T3.5. Capítulo 14

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En un inmenso cielo rosado con nubes amarillentas que se extienden hacia abajo, puede verse un pequeño planeta lleno de césped y con una pequeña casa.

En ese planeta, un hombre pequeño y robusto con finas antenas en su cabeza conversa con un joven de piel verde y cabello blanquecino.

- Has aprendido bien, Durian. Cuando llegaste aquí eras un niño flacucho que casi cede ante la desesperación cruzando el camino de la serpiente. Te he enseñado el Kaio Ken como muestra de fe, pero aún considero que necesitas concentrarte en qué quiere tu corazón, sigo viendo unas sombras en ti que podrían crecer hasta hacerte daño - Sentencia el Kaio Sama del Norte.

- ¡Sí, señor! - Exclama Durian con una sonrisa - Tal vez... sí haya oscuridad en mi corazón, pero prometo luchar contra ella y llevar a mi gente a un mejor día - Promete.

 sí haya oscuridad en mi corazón, pero prometo luchar contra ella y llevar a mi gente a un mejor día - Promete

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- Sé que lo harás. Y antes no querías hablar de esto, pero quiero que lo hagas ahora, dime cómo has muerto - Exige Kaio Sama.

Durian cierra los ojos.

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Muchas casas arden fuego violentamente, un delgado Durian con sudor en la frente corre a toda velocidad, tiene una lanza en una mano y un escudo en la otra.

Viste una simple malla azul en todo su cuerpo.

Puede ver cañonazos y disparos provenientes del palacio.

- Esto no puede ser, no puede ser - Murmura el joven.

Repentinamente se cruza a otro soldado de piel verde y cabello naranja.

- ¡Durian, no sigas, no hay esperanza! - Exclama.

Tiene los ojos de alguien que contempló algo que lo horrorizó.

- ¡Tal vez sea un novato, pero prometí proteger a la gente! - Exclama Durian sin dejar de correr en dirección al palacio.

Puede ver decenas de proyectiles volando por el cielo y destruyendo decenas de casas.

< ¿Qué ejército puede estar causando esto? > Se pregunta el joven.

Puede ver que la gente grita y corre, sus compañeros soldados ayudan a evacuar.

Durian corre a una gran velocidad hacia el palacio.

Mientras más se acerca, más cerca de él vuelan los cañonazos, alertándolo del peligro.

Una explosión sucede detrás de él y lo empuja en dirección a las puertas del palacio.

Durian aterriza dolorosamente, pero utiliza su lanza como bastón para ponerse de pie.

Abre fuertemente las puertas del palacio.

Puede ver el cadáver de un hombre barbudo de su misma especie en el piso.

Es el rey.

El rey fue asesinado.

Durian mira hacia adelante con confusión.

Dragon Ball: Caminos Cruzados. Segunda EdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora