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María abrió por fin los ojos, se sentía agotada, se sentía vacía lo primero que vio fue el rostro de Keyla y Tacia que al verla despertar sonrieron. María se sentía aturdida, y no terminaba de entender que estaba pasando.

- Por fin despiertas - dijo Keyla mientras se acercaba a ella.

Su amiga llevaba algo en brazos, algo que se movía. María reacciono al fin y entendió donde se encontraba y recordó todo. Se levanto y extendió sus brazos, su amiga sonrió y puso a su bebe en sus brazos. María lo sostuvo allí sin poder creerlo, aun no lograba creer que hubiera nacido.

- Es una niña - dijo Keyla alegre mientras se sentaba a su lado.

María observo a la bebe, la invadió un sentimiento de amor que jamás había sentido antes, nada se comparaba con la sensación de tenerla entre sus brazos. Era tan pequeña y hermosa.

- Te desmayaste justo después de que naciera - dijo Tacia mientras se acercaba con una copa en la mano - toma un poco de agua, deberías comer también.

María tomo la copa y sintió como la pequeña se movía contra su pecho, eso sorprendió a María.

- Debe querer comer - dijo Keyla.

María tomo rápidamente el agua y entrego la copa a sus amigas. Descubrió uno de sus pecho y la niña empezó a succionar.

- ¿Cómo se llamara? - le pregunto Keyla.

No pudo evitar sentirse mal con esa pregunta, María no había pensado realmente como se llamaría si era mujer, ella esperaba que fuera varón y llamarlo Guillermo como su padre o Erik como el de Andros. Pero había sido una niña, una niña hermosa. Aunque no se parecía mucho a ella, tenia cabellos negros como los de Andros y sus ojos verdes tan intensos que lo caracterizaban. Las lagrimas le recorrían las mejillas mientras observaba a su bebe, a su princesa.

- Miriel - dijo finalmente - se llamara Miriel.

Sus amigas sonrieron.

María termino de alimentar a la bebe que se había quedado dormida en sus brazos, le había resultado difícil entregársela a Keyla para que pudiera comer algo, no queria despegarse de ella por nada del mundo. Mientras comía vio por la ventana, como habían dicho un nuevo invierno terminaba, pronto los ejércitos del norte volverían a marchar contra el sur.

- Díganme - dijo mientras dejaba a un lado el plato - ¿ya se están preparando?.

Si majestad - dijo Tacia mientras tomaba el plato y se lo llevaba - planean partir en unos días para reforzar e asedio de Idma, dicen que las defensas no podrán durar mucho mas.

- ¿Y los ejércitos del usurpador?.

Keyla volvió y se sentó a su lado, en los últimos meses, que habían sido los mas difícil del embarazo tuvo que delegar mucho en los demás y Tacia era su representante en las reuniones y siempre le traía las noticias y decisiones que se tomaban.

- Estaban marchando al norte, pero los Ashterion volvieron a movilizarse a occidente, no tuvo mas opción que dar media vuelta y volver para repelerlos, no podrá ayudar a los defensores de Idma.

María se recostó complacida ante la noticia.

- Pero tengo malas noticias también - dijo apoyando una de sus manos sobre la suya.

- ¿Qué ocurrió?.

- Lord Sunglass cayo ante el enemigo - dijo con lastima en los ojos - las marcas sureñas cayeron.

María se frustro al instante por la noticia, Lord Sunglass había resistido por casi un año a los ejércitos del usurpador y del reino de la Urna, había ganado tiempo, un tiempo que ahora María sentía que desaprovecharon.

LegitimaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora