Part. 67 (Caer bajo)

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Garu

El pelinegro resopla con frustración, no sabe en qué momento se dejó llevar pero lo que sí sabe es que por no controlar sus emociones por poco le hace daño a Tobe y eso es algo que el ninja no quiere en realidad.

Su mirada viaja por su entorno y ve a Pucca picando a Abyo con una rama. El ninja ríe ligeramente ante la escena de su amigo desmayado en el suelo y Pucca confundida intentando averiguar si se encuentra vivo.

-Está bien, no te preocupes-dice Garu acercándose hacia sus amigos.

-¿Seguro? Parece que estuviera en otra dimensión-Pucca observa al moreno con duda.

-Estoy más que seguro, no te preocupes-el ninja sonríe a medias-Solo estaba entrenando y pues... no hacía silencio-la pelinegra le lanza una mirada de reproche-¡Él se lo buscó!-se justifica el joven.

-Tus entrenamientos han dado grandes frutos, supongo que te funcionó alejarte de mí-Pucca sonríe con nostalgia y Garu carraspea un poco incómodo.

-En realidad me gustaba que interrumpieras mis entrenamientos, era una forma de mantenerme en forma-murmura el ninja un poco sonrojado ante la confesión.

-¡Muchacho, al fin te encuentro!-dice el Maestro Soo apareciendo sobre su nube-Necesito que hagas una tarea importante.

El ninja se queda firme esperando órdenes y Pucca se queda observando la escena un tanto incomoda de estar allí.

-Necesito que vayas a Japón y me entregues un paquete de parte del Maestro Kou. Esta nube te llevará hacia tu destino. Debes volver con el paquete a salvo-ordena el Maestro Soo haciendo aparecer una nube frente a Garu.

-No le fallaré-dice Garu inclinándose en muestra de respeto y el Maestro Soo desaparece.

El ninja se sube a la nube pero antes de irse cae en cuenta de que Pucca sigue allí así que la observa con algo de inquietud. Nuevamente su deber de ninja había logrado que la olvidara.

-¿Quieres venir?-pregunta Garu con una pequeña sonrisa-Será divertido, como en los viejos tiempos donde me ayudabas a completar mis misiones.

-Pero Abyo sigue acá tirado-Pucca mira con un poco de preocupación al moreno que se encuentra en posición fetal chupando su dedo pulgar. Aún dormido.

-No te preocupes, Mio lo cuidará-Garu mira a su gato que acababa de aparecer caminando-¿Cierto, Mio?-el ninja sonríe mirando a su pequeño compañero.

-¿Miau?-Mio maúlla con confusión mirando a su dueño.

-No se ve muy convencido-Pucca sonríe con nerviosismo.

-Estarán bien. Si Mio no quiere que le racione el alimento debe completar su misión-Garu ríe tomando a Pucca de la mano y montándola en la nube con él.

El gato se queda mirando de mala manera a su dueño pero finalmente decide cuidar al moreno mientras despierta, aunque sabe que igual Garu no le racionaría el alimento, su deber como Gato ninja es seguir órdenes.

Garu sonríe cuando ve a su gato negro sentado al lado de Abyo observándolo así que puede irse tranquilo junto con Pucca. El viaje en esa nube sería rápido así que quizá podrían caminar un poco por las calles de Japón antes de regresar.

-Hace tiempo no teníamos una aventura como cuando éramos niños-dice Pucca sonriendo y mirando el mar bajo ellos.

-Si. Pero podremos divertirnos ahora, el viaje que tuvimos a Japón cuando éramos niños no fue tan malo-menciona Garu recordando ese día.

-Fue muy divertido, en especial cuando luchaste con esos hombres enormes y usaste el uniforme típico de ellos-Pucca ríe con complicidad colocando sus manos sobre su boca.

Ella es mi noviaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora