Regulus notó que James usaba anteojos. Es decir, todos notaron que ese año escolar James comenzó a llevar anteojos. Así que ya no confundía a nadie, ni hacía esa expresión extrañaba cuando le hablabas a unos metros de distancia o se quedaba con la mirada perdida en un desconocido como si fuera un acosador. Era tonto que hubiera esperado hasta su quinto año para eso, pero por fin usaba anteojos.
—¿Crees que a mí me quedarían bien los lentes?
—¿Eh?
—Los anteojos. ¿Qué opinas?
—¿Por qué usarías anteojos, Barty?
—¿Están de moda o algo así? —preguntó Evan, quien tenía su cabeza colgando en la cama— James Potter los usa y las chicas actúan como si fuera un modelo, quizás deberíamos usarlos.
—James Potter usa lentes porque su vista es una mierda.
—¿Cómo lo sabes?
—¿Es obvio?
Si tenía que volver a hablar de James, iba a vomitar. Sí, usa anteojos ahora, ¿y qué? ¿Por qué todos hacen gran cosa de ello?
Uno de los peores castigos es que la persona a la que odia sea tan popular, es como si no tuviera escape, y Regulus era víctima de tal tortura.
Igual es mi culpa, por decirle que le quedaban bien.
Cómo si hubiera decidido usar anteojos por ti, ridículo.
—Bueno, ya que eres oculista, dime si yo los necesito —se burló Barty, gateando hacia él, pero antes de poder alcanzarlo, Regulus lo detuvo, poniendo la punta de su pie contra su pecho.
—Deberíamos usarlos si son populares —Evan hizo su intento de regresar a la cama sin usar la fuerza de sus brazos—. Este año debemos ser geniales, si queremos ser invitados a la fiesta de Halloween.
Cuando el Ravenclaw tuvo una expresión pícara, ignorando las palabras de Evan para intentar acercarse un poco más, Regulus bajó su pie de inmediato, provocando que el peso le arrastrara hacia adelante, teniendo que sujetarse de las rodillas de Reg para no estampar su cara contra el piso.
Aún con esa acción, mantuvo esa sonrisa juguetona, como si disfrutara de molestarlo y de casi haber resultado herido también.
—No seas tan raro.
—Pero lo soy, tú también, y Evan más.
—¿Yo qué? —se quejó el otro, dándose la vuelta y, como de costumbre, perdió el equilibrio y cayó de la cama.
Los tres comenzaron a reír, hasta que Barty dejó de hacerlo, viendo directamente a Regulus, como si tuviera algo que decirle, o como si supiera algo que él no. En realidad, no podía descifrar muy bien aquella mirada, porque sentía que, año con año, Barty cambiaba... Y Evan y Pandora hacían lo mismo. Sentía que solo él se quedaba en donde mismo, y que en algún punto sería incapaz de seguirles el paso a sus amigos.
No le dijo nada. Quizás estaba siendo paranoico y Barty era naturalmente enigmático.
¿Por qué las cosas se volvían más raras año con año?
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