T2: CAP 93

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—¿Qué tal si solo lo confirmamos? Entra al baño y hazte la prueba para asegurarte de que todo está normal, como dices.

Rin entró al baño, su corazón latiendo con fuerza. Mientras esperaba, los pensamientos se agolpaban en su mente imaginaba cómo sería ser madre, cómo reaccionaría su esposo porque nunca había hablado con el sobre el tema de formar una familia después de casarse. Pero más allá de todo, sintió un ligero cosquilleo de emoción. Algo nuevo y desconocido podría estar por llegar, y en ese momento sintió que estaba preparado para lo que fuera.

Neria, desde el otro lado de la puerta, tarareaba una canción para calmarse mientras esperaba. Aunque había bromeado con Rin, ella también estaba nerviosa. Después de todo, un embarazo cambiaría muchas cosas, no solo para la persona que lo esperaba, sino para toda la familia en general. 

Neria, esperando fuera del baño, la miró con curiosidad cuando al fin después de mucho tiempo ella salió con un rostro que no sabría que significaba, tenia la prueba en las manos y no despegaba la vista de ella. 

—¿Y cómo te fue?

—Negativo, te lo dije, todo está bien solo es el estrés—sonrió con tranquilidad 

Por otro lado la rubia de ojos azules la miraba algo desconfiada pero decidió creerle. Cambiándose de blusa y pantalones eligió su atuendo elegante para una ocasión de este nivel, ambas salieron del cuarto, listas para el desfile.

En su Lamborghini rojo, se dirigieron a la catedral todos ya listos siendo despedidos por todo el personal de seguridad. Al llegar, el bullicio de los empleados y el personal preparando la decoración los rodeó. Sesshomaru observó los listones colgando del techo y la pasarela de espejo.

—Está quedando impresionante —comentó, con los ojos recorriendo cada detalle.

Rin, con el ceño fruncido por la concentración, llamó a las modelos para que comenzaran a ensayar. Todo parecía ir bien hasta que Yura, una de las modelos, cayó al suelo con un grito. Rin se apresuró hacia ella para ver como se encontraba. 

—¿Estás bien? —preguntó, preocupada.

Pero no recibió respuesta de la mujer solo vio como aguantaba las lagrimas intentando levantarse pero el medico que habían contratado para estos casos se acerco y la detuvo. 

—Se ha torcido el tobillo, no podrá continuar —informó el experto. 

—No puedo perder esta oportunidad, por favor déjeme seguir señora Taisho —dijo Yura, luchando por mantenerse firme—. Prometo que estaré bien.

—Lo siento pero tu salud es lo primero será mejor que vallas al hospital, Yura. No te preocupes por el desfile.

Neria, que había estado observando desde una silla, se levantó y se acercó con una sonrisa tranquila.

—Si necesitan un reemplazo, yo puedo hacerlo.

Sesshomaru la miró con una ceja levantada, sin creer lo que acababa de decir ella, pero rápidamente la examino y noto que no era lo suficiente alta, podría correr el riesgo de tropezarse con los tacos o peor aun, enredarse con la cola del vestido en frente de miles de personas y siendo el as me reír a nivel mundial. 

—¿Tú? ¿Has modelado alguna vez?

—Sheilong me puso una maestra de modelaje para enseñarme a caminar con tacones altos. Al principio, me caía todo el tiempo, pero ahora soy una experta —respondió con una sonrisa confiada.—Puedo incluso correr y hacer acrobacias con ellos sin tropezar, una nunca sabe cuando puede correr el riesgo de ser perseguida. 

—Los vestidos son pesados y largos, ¿crees que podrás manejarlos?—Rin la miraba atenta esperando alguna respuesta de ella—la pasarela también es algo complicada de manejar y puedes hacerte daño si no tienes mucha experiencia en este tipo de superficie. 

OBSESIÓN #5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora