MirandaJaquelín . me hizo señas. Para que me acercara al pequeño grupo de tres que se encontraba en la entrada del conservatorio
— miren ya esta aquí — dice señalándome
— hola.
— ellos son Sebastián y Ignacio... y chicos ella es Miranda— ¡bienvenida al equipo Miranda! — dijo Sebastián
— gracias — respondí y los cuatro entramos.— debemos hacer el mejor trabajo periodístico para el proyecto, reflejando la labor que se hace en este lugar — Ignacio me explica mientras avanzamos
— ya me lo había dicho Jaquelín.— Observe el lugar y a lo lejos se alcanzaban a escuchar el sonido de violines, saqué mi cámara y Jaquelín dice — hay que separarnos para tomar fotos en distintas arias.
—es una buena idea— comente.
— bueno entonces hagámoslo — dice Sebastián.
Nos separamos y comencé a caminar por el lugar, por si solo este sitio tenía un encanto mágico. entre por un corredor que me llevo hacia otro sector del colegio; un corredor más amplio que le daba la Vuelta a un jardín central. Que tenía una jardinera flanqueada por querubines que tocaban algún instrumento de viento.
Desde donde estaba podía ver las puertas de los salones que se encontraban cada tantos pasos y si había música saliendo fuera de las puertas abiertas.de repente esas melodías me hicieron pensar en Alai, teníamos un poco más de una semana de habernos encontrado y no nos habíamos visto desde aquel café, me pregunto ¿que estará haciendo ahora?
Seguí mi camino y tomé un par de fotos desde fuera en uno de los salones abiertos estaban tres chicas tocando guitarra y me sonrieron.
Luego seguí mi camino hasta llegar a las escaleras que iban al segundo piso.
Ahí me tope con un área donde al parecer se daban clases de canto y conocí A una Vocal Coach muy amable llamada Elena, la vi tan amigable qué le pedí que si podía hacerle una pequeña entrevista; para el trabajo universitario acepto y me contó cómo había pasado los mejores treinta y cinco años de su vida trabajando en el conservatorio.
Elena era un alma joven y me hizo reír, debo admitir que me quedé en el chisme más de lo que debía pero retomé mi andar.
El tercer piso era la zona administrativa y donde se hallaba los bodegas dónde se guardaban los instrumentos que eran donados para aquellos que no podían permitirse comprar un instrumento musical así que me fui de regreso al primer piso.
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Alai El hijo de La Magia / #PGP2024
Fantasy¿Qué harías si un día descubres que una vieja leyenda contada de boca en boca está ligada contigo? Eso es exactamente lo que Alai. está viviendo... Su madre le guardó demasiados secretos y él no había intentado buscar respuestas, hasta que Miranda...