LII - Duty is the death of love.

176 21 6
                                    

Bajamos la ladera de las montañas de Caingorn en un silencio tormentoso tras recoger nuestras cosas

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Bajamos la ladera de las montañas de Caingorn en un silencio tormentoso tras recoger nuestras cosas. Jaskier balbuceaba detrás intentando seguirnos el ritmo a la vez que quería apaciguar los ánimos con una inútil esperanza.
Soltamos con rabia las cosas en el suelo y Geralt y yo nos enfrentamos cara a cara. Las yeguas comenzaron a relinchar, contagiadas del ánimo venenoso que se respiraba en el ambiente.

—¿Es cierto que Vesemir es uno de tus objetivos?—Suelta la liebre el Brujo. Me cruzo de brazos a la defensiva.
—Ha estado envuelto y fue el primero que me vendió y traicionó, así que claro que está en mi lista de enemigos.
—Yo mismo tardé mucho tiempo en perdonarlo y lo culpo de muchas cosas, pero comprendo también que estaba en una posición difícil...— Retrocedí sin aliento, con sus palabras como una bofetada.
—¿Lo defiendes? Después de saber todo lo que ha pasado... ¿lo defiendes ante mí?— Los ojos comenzaron a escocerme con la traición. Levanta las manos en señal de paz.
—La última vez que estuve en invierno en Kaer Morhen, ni siquiera sabía que tú eras The Witchess. Seguía pensando que estabas muerta...
—Y tú corriste a abrirle los ojos.— Interrumpo cabreada. Niega vehemente con la cabeza.
—Estaba arrepentido de lo que había hecho, me explicó su punto de vista, y, aunque no lo compartía entonces ni ahora, pude llegar a entenderlo.— La rabia comienza a bullir en mis venas y el ardor amargo de la traición se saborea en mis papilas.— Desde tu desaparición hace 70 años y con ella, la última oportunidad de crear brujos, Vesemir no sale de Kaer Morhen. Sólo se dedica a realizar pócimas y armaduras y a mantener un hogar para que los Brujos que sobreviven tengan a dónde ir en invierno. Continúa haciendo estudios de los monstruos para
intentar aumentar el éxito de los brujos en la lucha y que no muramos como ratas.— Explica vehemente.
—Es muy conmovedor que defiendas a tu padre, pero, ¿eres tan crédulo de creerte que alguien cuyo propósito vital es evitar la extinción de los Brujos va a quedarse de brazos cruzados sabiendo que su oportunidad sigue ahí fuera? Me vendió una vez cuando era una cría que dependía de él completamente, ¿crees que ahora tendrá una pizca de reparo en deshacerse de alguien que ni siquiera conoce y que tiene el doble de poder y fuerza para aumentar su éxito?— Intento que abra los ojos.
—Vesemir no te hará nada, me lo prometió.— Insiste iluso, deshinchándose al ver que no voy a dar mi brazo a torcer.
— Desconfía de un viejo en una profesión donde los hombres acostumbran a morir jóvenes.— Respondo con inquina, dejándole claro que en este Continente sólo sobreviven aquellos que no tienen escrúpulos.
—Me prometiste que ya no buscabas venganza.— Ahora es él el que se muestra herido y traicionado, como si no acabara de echarme a la cara que comprende las razones de aquel que buscó mi desgracia.
—No es venganza, es ley natural: para cada acción hay una reacción.
—Prometes y prometes y nunca lo cumples. La culpa es mía. Te dejo hacerlo.— Y eso sólo enciende más mi rabia.
—¡No te hagas la víctima como si yo te hubiese estado mintiendo todo este tiempo! Yo no tengo la culpa que quisieras creer lo que te convenía. Ya te lo dije: no iré a buscar a mis enemigos para matarlos, pero no me quedaré de brazos cruzados mientras intentan hacerme su marioneta o acabar conmigo. Mas he de decirlo, si los tengo a mi alcance por azares de la vida, no esperaré a que den el primer ataque.
—Si en algún momento llegas a enfrentarte a él, ten por seguro que me pondré en medio de ambos. Y no me hagas elegir, porque no me pondré de tu lado. Como bien dices, lo considero mi padre, y no permitiré que le hagas daño.— Sus ojos mostraban dolor, pero también determinación.

THE WITCHESS //  The Witcher fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora