SUPERNATURAL SHOTS

"SLOW FAST"

-¿Estela? 

La voz de Dean Winchester se proyectó por el bunker con absoluta claridad pero aún así la nombrada no respondió a su llamada. 

Sam dejó la bolsa llena de armas encima de la mesa. 

-Quizás esté dormida -aventuró el alce, a lo que su hermano le respondió frunciendo el ceño-

-Son las 12 de la noche Sammy ¡Es temprano!

-Temprano -repitió el menor soltando una risilla por lo bajo- colocaré esto, tú vete a comprobar

Dean asintió con la cabeza y avanzó por el largo pasillo tratando de ver dónde y qué podía estar haciendo la chica misteriosa como el la llamaba.

Su hermano y él la habían rescatado de un grupo de demonios que intentaban extraerle su magia. Desde entonces se queda con ellos en le bunker, ya que era la única manera de mantenerla protegida.

El cazador escuchó música que salía de una de las habitaciones. Reconoció la voz de Estela cantando con entusiasmo y se acercó con curiosidad a escucharla. 

-Así que acércate, déjame entender el porque, cada vez, que nos vemos siento que se para el tiempo mientras nos comemos rápido lento -tarareaba-

Dean abrió mucho los ojos sorprendido pero eso no le impidió seguir escuchándolo. 

-Bebe tu cuerpo siempre fue mi religión, mi agua bendita siempre tu transpiración 

Vaya eso era... Wow, simplemente, wow 

En ese momento Dean decidió picar a la puerta

-¿Estela? -preguntó y oyó como paraba la música al otro lado- 

La puerta se abrió de pronto, revelando a la joven invitada. Llevaba el pelo color café recogido en un deshecho moño que había intentado que no se le cayera con un lápiz, el cuál ahora se enredaba entre los mechones de su cabello.

Su frente estaba perlada por el sudor y sus ojos marrones le miraban con atención

-¡Dean! Habéis vuelto pronto ¿Ha ido bien?

Este se apoyó contra el marco de la puerta guiñándole un ojo

-Digamos que hay un nido de vampiros menos gracias a los Winchester 

Ella lo miró cruzándose de brazos contra la puerta. Dean se aclaró la garganta.

-¿Qué estabas haciendo, por cierto? Te escuché desde fuera y no quería molestarte es que te llamamos al llegar y no contestaste 

-Así que tenías que comprobar que no me hubiese comido un rugaru o un ángel homicida hubiese decido que era buen día para matar a alguien al azar y me hubiera escogido ¿Verdad? 

-Algo así -confirmó él-

-Estoy bien Dean, solo hacía algo de limpieza, esto estaba echo un desastre

Dean sonrió desviando la mirada hacia el pasillo donde Sam le observaba con la cabeza ladeada. 

-Ya veo que te las apañas muy bien sola, pero ahora ven a cenar, hemos traído hamburguesas 

-¿Del Mike's?

-Sí -asintió Dean- 

-¿Con doble de queso y mucha mostaza?

-Sí -respondió el rubio divertido- 

-Dame 5 minutos y voy para allá -pidió ella cerrando la puerta- 

Segundos después la volvió a abrir 

-¿Has traído tarta?

Dean puso una mano en el pecho como si le hubiesen disparado.