en llegar. Por fortuna, los amos Midford han partido a Middlesbrough y no regresarán sino hasta mañana en la tarde...
—S-sí; entiendo, señor Sebastian. Me pondré a trabajar de inmediato...
El pelinegro asintió, cerró brevemente los ojos y suspiró profundamente. Aquel se le había vuelto un gesto tristemente frecuente desde que comenzara sus deberes como mayordomo de la casa Phantomhive. Y los tres jóvenes (en comparación a su longeva existencia, claro estaba) frente a él en ese momento eran el motivo principal de sus suspiros, e incluso insultos silentes, en la mayoría de las ocasiones. Volvió a reiterarles que dejaran todo en orden y preparado en el menor tiempo posible antes de marcharse. A lo cual los tres sirvientes asintieron tanto física como verbalmente.
Sebastian imaginaba que, pasada apenas una hora desde que le sirviera su té de la mañana, su amo Ciel aun estaría en su habitación. Más precisamente, acostado en su cama. Sin embargo, y tan pronto como se acercó a él, el mayordomo pelinegro notó algo extraño en el semblante del joven, e inmediatamente recordó la primera vez que le viera así. Su rostro estaba contraído en un gesto evidente de dolor, aunque no estaba exactamente herido, sino que, en realidad, algo parecía oprimirle el pecho intensamente.
—Joven amo... —dijo apenas en un susurro, apoyando una mano en la frente del menor —No se preocupe; solo intente descansar...
Estaba a punto de marcharse cuando escuchó la voz de Ciel llamándole. Volvió su atención al joven de cabello índigo al ras del cuello y cuyo ojo derecho estaba oculto por un parche y este simplemente le pidió un vaso con agua. No tenía fiebre en ese momento, si eso le preocupaba en modo alguno. Sin embargo, si tenía molestias esporádicas en su garganta, además de una leve jaqueca. Finalmente, señaló que era una orden.
—Está bien; como desee. Creo que será mejor que se quede aquí hasta que venga la señorita Elizabeth. O, de lo contrario, puedo decirle que no saldrá hoy. Lo cual, si me permite decirlo, creo que sería la decisión más sensata si pretende asistir al festival de mañana...
ESTÁS LEYENDO
Anime One-Shots
FanfictionNuevo libro de one-shots (y algunos two-shots) sobre el universo anime. AU y Canonverse.