En una especie de ciudad con varios hogares y edificios en ruinas puede verse a una mujer elegante y esbelta, además de notoriamente alta.
Tiene piel roja y cabello amarillo blanquecino.
Está vestida con un elegante vestido verde que brilla con varias gemas rojas.
Lleva una cadena de hierro en su mano derecha.
Esa cadena está conectada a un hombre musculoso de cabello naranja que se encuentra desnudo a excepción de un pequeño calzón.
Ese hombre es Rigu, quien está siendo llevado con una cadena atada al cuello.
Varias personas de distintas razas los miran, Rigu tiene la mirada gacha.
- Wow, mira a ese tipo, se ve como un buen producto - Dice un hombre con varios tentáculos en su rostro a modo de barba.
- ¿Crees que esté a la venta? - Pregunta una mujer con alas de mariposa que salen de su cabeza.
- Espero que sí, estoy dispuesta a pagar unos cuantos clinks por él - Menciona una mujer con rostro de serpiente.
La mujer que lleva a Rigu los mira a todos con desdén, como si fueran inferiores a ella.
Al verlo de cerca, es posible notar varias marcas de golpe en el cuerpo del orana, como si hubiera sido apalizado hace poco.
Un hombre orondo de piel negra como el carbón y cabeza cuadrada se acerca a la mujer.
Se ve intimidado, pues ella tiene una fuerte presencia.
- B...Bienvenida, señorita... no recuerdo haberla visto por aquí - Murmura frotándose las manos.
Ella lo mira como si lo despreciara, sus ojos ámbar se clavan en el hombre.
- Pues por supuesto que no me recuerdas, soy Rokkuforu... y desearía no haber venido a este desagradable planeta por mi cuenta - Dice.
- Es un placer conocerla, señorita Rokkuforu, lamento que las condiciones de este planeta no sean las óptimas, pero es difícil mantener un negocio de esclavos sin el Imperio de Freezer dispuesto a negociar con la Patrulla Galáctica - Se disculpa el ser.
- Pffff. - Resopla ella - En el planeta Brench defendían su negocio de esclavos sin necesidad de olerle el culo a Freezer, ustedes son patéticos - Sentencia.
- Pareces omitir la parte en la que la Patrulla Galáctica los detuvo sin dificultad - Menciona un hombre bajito y robusto, tiene un cuerpo enormemente musculoso bajo el traje elegante que porta, su barba negra se divide en dos y recuerda a la aleta de un pez.
- ¡Hm! ¿Y tú quién eres? - Le pregunta la mujer.
- Chapuchai, el guardaespaldas de este negocio, así que no intentes actuar como si fueras la dueña del lugar - Le responde el hombre, quien no se ve intimidado a pesar de la diferencia de altura.
ESTÁS LEYENDO
Dragon Ball: Caminos Cruzados. Segunda Edición
FanficSi llegaste aquí es porque ya leíste la primera edición de Dragon Ball: Caminos Cruzados, y si no la leíste, la siguiente sinopsis contiene spoiler, así que te invito a leerla, está en mi cuenta. Después de haber superado peligros como el viaje a Na...