90: La noche de San Juan

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⚠️ Nota ⚠️
Este capituló tiene Esenas de Violencia física Emocional
Se recomienda discreción.
✨Nota 2✨
Para este capituló tenemos banda sonora una canción. Que puedes escuchar mientras lee el capituló ( es la que yo escuché cuando escribí todos los capítulos a partir del 90 la canción en cuestión es esta: como respirar de Humbe








90:  La Noche de San Juan

No había pasado mucho de que Alai se metió en la cama cuando escuchó otro ruido  fue sutil un par de golpes en la ventana  y  sin pensarlo se sentó.

Se percató que una de las cortinas estaba ligeramente corrida por lo  que pudo ver en la ventana a una pequeña figura: su sombra mejor dicho. por la sorpresa no pudo evitar parpadear y de seguro sus pupilas se dilataron por el asombro.

Y la figura desapareció,  instintivamente llevó las piernas a su pecho bajo la cobija de algodón y Seda negra 

Aunque lo intentó, Alai no pudo dormir durante la noche. El papel con la frase "No estás solo, Alai" seguía resonando en su mente, y la imagen de la figura pequeña en la ventana no lo dejaba descansar.

A la mañana siguiente, su cuerpo lo resentía. Se levantó con dificultad y se vistió automáticamente, sin apenas conciencia de lo que hacía.

En la clase de Rúnicas, Alai se sentó en su asiento habitual, pero su mente estaba en otro lugar. El profesor, Maestro Arin, comenzó a explicar los conceptos básicos de la runa de protección, pero Alai no podía concentrarse.

Sus ojos se cerraban sin querer, y su cabeza se inclinaba hacia adelante. El sueño lo invadía, y apenas podía mantenerse despierto.

Maestro Arin se acercó a él, preocupado.

—Alai, ¿estás bien? —preguntó en voz baja.

Alai se despertó sobresaltado, intentando enfocarse.

—Sí, Maestro —mintió—. Solo estoy un poco cansado.

Maestro Arin lo miró con escepticismo, pero no dijo nada más. Continuó con la clase, dejando a Alai sumido en sus pensamientos.

La figura pequeña, el papel, la frase... Todo se mezclaba en su mente, creando un laberinto de miedo y confusión.

¿Qué querían de él? ¿Por qué lo estaban acechando?

Alai sabía que debía hablar con alguien, pero ¿con quién? Su padre, pero no se sentía cómodo hablando con él de sus inquietudes.

La clase terminó sin que Alai se diera cuenta. Se levantó, junto con los demás estudiantes, y salió del aula en un estado de aturdimiento.

Alai deambuló por los pasillos de la propiedad de la Orden, su mente aún turbada por los eventos recientes. De repente, se encontró con Valery, quien al verlo se apresuró a reverenciarlo, como lo hacía con su padre.

—No hagas eso —dijo Alai, deteniéndola.

—Creí que ya te habías acostumbrado—dijo 
Valery  y sonrió ligeramente.

—Frente a mi  padre es diferente, pero  no me gusta que se humillen ante mí. Solo soy un tipo cualquiera... o bueno, uno como tú —Alai  agregó con una sonrisa.

Alai El hijo de La Magia / #PGP2024Donde viven las historias. Descúbrelo ahora