P3. Capítulo 8

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Neteyam miró mal a Aonung.

-Vuelve a llamarme mono y te arranco los ojos cara de pez

Aonung le miró alzando las cejas.

-Está bien... está bien... solo era una broma... - suspiró y miró a otro lado.

Neteyam no dijo nada y se quedó mirando al techo en silencio esperando a que Ikeym despertara.

Ikeym se despertó al rato y Neteyam, luego de un rato salió de allí solo y se fue a buscar cosas para hacer el tocado de Aonung como le había dicho.

-¿Por qué papá está enfadado?- preguntó  el pequeño

Aonung le miró y le revolvió el pelo.

-Yo, que soy un desastre y se me olvida que cosas no debo decir.

Ikeym asintió  levemente,  después  él y Aonung salieron a buscar a los primos de Ikeym para que fuesen a jugar. Lo'ak los acompañó yendo con Aonung hablando mientras los niños jugaban.

Neteyam había recogido algunas flores porque le habían gustado y se las había puesto por algunas trenzas para adornar su pelo. Luego tomó las cosas para hacer el tocado de Aonung y caminó de regreso a la tienda. Pero antes Tsireya lo interceptó y le hizo que fuese con ella para qué la acompañara a ir a lavar unas telas al río.

Luego de lavar todo, Neteyam cargó con la cesta por Tsireya y comenzaron a caminar hacia la tienda. Entonces empezaron a escuchar las voces de Aonung y Lo'ak que estaban discutiendo.

Neteyam al oír eso, dejó la cesta y fue rápidamente a ver que pasaba, al ver a su hijo llorando, se acercó rápidamente a él  y lo tomó en brazos acurrucandole.

-Tranquilo mi vida, ya estoy aquí,  papá se encargará de esto, tranquilo- intentó consolar a su niño, pero como este estaba asustado de los gritos y los otros dos ya estaban por pegarse de puñetazos, entonces Neteyam bajó a Ikeym al suelo, se acercó muy enfadado  por ver que habían hecho a su hijo llorar. Les tomó del pelo a ambos y les estampó las cabezas, la de uno contra la del otro.

-Auch! - dijo Lo'ak haciendo una mueca de dolor

Aonung se mordió la lengua oara no insultar a Neteyam porque eso le había dolido muchísimo.  Neteyam por su parte tomó a los dos de las orejas.

-Panda de insensatos, sois peor que críos, ni para vigilarlos un rato valeis, skxawgns. Cómo oiga llorar a mi hijo una sola vez más en vuestra presencia os arranco las trenzas a los dos para que andeis listos, ¿entendido?

-Joder, controla a tu novio- dijo Lo'ak a Aonung mientras se flotaba la frente con la mano por el dolor.

-¿Yo? Si hombre, controlalo tú que es tu hermano.

Neteyam les miró mal, seguían siendo igual de estúpidos apesar de que ya estaban más cerca de los treinta que de los veinte.

Neteyam agarró a Aonung de la trenza y le miró.

-No veas que ganas me están entrando hoy de arreglarte la cara a puñetazo eh - dijo enfadado

-Amor, pero si es él,  no te enfades conmigo - dijo Aonung asustado

Neteyam lo miró a los ojos.

-Me la sopla quien haya sido, tú has participado, tienes casi 30 años, comportate un poco, que ya eres padre y al niño lo tienes traumado con lo animal que eres. Estoy muy decepcionado, con los dos, habéis pasado media vida juntos y seguís llevandos a patadas, yo no voy peleando me por ahí con Tsireya

-No es lo mismo- dijo Aonung

Neteyam le miró de reojo.

-Vete a la mierda Aonung. - los soltó a los dos, luego se acercó al pequeño que estaba llorando y se colocó de rodillas enfrente de él.  - Mi amor, no llores... lo siento mucho - dijo Abrazando a Ikeym-  no va a pasar esto de nuevo mi vida, no tengas miedo, papá estará contigo- Neteyam dio un beso en la cabeza a Ikeym y le estuvo abrazando hasta que ya estaba más calmado. Entonces lo tomó en brazos levantándose y salió fuera se allí con el pequeño.

Lo'ak miró a Aonung y río.

-Pringao, hoy te toca dormir fuera de la tienda - Ríe un poco

-¡Lo'ak!- dijo Tsireya mirandole frunciendo el ceño y cruzandose de brazos.

-Perdona amor, lo decía de broma - dijo disculpándose y luego miró a Aonung.- preparate amigo, a ver cómo lo arreglas ahora sin que te mate en el intento.

Aonung le miró mal.

-Esto es tu culpa.

-Lo que tú digas cara pez

Aonung lo miró mal y salió de allí para ir a buscar a Neteyam y a su hijo.

Neteyam estaba en la tienda con Ikeym, estaba sentado en el suelo con él sobre sus piernas, abrazandole mientras le contaba un cuento para ver si así se le terminaba de pasar el susto.

-Un día, hace, mucho, mucho, tiempo, en un bosque, un pequeño na'vi llamado...

-Runsra - dijo el pequeño queriendo participar en la historia, Neteyam sonrió levemente.

-Runsra... jugaba con sus hermanos en la orilla del río, todos se lo estaban pasando muy bien, pero en un momento dado, los amigos de Runsra se tuvieron que ir a casa y él se quedó solo... al principio estaba asustado porque el bosque era peligroso para un niño tan pequeño... sin embargo pronto empezaron a escucharse sonidos provenir de los arbusto y Runsra llamó a su mamá llorando porque estaba asustado. Para la sorpresa del pequeño Runsra, de los arbustos salió una pequeña atokirina que se posó justo en su nariz - dijo tocando la nariz del pequeño provocando que este riera un poco.

-¿Y qué pasó con el niño?- preguntó Ikeym

-Pues... - en ese momento Aonung entró en la tienda y Neteyam al verlo dejó de hablar mirando a otro lado.

Aonung les miró y suspiró levemente.

-Neteyam... - dijo mirandole- por favor...

-No quiero hablar ahora, además nos has interrumpido el cuento - dijo Neteyam esperando a que se fuera.

Ikeym estaba en silencio mirandoles a ambos. Entonces se acercó a Aonung y le tomó de la mano tirando de él hacia Neteyam.

Neteyam miró a su hijo y luego miró a Aonung.

La Ira Del BosqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora