Rey Demonio (Editando)

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Justo apenas se retoma la interrumpida pelea, Josak es desarmado por el arma del segundo representante de Dai Shimaron y su hacha sale volando. Él es claramente distinto al de antes y sus movimientos carecen de entusiasmo. No tiene tiempo a levantarla y lentamente levanta ambas manos a la altura de sus hombros.

—...Ah...

Flynn solo puede dar suaves suspiros ya que sus cuerdas vocales están comprimidas. Sus lagrimas de dolor hace mucho se han secado y ya no le quedan fuerzas en sus brazos y piernas. La razón de esto es la falta de oxígeno en el sistema circulatorio de su cuerpo. Sus dedos continúan luchando en vano contra esto.

—Observa con cuidado, un destacado soldado está renunciando a su orgullo para salvar a alguien como tú. Es hilarante. Ese hombre es un verdadero guerrero. Las mujeres y los niños nunca entendería esto, ¡pero él es un verdadero hombre que ha sobrevivido al más duro de los campos de batalla!

Para un soldado, sobrevivir a Arnold tiene un significado realmente especial.

—A pesar de eso, está dispuesto a sufrir una inimaginable humillación para salvar a una sola mujer insignificante como tú... si continúan así y pierden el tercer encuentro, entonces me sentiré... ¡¿guh?!

La garganta de Flynn es liberada de repente y una gran cantidad de oxigeno consigue entrar. El cable se ha cortado. Con su cuello liberado, Flynn cae de rodillas. Cuando mira hacia arriba con su vista borrosa por las lagrimas, ve a Maxine observando hacia la puerta con un látigo rosado enroscado alrededor de su cuello y su espada.

Al final de las miradas atónitas de todos se encuentra parada una belleza sin rival en pose gallarda. Tiene el cabello largo ondulado suelto y la piel blanca casi transparente. Sus ojos verdes que recuerdan al fondo de un lago brillan con el deseo de justicia.

—¡Tú, canalla, suéltala de inmediato! ¡Sino mi látigo de la muerte bailará! ¡Nunca perdonaré a aquellos que profanan los objetos de belleza!

—¡¿Quién eres?! ¡Y además, avísame antes de atacarme la próxima vez!

Sin prestar atención a esa ultima parte, la mujer entra la habitación a paso elegante con su látigo en una mano. El cabello rizado del que está orgullosa y que llega hasta su cintura brilla dorado, su arma de la cual también está bastante orgullosa está hecha de un seductor cuero rosa. El látigo es una rara gema creada por un habilidoso artesano, la cual es ligera, estrecha, larga y durable, además de que se puede manipular libremente en el aire.

—¡Soy la hermosa lady soldado que peleará por el amor mientras exista, Cäcilie! ¿Qué te parece? Ya le he dado los planes para una novela a Anissina, pero ella está muy ocupada con sus experimentos y no va a escribirla para mi. ¡De verdad que yo también quiero ser una heroína para todos los niños!

Aunque es un muy buen retrato de ella misma, no hay originalidad en su muletilla. Luego de dar una vuelta, coloca ambas manos tras su cabeza. Esta es la pose sexy estándar. Como de costumbre, su atuendo tiene un audaz recorte y revela toda su espalda.

Maxine, con su mano atrapada por el látigo, dice algo que nunca debería haber dicho. —¿De dónde salio esta vieja ordinaria y exhibicionista?

—¿...Qué dijiste...?

Todos los presentes se congelan de la impresión.

Antes de que Sizemore pueda ayudarle con una larga y apresurada explicación como "¡por favor espere este hombre está mas interesado en niñas pequeñas y tiene problemas psicológicos y no luce como una vieja en lo mas mínimo y definitivamente no es ordinaria!", Lady Cherie hace su contraataque.

—¡Me pregunto que dijiste, no pude oirteeeeee!

El látigo golpea repetidas veces todo el cuerpo de Maxine mas rápido de lo que el ojo puede ver. Como el tiempo entre cada latigazo es muy corto, los gritos de agonía de la victima son todos gemidos monosilábicos como "¡gya!", "¡gyu!" y "¡gyo!". Los gemidos son acompañados por los sonidos de su ropa rompiéndose.