Part. 64 (Montaña rusa)

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Garu

La feria termina y es hora de las rondas nocturnas de Garu.

La aldea finalmente quedó algo desolada por la hora y finalmente hay un poco de tranquilidad en Sooga.

La hora de dormir del ninja pasó hace mucho tiempo pero ahora al ser el protector de Sooga debe dar vueltas por la aldea al menos 2 veces por la noche.

El ninja de coleta camina con la cabeza gacha mientras juguetea con su catana, piensa en lo sucedido con Pucca y por sobre todo su reacción.

-Necesito verla-murmura el ninja decidido.

El pelinegro se dirige al Goh-Rong con rapidez y salta hacia el techo del restaurante, justamente frente a la ventana de su amada.

Los nervios se hacen presentes y la duda de tocar la ventana aparece, por un momento quiere irse y ver a Pucca después, luego de armar un plan para contentarla, pero la ventana se abre de golpe dándole en la nariz justo antes de poder irse.

-¡¿Garu?!-dice Pucca sorprendida al ver a Garu allí.

-Quizá me lo merezco-murmura el ninja tapando su nariz con sus manos.

-Lo lamento, vamos, entra-dice Pucca jalando a Garu dentro de su habitación.

El chico entra frotándose la nariz y se sienta en la cama. No puede evitar mirar toda la habitación, hace mucho que no entra y ese momento la situación es algo surrealista.

-¿Qué hacías en la ventana?-pregunta Pucca colocando un pañuelo con hielo en la nariz de Garu.

-Estaba haciendo mis rondas nocturnas y el techo del Goh-Rong es de los más altos, es más fácil visualizar todo-dice rápidamente Garu mintiendo descaradamente.

-Eres muy malo mintiendo-Pucca ríe mirando a Garu con diversión.

-En realidad quería disculparme por lo ocurrido...-dice Garu apenado por lo que pasó en el viaje a la luna.

-No fue tu culpa, no te preocupes-Pucca pasa con delicadeza el pañuelo por la nariz de Garu y se quedan mirando a los ojos.

-Necesito decirte algo-Garu toma de la mano a Pucca y la mira con preocupación.

-Si es algo sobre el corazón en tu pecho, ya hablamos de eso-Pucca suspira mirando hacia otro lado.

-No, es sobre Yum-el ninja habla con seriedad captando la atención de Pucca.

-¿Qué pasa con él?-Pucca enarca una ceja confundida.

-Existe la posibilidad de que quizá te hechizó-Garu mide sus palabras para no enfadar a la pelinegra aunque sabe que no lo consiguió porque la joven aprieta su agarre.

-¿De qué hablas? ¿Crees que no puedo enamorarme por mi cuenta de él?-la pelinegra se enoja.

-No, no hablo de eso-Garu la suelta para frotarse el rostro-Es que me lo ha dicho Tobe.

-¿Tobe? ¿Desde cuándo crees en lo que dice Tobe?-Pucca enarca una ceja.

-Desde lo que pasó con Chief.

-¿Con Chief? Pero los vimos enamorados.

-Exactamente. Tobe me dijo que no es algo que él quiera, es que simplemente fue culpa de una poción.

-¡Enamorarse no se decide!

-¡Pero Tobe nunca lo haría! Enamorarse es un error-el ninja resopla.

-¿Error?

-Sí, error, lo sabes muy bien, por eso muchas veces intenté controlar mis sentimientos. Para un ninja enamorarse no es correcto.

-Para mí enamorarme no fue un error a pesar de lo mucho que me lastimaste y me lastimas-Pucca se pone roja del enojo-Y te informo, debiste imaginar que no estaría enamorada de ti toda la vida-la joven se levanta y se acerca a la ventana para abrirla-Tu nariz se ve bien, es bueno que continúes con tus rondas.

Ella es mi noviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora