La Ira Del Bosque

P2. Capítulo 19

Neteyam miró a Aonung los ojos en silencio  y luego se abrazó a él acurrucandose.

Aonung sonrió levemente abrazandole.

-Ma Neteyam, todo va a estar bien mientras sigas confiando en ti tanto como nosotros lo hacemos... no tengas miedo porque no estarás sólo nunca, yo estoy aquí y pase lo que pase no voy a irme a ningún lado... Juntos vamos a poder con esto y más,  ya verás que todo va a salir bien.

Neteyam asintió levemente y sonrió  un poco mirándole.

-No sé cómo lo haces, pero siempre tienes las palabras adecuadas - dijo Neteyam- hablar contigo siempre me hace sentir mucho mejor

-Bueno, tú inspiras esas palabras en mí,  y no vale la pena quedarmelas y no compartirlas contigo - dijo Aonung acariciando la mejilla de Neteyam- ahora sal ahí fuera y demuestra a esos skawxngs quien manda aquí

Neteyam rió un poco, luego asintió  levemente y salió de la tienda,  no sin antes coger su arco con un puñado de flechas.

Aonung salió detrás de él.

Lo'ak en ese momento estaba hablando con Jake cuando derepente empezó a oler algo raro.

-No huele a... ¿quemado?

-Estamos al lado de una hoguera- dijo Jake

-No, ya sé,  pero... huele como más fuerte... - dijo Lo'ak como si algo más se estuviera quemando.

Neteyam salió de la tienda y al sentir ese olor a quemado, miró hacia el cielo unos segundos, se empezaba a ver humo negro y como restos de cenizas flotando en el ambiente.

-Mierda... - dijo Neteyam y entonces llamó al palulukan, reunió a toda la gente de la tribu y les ordenó tomar sus armas. El momento de luchar por lo que era suyo, había llegado.

Neteyam no esperó a nadie y se subió al palulukan y fue a buscar el origen de aquel incendio.

El pánico ya había cundido entre los allí  presentes y Neteyam era consciente de que esta vez debía dar la cara por ellos, no solo por él mismo, sino por todos los demás.

Cuando encontró las llamas arrasando  todo a su paso, impasibles hacia los ruegos de los animales cuyos hogares estaba destruyendo. El palulukan empezó a retroceder pero Neteyam sacó el arco y miró hacia las llamas directamente.

-Sé que estáis aquí,  si tanto me queréis muerto, venid a por mí,  pero dejar en paz a este bosque cuyos habitantes no os han hecho nada malo. - dijo Neteyam, entonces entre carcajadas y con antorchas lo rodearon un grupo de na'vis de las cenizas.

-Que pena, ahora no tienes a tu novio para salvarte el culo - dijo Zilaw.

Neteyam tomó una flecha y le miró mal.

-Ni te molestes, estás rodeado y el bosque ya está destrozado, no le quedan muchas horas en pie. Es mejor que te des por vencido.

Neteyam se negaba a dejarles ganar, al menos no mientras siguiera vivo. Sacó  su daga y se bajó del palulukan.

- No voy a rendirme, no ante vosotros, este es mi hogar y mi gente y para acabar con ellos tendréis que pasar por encima de mi cadáver- el thanator rugio con fuerza resolviéndose, tenso. Sacaba sus dientes a relucir en forma de amenaza mientras se aseguraba de proteger a su jinete.

-Muy bonito de tu parte, pero no solo vamos a pasar encima de ti, sino de todo el bosque y nos encargaremos de someter a toda esta gentuza a la que llamas pueblo y haremos de vuestro hogar cenizas, no quedará ni rastro de lo que era. Ni tu diosa os va a salvar esta vez. Deja de pensar que eres una clase de elegido, porque solo tuviste un golpe de suerte - dijo Zilaw y les hizo un  gesto a unos que sacaron unas dagas.

Neteyam se puso en alerta mirandoles, al ver que uno se intentó acercar hizo el amago de intentar clavarle la daga, solo para amenazar.

-Tienes razón, la gran madre no toma posiciones a favor de nadie y menos cuando se trata de sus hijos - dijo Neteyam mirandole- por eso no vengo a atacar solo vengo a defender, a proteger lo que Eywa nos ha dado. No tienes derecho a quitarnoslo. Reza a tu dios, porque la mía ya me ha escuchado y no dudes que caerá la ira de este bosque sobre vosotros.  Pensais que vuestras llamas son devastadoras, pero más lo son nuestras ráfagas de viento y nuestros compañeros del bosque. No estás quitando el hogar a los omatikaya, no te confundas. Se lo estás quitando a ellos - dijo mirando hacia atrás, habían llegado más thanators - y meterte con ellos, con nosotros y con todos los habitantes de este bosque, te va a costar muy caro Zilaw...  - soltó la daga. - matarnos entre nosotros no nos dará lo que buscamos. Sé que no hemos sido justos con el trato a vuestra tribu, todos hemos hecho las cosas mal, pero una guerra no lo arreglará...

Zilaw rodó los ojos.

-Deja de hacerte el filósofo - dijo acercándose Zilaw con la daga pero el thanator rugio haciéndole que retrocediera.

-Tienes dos opciones Zilaw... u os retirais o os haré arder con las pautas llamas con las que habéis prendido mi hogar. Porque quizás mi diosa no tome posiciones pero yo si las tomo - dijo tomando el arco apuntandole con una flecha- y no me voy a andar con tonterías.

Neteyam se estaba manteniendo los más firme que podía,  pero al ver como todo se consumía bajo las llamas, su corazón se encogia en su pecho, adolorido y entristecido al ver todo lo que conocía destruirse. Ahora entendía como se había sentido su madre en la guerra. Ahora ya entendía el sufrimiento que estaba por llegar.

"Por favor, gran madre, tú que todo lo puedes, salva a mi pueblo de esta desdicha, yo me ofrezco a cambio... pero no dejes que paguen justos por pecadores" pensó Neteyam para sí.

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Necesitamos alguien con quien revivirlo, que ha este paso la bandeja de mensajes se nos llena de polvo 😂

Un beso a todos de parte del admin 🫶

De parte de Lo'ak, necesita una hermana pequeña a la que molestar, así que help. SOS