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La luna se ha posicionado mucho más arriba en el cielo que cuando pisamos por primera vez esta finca.

En este momento ilumina brillante la habitación desde el centro de la cuadrada ventana.

Una vieja puerta de hierro rechina y los pies de una mujer se acercan. La razón por la cual no se nota para nada su presencia es porque está descalza.

—Capitán Harry —dice con un tono insinuante y seductor.

—Lo lamento.

Estoy tendido con los brazos y piernas abiertas sobre la cama, por eso ella se sienta en el borde. Su cabello rubio platinado a la altura de las caderas solo se riza en las puntas. Esa parte luce como la orilla del agua al mezclarse con la luz de la luna.

—Siento haberlo encerrado en un lugar como este, pero es usted quien está en falta bajo estas circunstancias. Compartir una bebida con el señor de la finca antes de la cena es de buena educación. A pesar de eso, sus labios ni siquiera tocaron el borde del vaso. Y luego ese hombre insolente...

Cuando Flynn habla de Maxine rompiendo el vaso, se puede notar un curioso desprecio en su tono.

—De verdad que me enoja... Si no fuera el perro faldero del rey, nunca le hubiera permitido entrar a la finca. Incluso se atrevió a poner sus manos manchadas de sangre sobre mis queridos sirvientes...

Ella no menciona que de haberle dado la respuesta que quería, esa chica se hubiera salvado mucho antes.

—No es que lo odie. Solo necesito poner mis manos sobre usted no importa que. Necesito a alguien de sangre Wincott desesperadamente. Quiero que manipule algo con su sangre. Esa "llave" de la terca y dificultosa caja que no se doblegará ante nadie.

Se equivoca. No soy un miembro de la popular familia de la Srta. Julia que sigue siendo nombrada en todos lados. Imaginar su hermoso rostro fruncirse de amargo resentimiento al darse cuenta de su error en un momento crítico alegra un poco mi mal humor.

Aunque, solo un pequeñísimo milímetro.

—Aquí tiene, beba esto.

Como tan solo hablar me cuesta muchísimo esfuerzo, miro a Flynn con sospecha sin siquiera mover la cabeza. Ella sacude su cabeza con una sonrisa amigable.

—No se preocupe, no lo he envenenado. Necesitamos esa sangre para usar una substancia especial que sus ancestros fabricaron. Nunca pensé en matarlo desde el principio. Usted es una parte importante de un arma muy poderosa. Es el único que puede manipular la llave.

Ella presiona el elegantemente adornado vaso contra mis labios e inclinándolo intenta verter la bebida alcohólica en mi boca. Cuando Flynn se da cuenta de que eso no va a funcionar conmigo acostado, toma un sorbo del vino tinto y se inclina sobre mi rostro con los ojos cerrados.

Sus asquerosos labios tocan los míos.

—Descanse, duerma bien. Hasta que necesitemos su poder.

Los fríos dedos que descansan sobre mi mejilla permanecen allí un momento antes de alejarse.

La mujer le da la espalda a la luz de luna y deja la habitación en silencio. Oigo el ruido metálico de la cerradura y como habla con los guardias. Entonces la señora de la casa desaparece definitivamente.

Ruedo sobre mi mismo frenéticamente en la cama y finalmente caigo al piso. Me arrastro hasta la ventana con los codos y las rodillas observando mi sombra dibujada en el piso.

La luna es pálida, blanca y brillante.

Si se me ofrece comida, no debo tomarla sin pensarlo. La razón por la cual podía relajarme hasta hoy es que siempre hubo alguien conmigo para protegerme. Siempre había alguien cuidando mis espaldas.

Pero ahora no hay nadie para probar la comida por mí.

Preparándome, meto mi dedo índice en mi garganta y vomito todo el contenido de mi estómago. Las lágrimas caen naturalmente por mi nariz por el ardor, el dolor y la frustración.

¿Estás bien, Wolf? Sabes tengo una petición para ti Wolfram, si ves que tardo, ¿podrías salvar a Pansy por mí? Descuida, que puedo esperar. No desesperes, que yo estaré bien.

Como si hubiera usado mis ultimas fuerzas, se vuelve difícil mantener los ojos abiertos.

Entonces, como si fuera arrastrado dentro de un agujero de barro negro, caigo dormido solo porque así lo he querido.

Así, cuando llegue la mañana y salga el sol fuera de la ventana, despertare bajo mis propios medios.

Rey Demonio (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora