VI- El djinn

1.1K 143 59
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Podría decirse que hay un precioso día soleado en Novigrado. O eso es lo que escucharías de cualquier humano con el tiempo suficiente como para perderlo mirando al cielo porque sí.

Mis ojos están fijos en el lago, a simple vista calmado, de aguas marronáceas.

Con un gruñido exasperado, recojo de nuevo la red vacía.

Mis sentidos de brujo escuchan los pasos mucho antes de que me vean a mí.



-Nilfgaard puede besarme el trasero.- Masculla enfadado la voz masculina de Jaskier. Se queda parado cuando me reconoce.- Oh, dioses. ¿Geralt? ¿Cuánto tiempo ha pasado desde la última vez? ¿Meses? ¿Años?

-Hmmm.



No el tiempo suficiente, desde luego. Pensé que la suerte me había sonreído cuando hacía tres años que Jaskier había decidido probar suerte por su cuenta por las múltiples cortes del Continente, siguiendo cosechando la fama que la canción sobre el Lobo Blanco había sembrado.

Cuando vuelvo a escuchar su voz, levemente más madura, pero con la misma necesidad de mover la sin hueso que siempre, siento que no han pasado más que minutos y ya me tiene cansado.



-Sí, bueno, yo también me alegro de verte.- Responde a mi gruñido, acostumbrado a mi parquedad en palabras.- Igualmente, ¿qué es el tiempo? Oí que estabas en la ciudad, pero no esperaba encontrarte tan pronto.- Ya está sólo a un par de pasos de mí, y veo con el rabillo del ojo como parece haberle ido bien. Lleva un traje azul que parece de una buena seda, aunque no ha engordado tanto como se espera de alguien que ha vuelto a tener banquetes noche sí, noche también.- ¿Me estás siguiendo, bribón?- Bromea con una sonrisita. Pero yo no estoy para bromas, y lo ignoro, volviendo a lanzar la red.- Me siento halagado, pero de veras tendrías que buscarte un hobby mejor.- Continúa su monólogo de humor y bebe un trago de su petaca.- ¿Quieres un poco?- Suelto otro bufido cuando el resultado de la pesca vuelve a ser negativo.- "¿Qué tal?" te oigo preguntar...

-No he preguntado.- Gruño, con menos paciencia incluso que la habitual en mí.

-Bueno, ¿por dónde empiezo?- Continúa, ignorándome, deseoso de contarme sus aventuras y penurias que no me interesan lo más mínimo.- La condesa de Stael, mi musa, la más bella de este mundo, me ha dejado. Otra vez. Fría e inesperadamente, debo añadir. Me temo que moriré con el corazón roto.- Se lamenta teatralmente. Y observa cómo me muevo para lanzar la red a otra parte del lago.- O hambriento, desde luego. A menos que alguien comparta pescado con un viejo amigo...- Prueba con una indirecta muy directa. Por supuesto, no había aprendido a sobrevivir por sí mismo. Ignorándolo, me alejo un poco más intentando encontrar algún movimiento en el agua que me dé una pista.- ¡Oh, perdona, es cierto! No usamos amigo todavía. Tal vez sea mejor esperar otra década.- Exclama airado y sarcástico, asumiendo, como siempre, que todo se reduce a él. Como ve que no le hago caso, concentrado en mi búsqueda, se apura a seguirme.- Geralt, eres bueno en muchas cosas, pero la pesca no es una de ellas. ¿Acaso has pescado algo hoy?- Lanza una pulla, esperando a que reaccione.

THE WITCHESS //  The Witcher fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora