79

126 18 48
                                    

A media noche, Jughead tuvo un extraño presentimiento que lo hizo abrir los ojos y cuando se dió cuenta estaba totalmente solo en la cama.

Betty no estaba.

Se sentó sobre la cama de golpe y encendió la lámpara, pero era evidente que Betty no estaba en la habitación. Él se levantó y salió de la habitación, caminó por el pasillo y cuando bajó las escaleras alcanzó a verla en la cocina con un tarro de helado y una cuchara en mano.

—Betty...— La llamó, acercándose a ella con una ceja alzada. —¿Qué estás haciendo?—

Betty dió un pequeño salto del susto y soltó un suspiro cuando vió que era el. —Maldición Jug... Casi me haces dar a luz aquí mismo—

—Amor... ¿Pero qué haces? ¿Por qué estás comiendo helado a ésta hora?— Le preguntó, con los brazos cruzados.

Betty se encogió de hombros, llevándose otra cucharada de helado a la boca. —Porque tenía hambre y se me antojó este helado de vainilla—

—No es sano comer helado a media noche mi amor. Vamos a la cama, debes descansar— Exigió Jughead.

—Solo un poquito más de helado— Pidió Betty, mirándolo con ojos suplicantes. —Por favor...

Jughead suspiró. —Dos cucharadas más y a la cama, ahora—

Betty se comió las dos últimas cucharadas que exigió su esposo y luego subió con él las escaleras, con dificultad. Igual Jughead le tenía toda la paciencia del mundo y eso no le molestaba para nada.

Llegaron a la habitación, fueron a la cama y se acostaron, pero Betty estaba muy inquieta y Jughead podía sentirlo. Él estaba de espaldas hacia ella, pero sentía lo mucho que se movía.

Jughead suspiró y se sentó sobre la cama,  mirándola. —Bebé... ¿Qué tienes? ¿Por qué te mueves tanto?—

—Estoy incómoda, me duele todo el cuerpo y no puedo dormir— Explicó, sentandose sobre la cama lentamente y mirando a su esposo. —Tengo hambre—

—¿Hambre?— Preguntó Jughead, frotándose un ojo. —¿Quieres que baje a la cocina a prepararte algo?—

Betty asintió, jugando con su cabello rubio alborotado. —Por favor...

Jughead sonrió y besó su frente. —Estás muy consentida mi vida—

—Pues es tu culpa y apúrate, tenemos mucha hambre— Dijo Betty, acariciándose el vientre.

—¿Y qué quieres que te prepare mi reina?— Le preguntó, levantándose de la cama.

—No lo sé, tal vez unos sandwiches con mucho queso— Pidió. —Y limonada. No... Mejor leche tibia—

Jughead sonrió con diversión y plantó otro beso en su frente. —Ya voy, no tardaré. Te amo—

—Te amo Juggie— Contestó la rubia, viéndolo salir de la habitación.

Jughead salió de la habitación y fue hasta la cocina, tomó el pan, queso y jamón y empezó a preparar dos sandwiches para su esposa y también leche tibia para ella.

Cuando terminó, colocó los dos sandwiches en un platillo y lo puso junto al vaso de leche en una bandeja para entonces subir a la habitación que compartía con su esposa.

Iban a ser las una de la madrugada y aunque Jughead tenía sueño quería complacerla como fuera. Cuando entró a la habitación, ella estaba sentada al borde de la cama y se veía pensativa.

—Amor... Aquí está lo que me pediste— Avisó Jughead, entrando a la habitación y dejando la bandeja en la mesita de noche para sentarse al lado de su esposa en la cama y acariciar su espalda. —¿Ahora qué ocurre?—

Betty lo miró con los ojos cristalizados. —Estaba pensando. Estaba pensando en lo increíble que eres, Juggie. No sé cómo aguantas tantos berrinches, antojos y caprichos míos. Pero siempre me complaces sin quejarte y me cuidas aunque yo me enoje y te grite. Te amo Jug—

Jughead sonrió y besó su mejilla mientras le acariciaba la espalda. —Y es lo menos que puedo hacer por ti mi amor. No es fácil llevar a otro ser vivo dentro de ti. Desde que quedaste embarazada solo te he visto sufrir con los síntomas y ahora con el peso de nuestra bebé dentro de ti... Es realmente difícil y por eso quiero hacer que este proceso sea lo más cómodo posible. Te amo demasiado y nada de lo que haga o diga me alcanzará para agradecerte el simple hecho de ser mi esposa, compañera... Estar conmigo, haberme dado una hija y ahora otra con la que viene en camino—

Betty sonrió y se limpió una lágrima que se le había escapado. —La que está agradecida contigo soy yo. Te amo, gracias por siempre estar para consentirme—

—Siempre estaré, hermosa. Ahora prueba los sandwiches que te traje— Pidió, tomando la bandeja con los sandwiches y la leche y pasándosela a su mujer.

Betty se terminó los sandwiches que le hizo su esposo, se tomó el vaso de leche, el ojiazul llevó la bandeja a la cocina y regresó a la cama con la rubia, abrazándola por detrás, sintiendo su calor y hasta su panza de ocho meses de embarazo.

—¿Sigues despierta mi amor?— Le preguntó Jughead en un susurro, besando su mejilla.

—Si— Respondió. —¿Por qué?—

—Estaba pensando en el nombre de nuestra bebita— Dijo Jughead, regando besos por toda su mejilla. —Realmente siempre quise una niña hasta que supe que Diego sería varón. Estaba feliz, pero desde que fui adolescente he dicho que quería tener al menos dos hijas y ese sueño se está haciendo realidad—

Betty se giró a mirarlo con cuidado y sonrió. —¿Hablas enserio?—

Jughead asintió, mirándola con una sonrisa. —Gracias a ti ese sueño se está haciendo realidad. Te amo—

—Te amo— Contestó Betty, dejando un pequeño beso en los labios de su esposo. —¿Has pensado en nombres? Yo no tengo ninguno—

—Siempre quise tener una hija y ponerle Samantha— Admitió Jughead, con un brillo en sus ojos. —¿Te gusta? Si no, podemos buscar otro—

—Samantha Jones Cooper— Dijo Betty, con una inmensa sonrisa. —Me gusta cómo suena, realmente me gusta—

—Perfecto, eso quería saber— Dijo Jughead, acariciando su mejilla. —Vamos a dormir mi amor—

Betty suspiró, mirándolo. —Quiero tener sexo—

—¿Que?— Preguntó Jughead, con los ojos abiertos como platos. —Pero mi amor... ¿Cómo lo vamos a hacer?—

Betty se sentó sobre la cama y lo miró con perversidad. —Solo debo adoptar una posición cómoda y podemos hacer el amor—











 —Solo debo adoptar una posición cómoda y podemos hacer el amor—

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

😳La Betty anda bien hormonal







Samy ❤️

Mi Otra Mitad "Bughead"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora