Especial • Ahn Eun Byul

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Desearía que esto fuera solo un juego, para poder comenzar de nuevo. Pero supongo que tengo que lidiar con este, lidiar con este mundo real.❞

——Jamais Vu; BTS.

¿Nunca les ha pasado que cometen un error, sufren las consecuencias y aprenden de él, pero al poco tiempo lo están repitiendo de nuevo? Bueno, creo que esa es la diversión de mi vida.

Solía ser así. Cometí errores en mis pocos años de vida, tuve que pagar con las consecuencias de los actos, aprendiendo en el proceso; sin embargo, en una situación parecida volvía a cometer ese error, y así sucesivamente.

No me comprendía, de verdad que no. Yo era una persona rara por naturaleza, algunos me denominaban así, para otros era un símbolo de carácter y fuerza. No podía negar que mi personalidad no tenía ni un ápice de flexibilidad, era una chica difícil. Siempre miraba a todos de manera superficial, nunca me interesó crear amigos; prefería mil veces estar en una esquina estudiando a que salir con gente que no me traería nada bueno al futuro.

Al menos así pensaba yo.

También mi forma de ser influía en todo. Al ser un tanto dura, fuerte y seria, la mayoría de los estudiantes me trataban con respeto. Nadie, absolutamente nadie, se metía en mi camino o me hablaba para alguna estupidez. Y yo me sentía tranquila por eso.

Pero claro, como ya había dicho ahí arriba, tenía la horrible costumbre de cometer los mismos errores una y otra vez por culpa de no pensar claramente antes de actuar, y debido a eso fue que las cosas comenzaron a cambiar notablemente.

Yo di el primer paso, sí, pero si él no me hubiera sacado de mis casillas ese día... tal vez no tendría que estar contando mi vida en este justo momento.

A veces simplemente quería que esto fuera un juego para poder reiniciar la partida una y otra vez hasta que saliera a mi gusto, pero por supuesto, tenemos que vivir en la realidad.

¿Estás curioso? Si, sabes que detrás de todo esto hay una historia oculta; eres muy consciente de que mis actos se deben a algo más. Pero toma calma, debemos ir paso a paso.

Soy originaria de Seul. Algunas veces viajaba a otras provincias de forma momentánea por el trabajo de mis papás, pero nada relevante. Mi condición económica siempre fue estable; tener una familia de abogados y personas relacionadas con la ley era lo esencial.

Y por supuesto, yo debía seguir el ejemplo.

Mis progenitores siempre quisieron que yo continuara sus pasos. Decían que con mis cinco años de edad podían sentir mi vocación hacia la abogacía, pero les haré una pregunta a todos: ¿Qué niño de tal edad puede comprender esas cosas? Era super inteligente, demasiado para ser apenas una cría, no obstante, se suponía que debía vivir esa etapa.

Bueno, mis padres no estaban de acuerdo con eso.

Ellos me querían, me mimaban en determinados momentos, eran dulces conmigo... Pero en la mayoría de las ocasiones siempre me trataban como a un adulto en su primer día de trabajo.

Me hacían rellenar papeles, expresar mis opiniones sobre actos correctos e incorrectos, tuve que aprenderme muchísimas leyes, así como aprender a llevar distintas reglas conmigo.

Todo abogado tenía su carácter, sí, pero eso no significaba que fueran de piedra. Otro error de mi familia para la colección.

Ah, y las reglas, obtenía un castigo si no cumplía con estos parámetros:

Ser cien por ciento estudio, eso incluía nada de amigos.

Tenía que estar con expresiones serias, fuertes. No podía llorar por más que quisiera.

still with you • j.jkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora